Remero du merda
Himbersor
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El "horario de verano" paco es otra particularidad de la cultura laboral española.
Habitualmente, si la jornada laboral ordinaria es de 40 horas semanales, en algunos meses de verano suele ser de 35 horas, restando una hora laboral diaria, lo que implica convertir la jornada laboral en intensiva en lugar de partida. Esto, por supuesto, no es un favor por parte del empresario, pues el cómputo de la jornada laboral es anual, simplemente se trata de cómo se distribuyen dichas horas.
Por lo tanto, si el "horario normal" consistía en lo siguiente:
Pasamos a:
Y lo que en realidad pasa, es que simplemente dejamos de trabajar 1 hora al día. No voy a utilizar el término "tiempo efectivo", porque todos sabemos que en las empresas españolas se trata de "echar más horas que un reloj" y calentar silla.
Estos últimos días estoy mucho mejor por la aplicación del "horario de verano". Tengo más tiempo para hacer mis cosas, duermo más, descanso mejor, y tengo una separación efectiva entre los días. Los remeros de cosa sabréis bien de lo que hablo. ¿No habéis tenido la impresión de que cuando estáis volviendo del trabajo el día anterior y volviendo al trabajo el día posterior se trata del mismo día? A mí me ha pasado muchas veces, y con la incorporación del "horario de verano", dicha separación de días se percibe mejor.
La reflexión natural tras esto es comprobar a qué precio tan perversos vendemos todo nuestro tiempo y muchas veces, especialmente a largo plazo, nuestra salud física y mental. ¿Y para qué? Para nada. Para cumplir el horario absurdo que se le ha ocurrido a paco que es el estándar en la cultura laboral española.
Y como el año pasado, no quiero volver a trabajar más con jornada partida, porque se impone 1, 2 o 3 horas de descanso que NO se PAGAN, por lo que el empresario no debería tener derecho a imponer dicho descanso. Si el empresario contrata al trabajador por 8 horas al día, ¿por qué tiene el derecho de retenerlo en su empresa tras la imposición de un "descanso" NO PAGADO de 1, 2 o 3 horas, dependiendo de lo orate que sea?
Imaginaos. Imaginad si solo pudieráis conseguir el 10% de vuestro salario neto de cosa, ya sea vía inversiones, vía otro trabajito, cosas por internet, apuestas deportivas vía matched betting, en teoría podríais trabajar "solo" 7 horas diarias sin jornada partida, tener los mismos ingresos y mantener vuestro nivel de calidad de vida y salud física y mental.
Y esto no es difícil de conseguir. Cuanto más bajo sea tu salario, más evidente se hace esto, lo barato al que lo vendes todo.
Bien, una vez pasada la frontera de conseguir un 10% de tu salario neto por cualquier otra vía, está el tema de cómo gestionar la reducción de la jornada a 7 horas con el empresario paco.
Porque a él le da igual que no necesites el dinero correspondiente a esa 1 hora de reducción, mientras sigues necesitando la cuantía correspondiente a las otras 7 horas diarias. Él quiere un "empleau" a "jornada completa", quiere un remero esclavo que no tenga tiempo para nada más que entregárselo todo a su empresa, ya sea por medio de desplazamientos, comer en la empresa con tuppers recalentados de cosa y las correspondientes preocupaciones y procesos mentales que ocurren en tu mente fuera del horario laboral sobre tareas, reuniones.
Él te quiere ahí, con tu ojo ciego sentado en tu puesto, y a 8 horas con "jornada completa". ¿Qué es eso de reducción de jornada? No.
Tras investigar esta cuestión, la única forma de conseguir una reducción de jornada o cambio de horario laboral es la "conciliación familiar", según el estatuto de los trabajadores, lo que solo podremos conseguir si debemos cuidar a un conviviente que viva en nuestra casa, sea la progenitora, pareja, e hijos. Esto con un poco de morro es fácilmente superable y justificable, especialmente si contamos con familiares de cierta edad o que podamos alegar cualquier cosa, ya que la empresa carece totalmente de cualquier capacidad o autoridad para investigar.
La conclusión que tomo de todo esto, es que parece que algunas personas, empresarios, orates, están empeñados en jorobarle la vida a otras personas esclavizándolos y haciendo que permanezcan en su empresa el mayor tiempo posible. La productividad y la eficiencia son criterios totalmente secundarios.
Habitualmente, si la jornada laboral ordinaria es de 40 horas semanales, en algunos meses de verano suele ser de 35 horas, restando una hora laboral diaria, lo que implica convertir la jornada laboral en intensiva en lugar de partida. Esto, por supuesto, no es un favor por parte del empresario, pues el cómputo de la jornada laboral es anual, simplemente se trata de cómo se distribuyen dichas horas.
Por lo tanto, si el "horario normal" consistía en lo siguiente:
- 8:00/9:00 - 14:00 | "Descanso" de 1, 2 o 3 horas de la jornada partida | 15:00/16:00 - 18:00/19:00/20:00
Pasamos a:
- 8:00/9:00 - 15:00/16:00.
Y lo que en realidad pasa, es que simplemente dejamos de trabajar 1 hora al día. No voy a utilizar el término "tiempo efectivo", porque todos sabemos que en las empresas españolas se trata de "echar más horas que un reloj" y calentar silla.
Estos últimos días estoy mucho mejor por la aplicación del "horario de verano". Tengo más tiempo para hacer mis cosas, duermo más, descanso mejor, y tengo una separación efectiva entre los días. Los remeros de cosa sabréis bien de lo que hablo. ¿No habéis tenido la impresión de que cuando estáis volviendo del trabajo el día anterior y volviendo al trabajo el día posterior se trata del mismo día? A mí me ha pasado muchas veces, y con la incorporación del "horario de verano", dicha separación de días se percibe mejor.
La reflexión natural tras esto es comprobar a qué precio tan perversos vendemos todo nuestro tiempo y muchas veces, especialmente a largo plazo, nuestra salud física y mental. ¿Y para qué? Para nada. Para cumplir el horario absurdo que se le ha ocurrido a paco que es el estándar en la cultura laboral española.
Y como el año pasado, no quiero volver a trabajar más con jornada partida, porque se impone 1, 2 o 3 horas de descanso que NO se PAGAN, por lo que el empresario no debería tener derecho a imponer dicho descanso. Si el empresario contrata al trabajador por 8 horas al día, ¿por qué tiene el derecho de retenerlo en su empresa tras la imposición de un "descanso" NO PAGADO de 1, 2 o 3 horas, dependiendo de lo orate que sea?
Imaginaos. Imaginad si solo pudieráis conseguir el 10% de vuestro salario neto de cosa, ya sea vía inversiones, vía otro trabajito, cosas por internet, apuestas deportivas vía matched betting, en teoría podríais trabajar "solo" 7 horas diarias sin jornada partida, tener los mismos ingresos y mantener vuestro nivel de calidad de vida y salud física y mental.
Y esto no es difícil de conseguir. Cuanto más bajo sea tu salario, más evidente se hace esto, lo barato al que lo vendes todo.
Bien, una vez pasada la frontera de conseguir un 10% de tu salario neto por cualquier otra vía, está el tema de cómo gestionar la reducción de la jornada a 7 horas con el empresario paco.
Porque a él le da igual que no necesites el dinero correspondiente a esa 1 hora de reducción, mientras sigues necesitando la cuantía correspondiente a las otras 7 horas diarias. Él quiere un "empleau" a "jornada completa", quiere un remero esclavo que no tenga tiempo para nada más que entregárselo todo a su empresa, ya sea por medio de desplazamientos, comer en la empresa con tuppers recalentados de cosa y las correspondientes preocupaciones y procesos mentales que ocurren en tu mente fuera del horario laboral sobre tareas, reuniones.
Él te quiere ahí, con tu ojo ciego sentado en tu puesto, y a 8 horas con "jornada completa". ¿Qué es eso de reducción de jornada? No.
Tras investigar esta cuestión, la única forma de conseguir una reducción de jornada o cambio de horario laboral es la "conciliación familiar", según el estatuto de los trabajadores, lo que solo podremos conseguir si debemos cuidar a un conviviente que viva en nuestra casa, sea la progenitora, pareja, e hijos. Esto con un poco de morro es fácilmente superable y justificable, especialmente si contamos con familiares de cierta edad o que podamos alegar cualquier cosa, ya que la empresa carece totalmente de cualquier capacidad o autoridad para investigar.
La conclusión que tomo de todo esto, es que parece que algunas personas, empresarios, orates, están empeñados en jorobarle la vida a otras personas esclavizándolos y haciendo que permanezcan en su empresa el mayor tiempo posible. La productividad y la eficiencia son criterios totalmente secundarios.
