Eso ahora. Antes lo que más mataba eran las dietas a base de carnes rojas, marisco y vino para los ricos y las de casquería, grasuza de lechón y vino en los pobres... los pobres acababan con el hígado hecho unos astutas de tanto el alcohol (se bebía MUCHO más que ahora) y el sistema cardiovascular hecho una jiga de tanta grasuza, embutidos y casquería, que era lo único que podían comer con proteínas...
De hecho recuerdo vivamente al compañero de habitación del hospital de un familiar, campesino de los que cada vez quedan menos a la "antigua usanza" de manos callosas, ingresado por una operación para "desastascarle" las "tuberías" en general como él decía y de las arterias coronarias de propina, delgado como un junto y todo fibra con no más de 60 años que se quejaba de que el doctor le quería quitar sus desayunos con panceta, bemoles y chorizo y que estaba muy mayor para ponerse a "comer hierbajos hervidos que no sabían a nada", que duraría lo que tuviera que durar y que le dieran por ojo ciego al médico...
Resumiendo: que sustituir el exceso de azúcar y carbohidratos por exceso de carnes rojas, mariscos, casquería y grasuza es una soberana tontería y repetir errores del pasado. Hay que llevar una dieta OMNÍVORA con mayoría de vegetales, legumbres, cereales integrales y pescado con consumo ocasional de carne que es a lo que está adaptado nuestro cuerpo (junto con el ejercicio físico moderado y constante)y poco más, no hay más vueltas...