Vamos a ver si lo he entendido:
Yo, que soy pobre, pido dinero a un amigo diciéndole que es para mis necesidades básicas. Mi amigo, que tiene pasta, me dice que vale, que me presta x dinero pero 'con v de vuelta' y que lo administre con responsabilidad.
Yo me dedico a malgastar ese dinero en trapos, me compro un coche que no necesito y me voy de vacaciones a Cancún porque yo lo valgo.
Al tiempo, mi amigo me reclama lo que me prestó pero yo estoy arruinada.
Así que salgo a la calle a protestar y aviso a mis vecinos de que mi amigo es un ladrón y que le retiren la palabra.
¿Es así?
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Ese símil tuyo carece de fundamento puesto que en Europa nadie es "amigo" de nadie. Ese desprendido y voluntarioso prestamista es en realidad un usurero muy perverso o muy orate, o ambas cosas a la vez, que ha prestado cantidades ingentes de dinero sin unas mínimas garantías a un manirroto que, en el fondo, no ha engañado a nadie.
Cuando Pepito Relámpago fue a pedir un crédito al banco para irse a Cancún, comprar un piso sobrevalorado o cambiar al BMW en lugar de montar una empresa, o cuando el ayuntamiento de Villanueva de los Zoquetes pidió fondos para asfaltar un parque público, subir el sueldo a la casta o montar un mirador de cacatúas en el Trópico en lugar de mejorar los equipamientos de la escuela y ahorrar o invertir para la época de vacas flacas, el Banco o la Administración concedió el monto alegremente; y conociendo los banqueros y políticos europeos que esto sucedía en España, dejaron abierta la exclusa del flujo del dinero.
Hijos míos, si yo a título personal presto dinero a un simple para atiborrarse a cerveza y luego no me paga, me aguanto. Esto de prestar dinero es como otro negocio. Si te sale mal, porque lo haces mal, te vas al arroyo como quien monta una tienda de agujas de coser.
Lo más gracioso de todo esto es que, porque un insensato prestó dinero a otro insensato, todos tienen que pagar el pato directa o indirectamente.
¿Que no pagar la deuda significaría que los prestamistas se lo pensarían dos veces antes de volver a derramar un euro sobre España? ¡Pues bienvenido sea! ¡Que se se miren con ojo los siguientes préstamos que hagan!
Un prestamista sensato y sagaz valorará la empresa para que se le demanda el dinero, y si ve que la tal tiene visos de ir hacia delante y en un futuro generará los beneficios suficientes para pagar la cantidad pactada más los intereses, le seguirá prestando dinero al prestatario se llame España o Alemania.
Cubrir la presente deuda con más deuda que lo único que exige es recortar gastos del Estado para seguir pagando la deuda no tiene ningún futuro. Sucederá en último término que el Estado y todos los ciudadanos acaben en la más completa ruina, sin medio alguno para generar nueva riqueza.
La salida es clara: un simpa como no ha conocido la Historia. Esto traería la ruina a España en un breve plazo. Significaría que cada banco y particular pague lo suyo, mientras que el Gobierno responsable debería ocuparse de generar riqueza con lo mucho o poco que recaude, mostrándose como institución firme. Lo contrario sería una larga agonía que acabaría en un resultado similar, pero con el Estado completamente arruinado sin capacidad de maniobra y sin soberanía para realizar cualquier reforma.