El microondas

La lolngitud de onda del microondas se corresponde con la de vibración de las moleculas de agua que es lo que se caliente, por eso las cosas que tiene poca agua les cuestas mas calentarse, y como esel agua lo que se calienta, la temperatura nunca excederá de los 100º que es la misma que alcanza cuando se hierve agua en un cazo con gas... Y las vitaminas se desnaturalizan por efecto del calor, no tiene nada que ver que este provenga de un micro que del fuego, el calor es el mismo, y a partir de ciertas temperaturas se destruyen...

Por cierto imagino que todos los paranoyas del foro saldrán a la calle muy bien protegidos contra los rayos UVA y no irán a la playaa toamr el sol y en varno tambien iránb con managa larga y pantalon largo gorra bufanda y gafas de sol para protegerse de los cancerigenos rayos UVA (que esto si esta demostrado que altera el ADN y por tanto pueden inducir mutaciones)

Lo de la frecuencia de resonancia del agua es un mito muy extendido:

Cómo calienta un microondas o la resonancia que nunca fue
Por Enchufa2 | 08/03/2012 @ 09:30 | Curiosidades, Física | 57 Comentarios

Siempre me sorprendo de lo extendida y aceptada que está la errónea explicación que le atribuye al fenómeno de la resonancia el mérito de ser el principio físico de funcionamiento de los hornos microondas, ya sea en la sabiduría popular como entre los propios físicos. Dicha explicación sostiene que la frecuencia de trabajo de estos aparatos (2,45 GHz) está especialmente escogida por su proximidad con la supuesta frecuencia natural del agua. Debido a esto, las moléculas de agua entrarían en resonancia absorbiendo mucha más energía de la que obtendrían a otras frecuencias. Puede que precisamente aquí se halle uno de los orígenes del miedo a muchas de las tecnologías inalámbricas que utilizan bandas de frecuencias coincidentes o adyacentes (véase WiFi, Bluetooth, móviles, etc.). Nada más lejos de la realidad.

Lo cierto es que la elección de la frecuencia de trabajo no es casual, así en el caso de los hornos microondas como en dichas tecnologías de comunicaciones. Sin embargo, la razón subyacente no tiene nada que ver con la excitabilidad del agua; es más simple. Como sabréis, el reparto del espectro electromagnético está regulado y, en general, se requiere el pago de licencias para su aprovechamiento. No obstante, existen ciertas bandas de frecuencias llamadas ISM (Industrial, Scientific and Medical) que no requieren licencia: cualquiera puede emitir en ellas respetando unos límites. Esto ha hecho que se encuentren saturadas de aplicaciones que se molestan mutuamente.

La elección de frecuencias ISM responde, por tanto, a su gratuidad. La utilización en concreto de la banda de 2,4 GHz, y no otra, en comunicaciones responde a un compromiso: por un lado, en frecuencias más altas se dispone de mayor ancho de banda (caben más datos, a más velocidad) y las antenas son más pequeñas; por otro lado, a medida que aumenta la frecuencia, se encarece el equipamiento para generarla. En el caso de los hornos microondas, el compromiso es similar: a mayor frecuencia, más energética es la radiación y más calentará, pero tampoco queremos que los electrodomésticos se disparen de precio.

Ejemplo de vibración de una molécula de agua
El funcionamiento de un horno microondas se basa en la vibración de las moléculas de agua al ser excitadas por un campo electromagnético debido a que se trata de una molécula polar. Cualquier onda electromagnética aporta energía al medio por el que se propaga, pero, en el caso del agua, se acentúa este aporte a causa de esta vibración. No obstante, hay frecuencias mucho más adecuadas para perseguir ese propósito. Esto se aprecia muy bien en los diagramas de absorción en función de la frecuencia y el medio: es decir, la energía que pierde la radiación (y que gana el medio, que se calienta) a diferentes frecuencias.

En la figura 2 se aprecian sendas curvas para el oxígeno (línea continua) y el agua (línea discontinua). Se ve claramente que la frecuencia de 2,4 GHz no es nada especial en cuanto al calentamiento del agua se refiere (y hay que tener en cuenta que esta curva se corresponde con el vapor de agua: para agua líquida, los valores de absorción son menores). Sí que hay picos de absorción (frecuencias de resonancia, podríamos llamar), pero son tan lejanos que se sitúan por encima de los 100 GHz.

La capacidad de calentamiento se sustenta, por tanto, en la potencia. Potencia, potencia y potencia dentro de una cavidad que hace rebotar las ondas una y otra vez. Así, cualquier frecuencia es capaz de cocinar alimentos. De hecho, el primer microondas utilizaba radiofrecuencia en el rango de los 10-20 MHz.

Cómo calienta un microondas o la resonancia que nunca fue — Amazings.es
 
La leche se pasteuriza a una alta temperatura durante un periodo de tiempo muy corto. Cuando se aplica el calor a la leche, para su pasteurización industrial, por lo que se, se calienta al pasar por un tubo metálico calefactado. En este proceso hay poca presencia de oxígeno y la leche es sometida a una alta presión para evitar la ebullición de la misma, en el interior del tubo. Con lo que la oxidación del colesterol no es posible o se dificulta en gran medida. También hay que tener en cuenta que el tiempo de exposición de la leche a altas temperaturas para su pasteurización se reduce a unos pocos segundos, con lo que también es posible que la oxidación del colesterol se dificulte aun más.

La leche al contener una gran cantidad de agua, y siendo el agua un elemento que a presión ambiental, nunca puede calentarse a más de 100 grados, evita que otras sustancias contenidas en la leche se sobrecalientes. Por eso es posible que el oxisterol presente en leche calentada en un cazo al fuego y calentada en un microondas tengan la misma proporción de oxisterol. Pero quien no nos dice que algunas moléculas presentes en la leche, que tiene hierro, no puedan sufrir un calentamiento mucho mayor o se rompan o alteren ?

Lo preocupante de los microondas es que cuando calientan grasas las temperaturas superan en mucho los 100º C. Si recalentamos comida sólida, que tiene una proporción baja de agua y que tiene un alto contenido de grasas de origen animal, yo creo que en algunos puntos del alimento, se podrían llegar a temperaturas altísimas, mientras en otras partes, las temperaturas serían más bajas. Para terminar, cuando algunas sustancias presentes en los alimentos, superan una determinada temperatura, se convierten en otra cosas y a veces esa otra cosa, es un potente veneno carcinogénico.

Aquí os dejo un vídeo en el que se genera plasma, que es el cuarto estado de la materia y que para formarse necesita unas altísimas temperaturas, para demostraros que una sartén por caliente que esté, nunca puede llegar a las temperaturas a las que puede llegar a calentar un microondas. Para generar la reacción, solo hace falta una simple uva.

MicrowaveCam.com - Microwave Grape Fireballs! - YouTube

En este otro vídeo se puede ver como se genera plasma en el interior de un recipiente, según el autor, si se mantiene el plasma durante algunos segundos, terminará por romper el recipiente, debido a las altas temperaturas alcanzadas en su interior.

More Microwave stuff - YouTube
 
Volver