Si quieren que se menee el mercado rural de vivienda en zonas poco dinámicas, basta con ponerse serios a peritar edificios con amenaza de ruina y ordenar demoliciones.
Ahora ves parcelones que están de querida progenitora pero tienen una ruina por de derechasda y el interior lleno de escombro y ratas, los dueños no los sueltan por mero estatus o porque quieren venderlo a precio de nueva construcción con todo el marrón; total, pagan 3 pesetas de contribución y el alcalde es hamijo...
Pues bien, se hace una buena maratón de peritajes, se coge todos esos edificios que suponen riesgo para el resto de vecinos, y se da un plazo de 1 año para derribar y dejar bien cerrado el solar. Pasado ese tiempo, el Estado se hace cargo de la demolición, desescombro y cierre de la finca, pero pasando la factura o en su defecto expropiando el solar.
Con eso liberas parcelas para nueva construcción y obligas a la gente a estar espabilada a la hora de vender a tiempo o mantener debidamente los edificios. Veríamos gente soltando solares de 300m2 por cuatro cortesanas solo por evitar la expropiación o el pago de la intervención.