La importancia de una alimentación saludable para prevenir el cáncer y mejorar la calidad de vida de los pacientes

Yo tengo comprobado que controlar el índice glucémico tiene un impacto importante en mi bienestar.
 
La importancia de una alimentación saludable para prevenir el cáncer y mejorar la calidad de vida de los pacientes

Aunque la dieta no cura el cáncer, tener unos buenos hábitos alimenticios puede reducir los factores de riesgo de padecer esta enfermedad y mejorar el pronóstico. Sin embargo, todavía hace falta más inversión para desarrollar más investigaciones en este campo.



Imagen de archivo de una ensalada
Una alimentación adecuada, dejar de fumar y limitar el consumo de alcohol son factores que reducen el riesgo de padecerlo y mejoran el pronóstico— PEXELS



04/02/2023 09:43

Millones de personas son diagnosticadas de cáncer cada año, la principal causa de fin a nivel mundial. Por eso, tanto la prevención de la enfermedad como su tratamiento tienen tanta importancia. En este contexto, una alimentación adecuada, dejar de fumar y limitar el consumo de alcohol son factores que reducen el riesgo de padecerlo y mejoran el pronóstico.

Como decíamos, una alimentación saludable es de gran importancia para prevenir muchos tipos de cáncer. Sin embargo, no existen alimentos milagrosos que curen o eviten su aparición. Ni tampoco ingredientes de la dieta que lo causen directamente: es el conjunto de nuestros hábitos alimentarios lo que reduce o aumenta las probabilidades de caer enfermos.

A lo largo de las siguientes líneas, los lectores y lectoras observarán que, en general, las frases empleadas a la hora de dar recomendaciones sobre alimentación y cáncer son poco contundentes; las palabras "parece" o "podría" se repiten constantemente. Esto se debe a que se necesita más investigación para confirmar estos hallazgos y esclarecer el verdadero impacto de la dieta.


Algunas pautas para elaborar un menú anticáncer
En primer lugar, es importante mantener un peso saludable: el exceso de grasa corporal y las patologías asociadas, como la resistencia a la insulina, se asocian con un mayor riesgo de padecer cáncer de tiroides, esófago, hígado, vesícula biliar, colon, riñón, mama, endometrio o próstata. Además, parecen promover la metástasis en algunos tumores, como el de pulmón.
En cuanto a los nutrientes y alimentos que ayudan a prevenirlo, la dieta debe ser rica en fibra (fruta, verdura, legumbres y cereales integrales). Incluir a menudo estos alimentos en el menú también se asocia con un menor riesgo de padecer obesidad.
Concretamente, el consumo de frutas y vegetales reduce las posibilidades de desarrollar varios tipos de cáncer, como el de boca y esófago, mientras que los cereales integrales pueden contribuir a prevenir el cáncer colorrectal. Aparte de fibra, estos alimentos contienen antioxidantes que también podrían proteger al organismo.


Además, se debe limitar el consumo de alimentos con alto contenido de grasas de mala calidad (grasas saturadas y tras*), almidones y azúcares. Es el caso de los ultraprocesados (bebidas energéticas, embutidos, lasañas, pizzas industriales, patatas fritas, etc.) y de la carne roja y procesada (embutidos, salchichas…), asociados a un mayor riesgo de padecer cáncer, especialmente el colorrectal.

En cuanto a los distintos tipos de dieta, destaca por sus virtudes la mediterránea, que parece reducir las papeletas de desarrollar cáncer de mama y de colon. Se caracteriza por el empleo de aceite de oliva virgen como fuente fundamental de grasa; una ingesta elevada de verduras, frutas, cereales integrales, frutos secos y legumbres; un consumo moderado de pescado y lácteos; y escasa cantidad de carnes rojas o procesadas.

Por el contrario, la alimentación occidental con abundantes carnes rojas y procesadas, bebidas azucaradas, carbohidratos refinados y alimentos ultraprocesados incrementaría las posibilidades de padecer estas enfermedades.

La dieta no cura, pero mejora la calidad de vida del paciente
Parece más o menos evidente que la dieta equilibrada disminuye el riesgo de que aparezca el cáncer, pero no lo evita. Una vez que aparece la enfermedad, sí puede ayudar, combinada con el tratamiento médico que corresponda, a mejorar el pronóstico y la calidad de vida del paciente. Además, puede contribuir a mitigar algunos efectos secundarios de los tratamientos y disminuir el riesgo de infecciones.

Resulta común que los pacientes con cáncer sufran desnutrición debido a los tratamientos y al propio curso de la patología. Evitarlo o reducirlo es importante, ya que mejora el pronóstico. Es muy importante cubrir en estas personas los requerimientos de energía y, especialmente, de proteínas.

Estas últimas son las encargadas de reparar los tejidos, que en los enfermos de cáncer pueden estar muy dañados debido a una cirugía, la quimioterapia o la radioterapia. Constituyen buenas fuentes de proteínas los bemoles, los lácteos, el pescado, las aves y las legumbres.


Estos procesos de reparación también requieren de un aporte de energía extra. Cuando no se consigue llegar a la ingesta requerida –por ejemplo, por falta de apetito–, la dieta debería incluir alimentos de elevada densidad energética, como fruta deshidratada o batidos. Incluso se podría sustituir los cereales integrales por cereales refinados, ya que la fibra genera saciedad.
En definitiva, la dieta se debe adaptar al individuo, a sus necesidades y a su estado. Así, en pacientes con náuseas y vómitos suelen ser bien tolerados alimentos fríos y ligeros como la fruta triturada fría, los yogures o las ensaladas de pasta o arroz. Si el enfermo experimenta alguna dificultad para deglutir, puede resultar útil triturar la comida y añadir espesantes y gelificantes que mejoren la textura con el fin de evitar recurrir al uso de una sonda para administrar el alimento.
A modo de conclusión, conviene recordar que, aunque la dieta no cura el cáncer, mejora el pronóstico y ayuda a prevenirlo, por lo que la inversión en investigación debería ser una prioridad.

Público da pena
Claro que hay alimentos que curan el cáncer.
La alimentación es tan importante como medicamentos que funcionen contra el cáncer.
 
El cáncer se alimenta de azúcar. Lo peor que puedes comer es fruta o carbohidratos

Carne roja a tope

y además le metes una cajetilla de tabaco al día que también es muy saludable, un litro de alcohol y alguna que otra droja y puede que no vivas mucho, pero habrás disfrutado a tu manera .
 
El cáncer se alimenta de azúcar. Lo peor que puedes comer es fruta o carbohidratos

Carne roja a tope
la alimentación humana consiste en

- prótidos = proteinas
- glúcidos = carbohidratos, hidratos de carbono
- lípidos = grasas

se sabe mucho de las dietas entre otras cosas porque la humanidad pasó muchas hambrunas y se sabe lo que pasa si se excede o falta alguno de los ingredientes básicos de la dieta humana

guerras, sequías, epidemias, hambrunas ...

Presos de guerras o en países del tercer mundo con una dieta muy limitada por los carceleros...
marinos y viajeros en los barcos que cruzaban el Atlántico cuya travesía duraba unos dos meses ...

Pobres y lumpen que no tenían ni dinero ni conocimientos de una dieta sana ...

se sabe mucho de lo que pasa si comes tal cosa o no comes tal otra.

Nadie muere por comer solo pan, patatas, arroz, fruta, vegetales, legumbres ... pero sí por comer solo carne

NO SOMOS CARNÍVOROS. SOMOS PRIMATES que gracias al control del fuego que consigue una PREDIGESTIÓN de la carne, podemos alimentarnos de cierta cantidad sin que eso nos mate, pero en ningún caso es nuestra dieta como especie.

Al no tener ácidos estomacales tan potentes como los carnívoros y un intestino mucho más largo preparado para los vegetales, la hipotética carne cruda se pudriría en su tras*ito intestinal provocando desde cáncer hasta diabetes que es una enfermedad del aparato digestivo. Además de muchas otras enfermedades y dolencias.

https://www.elespanol.com/ciencia/n...nicular-hambre-puede-apiolar/428207772_0.html

 
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