Así de memoria, eso es inexacto. Los Tiger se agrupaban en batallones de carros pesados independientes (Schwere Panzer Abteilungen) que se asignaban a las divisiones en función de las necesidades. Los angloamericanos se encontraron con algunos Tiger en Túnez, pero no en Italia. En Italia se enviaron algunos Panther que tomaron parte en la lucha de la cabeza de playa de Anzio. Creo recordar que después del fiasco de Kursk, los cazacarros Elephant supervivientes se enviaron a Italia.
Los americanos pensaban que los Tiger serían tan raros que podían vencerlos por el número y que el Sherman de 75mm bastaba. Luego, claro, vinieron los lamentos y los lloros, y a introducir a toda prisa los 76mm, los Sherman de asalto con blindaje reforzado (Jumbo), y por su parte los británicos hicieron el Firefly, un Sherman con un cañón de 17 libras, comparable al 88 alemán.
Todos los contendientes improvisaron poniendo trozos de oruga en el blindaje para aumentar el grosor de la coraza. El apilar sacos de arena y las ruedas de repuesto era para proteger contra el impacto de las cargas huecas de las armas anticarro de la infantería, el Panzerfaust alemán.
Bueno, eso es una epidemia de mieditis que todo carro alemán les parecía un Tiger. En realidad no había muchos, y cuando llegó el Königstiger (un batallón) casi no tuvo impacto porque fue en agosto y se perdieron los carros en la retirada.
La lucha fue tan dura en Normandía porque el terreno favorecía la defensa y las armas anticarro alemanas eran mejores, el cañón L/48 de 75mm que armaba a los Panzer IV ,demás cazacarros podía destruir a todos los carros angloamericanos. Además le añades los cañones anticarro PAK 40 del mismo calibre, y los Panzerfauste de la infantería. Sin olvidarnos de los temibles 88 antiaéreos. Con eso ya romper el frente alemán habría costado, la invulnerabilidad de los Panther y los menos numerosos Tiger permitió a los alemanes heroicidades para tapar berchas en momentos puntuales como la de Michael Wittmann en Villers Bocage, que destruyó a toda una brigada británica, o la del Panther de Barkmann, menos conocida, pero igualmente épica.
Y sí, Kozak, yo he leído como Patton se puso hecho un basilisco y abroncó a unos tanquistas americanos por llevar sacos de arena en su Sherman, creo que en algún Osprey. Los tanquistas hacían todo lo que creían que podía aumentar sus posibilidades de supervivencia, pero los generales prohibían esa práctica porque pensaban que no servía de nada, y el sobrecargar los carros con el blindaje adicional implicaba muchas más averías lo que reducía la fuerza combativa en carros de las divisiones. No es que Patton fuera un insensible, es que tenía una perspectiva más amplia y se enfurecía porque desde su punto de vista, el miedo de las tripulaciones le dificultaba ganar la guerra.
Por cierto, si os gusta el tema, me recomiendan Tank men de Robert Kershaw, publicado por Ediciones Platea. Yo lo voy a pedir de Navidades.