Tras los muchos correos que me han llegado a mi buzón privado he decidido hacer esta reflexión en público.
El ladrón, para robar, tiene que tener suerte siempre. El policía, para cazar al ladrón, solo tiene que tener suerte una vez
Esta mes, y en particular estas dos semanas, han sido brutales para muchos. Amazon ha pasado de 2800 euros a 2500, Tesla ha ido de 730 a 500, Peloton se ha ido de 130 a 87,...una sangría tecnológica en toda regla. ¿El motivo principal? Hay varios, empezando por el sentimiento de que ya vamos hacia el final de la esa época en el 2020 de la que yo le hablo así que todo lo que subió por estar en casa ahora debería bajar.
No voy a hablar de grandes inversores con datos y acceso privilegiado (¿Tienes ISDA?) sino de gente de la calle como tú o yo. La gran mayoría de los inversores son "momentum", o "casineros" (del casino) que es como a mi me gusta llamarles. Buscan chicharros, cosas que esperan ocurran en el futuro. Arriesgan pero cuando ganan ganan a lo grande.
El problema es que, para ganar, tienes que llegar "entre los primeros" (relatívamente). No voy a hablar de cuando Tesla salió en bolsa, pero los que se metieron en Tesla cuando estaba a 400 euros ahora siguen bien. Los que entraron cuando estaba en 700 euros soñando que se iba a poner a mil (y SE PUEDE poner a mil) pues lo estan pasando mal.
Osea, en una cola de 100 tios debes estar entre los 10 primeros. Y tienes que hacerlo siempre.
En realidad un inversor casinero compra acciones para venderlas, esperando ganar dinero con quien venga detrás. En mayor o menor medida muchas veces ni le preocupan los fundamentales, o el negocio, o quienes son los dueños o el equipo directivo. Lo que quiere es comprar barato y, con suerte, pegar el pelotazo.
No hace falta decir que yo no soy uno de ellos. Yo soy, principalmente, un inversor dividendero-value.
Entre mis inversiones suelo tener un 10% que NO son dividenderas ni creo que lo serán. Otro tanto fueron dividenderas pero ahora mismo tienen el dividendo en suspenso. Y con estas caidas me estoy planteando meterme en no-dividenderas pero que espero llegue el día en el que lo sean.
Mi sueño ideal es no tener que vender jamás nada y vivir solo de los dividendos, porque cuando yo compro una empresa lo hago porque creo en ella. Me gustan o entiendo sus productos, o sus fundamentales, o a su equipo directivo. Me gusta ser dueño (porque lo soy, aunque sea de forma ínfima) de esas empresas. Tengo el derecho, y muchas veces asisto, a la reunión de accionistas de mis empresas.
Así, sigo las tendencias pero solo para modelar mi cartera. Y modifico las tendencias en cada crisis. Yo he tenido carteras con mas de un tercio en petroleo, o carteras con mas de un 50% en tecnología. Ahora mismo mi cartera es predominantemente farmaceutica, y anticipo que tras la siguiente caida mi cartera será de energías alternativas o de temas genéticos o minería espacial. Pero dudo mucho que ese porcentaje de tendencia llegue mas allá del 50% de mi cartera.
Como todos éste mes mi cartera ha perdido valor. Terminé 2020 con un +17% y, tras hacer reset el 1 de enero del 2021, al cerrar el viernes mi cartera "solo" ha subido un 6.57%. Para todos los que estan sufriendo y se tiran de los pelos, mi cartera ni tan mal.
Es mas, ser un inversor value significa que miras a las empresas por su valor real. Que me perdone Elon Munsk, pero por el número de coches que vende no me cuadra su P/E. Como empresa me parece muy buena, pero no me cuadra su P/E así que no quiero meterme en ella. GSK, por otro lado, ahora mismo lo esta pasando mal, pero miro sus productos, sus patentes, y su plan a 5 años vista y si que me cuadra, así que sigo con ellos. Y mientras cuadra y no cuadra en Abril me pagarán la acción a 0.23GBP.
Yo no tengo que llegar primero (aunque es bueno hacerlo). Yo solo tengo que comprar empresas que merezcan la pena. A partir de ahí, si su valor de mercado sube me las quedo, y si baja compro mas.
Para el inversor dividendero estos "malos momentos" son geniales pues permiten que la cartera siga creciendo. De hecho, desde el 1 de Febrero llevo comprados 16 nuevos paquetes de acciones y he añadido cuatro nuevas empresas a mi cartera, famosísimas todas.
Sonará a coña, pero yo para pegar un pelotazo me voy al casino y me siento en una mesa de Blackjack, donde tengo un 46% de posibilidades de ganar. A mi lo que me gusta es ser dueño de empresas, verlas crecer, y ver como casi todos los meses me llegan dividendos.