Yo era fanático del aceite de coco, lo tomaba en barritas dietéticas y todos los días en café cetogénico, por sus supuestas virtudes. En mi caso afirmo que es puro veneno. Hago deporte, running, piscina y pesas, procuro comer sano, con algún capricho muy de vez en cuando pero sin exagerar, y me ha subido el colesterol total y los triglicéridos en los últimos años, como si fuera un obeso del Mc Donalds con que van en carrito, y rellenito no estoy. En unos meses sin tomarlo, me voy a volver a hacer analítica. Saludos.