Un estudio global dice que españa es el peor país de europa para ser jubilado y el sexto a nivel mundial

España es el peor país de la Unión Europea para instalarse después de la jubilación y el sexto a nivel mundial, sólo por detrás de Rusia, Brasil, Turquía, Colombia y La India, según el Índice Global de Jubilación de Natixis IM, que tiene en cuenta factores financieros y económicos y también consideraciones como el acceso a la sanidad, las condiciones climáticas, el estado de la gobernanza y la felicidad de la población en general.

Este índice, al que ha tenido acceso EL MUNDO y que se publicará este miércoles a nivel global, monitoriza las economías que forman parte del FMI, la OCDE y los países BRIC -Brasil, Rusia, India y China- y para todos ellos calcula una puntuación media en cada categoría después de hacer encuestas, para elaborar a partir de los resultados un ranquin global.

En 2024, España ha empeorado dos puestos en la clasificación mundial frente al año anterior hasta situarse en el puesto 39 de 44, con una puntuación de 49 sobre 100. Obtiene malos resultados en dos categorías en particular: Bienestar material, en la que puntúa un 16 sobre 100, el tercer peor resultado de la lista tras Colombia y La India; y en Finanzas en la jubilación, donde tiene una nota aceptable (58 puntos sobre 100) pero empeora frente a 2023.

Estos malos resultados no son compensados por las buenas puntuaciones en salud, dado que España destacada por su elevada esperanza de vida (está en sexto puesto en este apartado gracias a su sistema sanitario universal, su dieta mediterránea y su estilo de vida activo); y calidad de vida, donde se mantiene con un 75 sobre 100. En este apartado destacan las buenas notas en agua y saneamiento (15º), factores ambientales (17º) y calidad del aire (22º).

"El desempleo, la renta per cápita y la igualdad de la renta son indicadores de la estabilidad de una economía, y señalan si ésta es buena o no. Por ejemplo, un desempleo elevado es negativo para la seguridad de la jubilación porque significa que hay menos personas que cotizan a los regímenes nacionales de jubilación por reparto, como el sistema de la Seguridad Social de España. Por lo tanto, es un riesgo para los jubilados en la medida en que puede ser un indicio de una economía con problemas en la que tendrán que vivir. La renta per cápita es una medida similar, ya que indica si la economía goza de buena salud y si está creciendo o no", explica a este medio Javier García de Vinuesa, responsable de Natixis Investment Managers Iberia.

Alude directamente a la elevada tasa de empleo que hay en el país -la más alta de la UE- y que, combinada con el envejecimiento demográfico y la preocupante caída de la natalidad, provoca que el ratio de cotizantes por pensionista esté en caída en libre y pueda llegar a comprometer las pensiones del futuro. Aunque hoy en día las pensiones públicas estén garantizadas, parece insinuar que el panorama económico y demográfico podría complicar su viabilidad en el futuro o al menos abocar al sistema a algún tipo de recorte.

Las peores notas las obtenemos en seguridad en el empleo (puesto 44 de los 44 analizados), renta per cápita (29) e igualdad de ingresos (27).

"Los resultados de la edición 2024 constituyen una llamada de atención para España que, de nuevo, es el país con peores números de toda la Unión Europea y que, además, tras el descenso de este año, ha perdido ya 9 posiciones en el ranking global desde el puesto 30 que ocupaba en el Índice Global de Jubilación de 2014, un índice que está diseñado para mostrar dónde se alinean mejor los factores clave para garantizar la seguridad de la jubilación", agrega.

Bien es cierto que Natixis, como gestora de activos integrada por filiales con 1.232 millones de euros en activos bajo gestión, persigue con este tipo de estudios fomentar el ahorro complementario para la jubilación por medio de diversos instrumentos de inversión, pero persigue ese mismo objetivo en todos los países en los que está presente -tiene más de 25 oficinas por todo el mundo- y eso no le impide elaborar una clasificación internacional en función de ciertos criterios.

"Debemos ser conscientes del actual contexto caracterizado por el gran envejecimiento de la población española y el impacto que ello conlleva sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones. España es uno de los países del mundo donde más elevada es la esperanza de vida y donde más se espera que crezca la población mayor de 65 años en las próximas décadas. En consecuencia, es también uno de los países donde más está incrementando tanto el gasto en pensiones, como el ratio de dependencia de la edad avanzada (la relación entre personas mayores de 65 años y población en edad de trabajar).

Teniendo eso en cuenta, los particulares debemos asumir nuestra responsabilidad individual para garantizar nuestra seguridad económica en la jubilación. Si queremos prevenir una crisis de jubilación más adelante, un paso decisivo a tomar ahora es invertir y trabajar con un asesor financiero profesional, para diseñar una cartera resistente y correctamente diversificada, con la que aprovechar al máximo las oportunidades de ahorro que surjan y que contemple soluciones que se adapten a nuestros objetivos individuales de jubilación. Para ello, es fundamental que, como sociedad, sigamos avanzando en materia de educación y cultura financiera, asignaturas pendientes en nuestro país, y que las autoridades públicas impulsen el ahorro a largo plazo", apunta.

Y eso en uno de los países con las pensiones públicas más generosas del mundo. Si no el que más considerando el ratio de salarios medios de la población activa y las pensiones.