Buenas. Quisiera saber si hay alguna manera de no estar tan dolido como estoy.
Hace un año falleció mi padre. 12 años después de mi progenitora. Tras el fallecimiento de mi progenitora él había adquirido un adosado.
Bien, la sorpresa viene con el testamento.
Me dejó una finca rústica que no vale nada, la cuenta bancaria en la que había poco más que el coste del funeral... y la nuda propiedad de la vivienda.
A la querida, a la señora con la que engañaba a mi progenitora moribunda, que ni convivía con él ni lo acompañó cuando el cáncer lo anulaba ni vive cerca de aquella casa, le dejó todo el contenido de la vivienda (incluidas las posesiones de mi progenitora, pero eso ya lo arreglé) el audi q5 y el usufructo vitalicio de la casa.
Ahí es nada.
En Galicia para colmo la legítima sólo es el 25%.
Entretanto yo estoy sin ahorros, sin propiedades, viviendo al día de alquiler, rezando porque el próximo contrato precario dure un poco más que el anterior.
Estoy dolido y requetejodido?
Porque la opción contratar a unos rumanos o algo así no la descarto.