No. He leído que algunos van retirando una especie de espuma que se forma, diariamente más o menos, pero esa debe ser otra forma de hacerlo. En mi caso no se formaba ninguna capa de espuma blanca y por lo tanto no me preocupaba de retirarla.
La siguiente receta que dejo de internet es correcta en general:
Col Fermentada o Choucroute - Alimentos Fermentados - Alimentos - Canal Nutrición - Dietas.NET
COMO PREPARAR LA COL FERMENTADA
Debemos cortar la col (repollo o lombarda) y depositarla en un frasco de cristal. Podemos añadirle trozos de zanahoria, bayas de enebro o semillas de hinojo.
A continuación llenamos el recipiente de agua mineral con una cucharada de sal marina y un chorro de vinagre (si tenemos ácido láctico mejor que el vinagre).
Taparemos el frasco, pero no de manera hermética, ya que debemos dejar salir parte del líquido y lo dejaremos reposar en un lugar oscuro a unos 22º.
Lo dejaremos de cinco a siete días y a continuación ya lo podremos consumir. No debemos ni cocinarlo ni calentarlo, ya que de esta forma perdería sus propiedades enzimáticas. Mantenerlo en el frigorífico.
...
Pero
no hay que dejar salir líquido, lo que yo dejaba es que salieran las burbujas. El líquido siempre cubre la verdura.
Me suena que yo cerraba la tapadera fuerte (herméticamente), y después, cada dos días, abría un momento la tapa para que salieran las burbujas que se formaban y volvía a cerrar, así nunca se acumulaba mucha presión. Es decir, que no hay que dejarlo hermético cerrado durante los 15 días.
El tiempo que tarda creo que es mayor de los 7 días. Creo que depende de la temperatura: a mas temperatura se hace mas rápido. Pero eso se va viendo por el aspecto de la verdura, y también porque creo que dejan de producirse burbujas. La col va pasándose y haciéndose un poco tras*parente. Cuando se vé muy tras*parente es cuando creo que se ha pasado o ha fermentado mal, su sabor no es bueno, y el repollo queda reblandecido.
Y una vez hecho el choucrout, (creo que suele tardar unos 15 ó 20 días), se puede cerrar herméticamente, y se conservaría durante un año o dos años o quizás más (sin abrir).
Otra cosa: una vez abierto para consumirlo también se conserva bastante bien en el frigorífico durante un mes, o más. Se tapa el tarro y se guarda en la nevera. Y se va sacando cada día la cantidad que uno quiera.
Yo
no recuerdo que le echara vinagre.
En todo caso sería muy poco y si acaso sería
vinagre de manzana o de sidra que venden en el herbolario y tiene muy buen sabor.
El choucrout tiene muy buenas propiedades digestivas, favorece la flora bacteriana, entre otras cosas.
Es fácil de hacer. Si a mí me fallaba alguna vez será por algún detalle que no controlaba bien. Pero probando, o seguro que por internét alguien comenta el secreto para que no haya errores.
Para reconocer el sabor correcto del choucrout, lo mejor es probar uno comprado en el herbolario. Y luego se puede comparar con el sabor del que uno elabore.
Col Fermentada o Choucroute
Propiedades del choucroute
Es un buen aporte de vitamina C. Su buena conservación era una garantía de vitamina C en aquellos pueblos que durante meses apenas disponían de frutas y verduras (épocas de frío, viajes, etc.)
Gracias a su fermentación es muy rica en ácido láctico que es un elemento muy importante para las bacterias del estómago e intestinos. Su riqueza en enzimas hacen que favorezca las digestiones y por tanto la absorción de los nutrientes de los alimentos.
El choucroute o col fermentada puede ser útil en casos de estreñimiento y diarrea debidos a malas digestiones.
En casos de inflamación intestinal y gases, de origen digestivo.
Su riqueza en enzimas favorece el funcionamiento del hígado y del páncreas.
Ideal como condimento en comidas fuertes ya que favorece la descomposición de las proteínas de la carne.
Como todos los alimentos fermentados tiene un gran efecto remineralizante y depurativo a la vez.
El choucroute o col fermentada favorece la producción de orina y la eliminación de ácido úrico.
Evita el escorbuto que es una enfermedad que antiguamente terminaba con la mayoría de las tripulaciones de los barcos ya que como estaban mucho tiempo en alta mar sin frutas ni verduras carecían de vitamina C. El capitán, James Cook obligó a su tripulación a tomar choucrout durante su travesía de ocho meses en su viaje a Tahití en 1768. Lo normal era perder la mitad de la tripulación y él apenas tuvo bajas.