estroboscopico
Estroboscopico
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- 13 Mar 2022
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El otro día fui al taller oficial de la marca de mi coche porque se había encendido una luz con el símbolo de una llave.
Tras tres días en el taller oficial, me llaman y me dicen que hay que cambiar el carburador.
Resumiendo, la broma me iba a salir por unos 823€, mano de obra incluida e IVA.
Buscando por internet me entero que me estaban cobrando bastante más de lo que deberían, así que decido llevarme el coche a otro taller, un taller Paco.
Nada más llegar me recibe un pitbull afónico y lo de afónico lo digo porque ladraba como si fuese fumador de varios paquetes de celta sin filtro. Tras la primera impresión amenazadora, el chucho se le veía tranquilo y acostumbrado a la gente. Vamos, que yo lo miré a él, él me miró a mí, se dio la vuelta y se tumbó en un rincón junto a la puerta.
El taller tenía pinta de ser uno de esos que abrió sus puertas por los años 70s. Tras un rato allí solo, aparece de una especie de cuartucho de repuestos, un mecánico cincuentón vapeando de un cigarrillo electrónico. Me dio las buenas tardes y me preguntó que si venía por la oferta de neumáticos que tenía puesto fuera y le dije que no, que venía por un problema con el carburador, le expliqué lo de la luz, levantó el capó, trasteo con una linterna y me dijo que tenía que mirarlo con la máquina.
Tras un rato allí esperando me dice que el sensor del caudalímetro del carburador que estaba estropeado, que la pieza costaría entre mano de obra y caudalímetro unos 75€, que podía buscar uno de segunda mano, pero que no me lo recomendaba, porque la pieza de segunda mano aunque era más barata, era de segunda mano y no merecía la pena.
Tras pensármelo 0,3 segundos le dije que sí, que cambiase el caudalímetro o el sensor o lo que fuese, que para cuando???, el tipo fue a una especie de oficinilla que no tendría más de dos metros cuadrados llena de papeles, albaranes y cajas de repuestos, abrió una libreta de anillas y tras un rato, me dijo a cierta distancia que para última hora que me pasase o llamase, que seguramente lo tendría.
A última hora me presento y allí estaba apretando los últimos tornillos y que ya estaba listo.
Pago lo acordado, meto la llave y la luz de la llave mecánica se encendió, pero al rato se apagó junto con el resto de testigos, cosa que tras el primer susto, me tranquilizó, porque es lo normal cuando se mete la llave en el contacto.
Viendo que por 75€ me habían solucionado el problema, me pongo en contacto con el taller oficial y le digo que el problema me lo habían solucionado por 75€, ¿que cómo podía ser eso? que el problema era el sensor del caudalímetro del carburador y no el carburador entero. Tras unos segundos de silencio, me dijo que quizás el mecánico se había equivocado y que si no estaba contento, pues que hice bien en buscar una segunda opinión y tal y pascual, que si lo volvía a llevar, que lo revisaban gratis para la ITV y tal y cual y les dije que sí, que lo iba a llevar, pero que me esperasen sentados, acto seguido colgué.
jovenlandesaleja, a veces las apariencias engañan y siempre es mejor pedir una segunda opinión.
Tras tres días en el taller oficial, me llaman y me dicen que hay que cambiar el carburador.
Resumiendo, la broma me iba a salir por unos 823€, mano de obra incluida e IVA.
Buscando por internet me entero que me estaban cobrando bastante más de lo que deberían, así que decido llevarme el coche a otro taller, un taller Paco.
Nada más llegar me recibe un pitbull afónico y lo de afónico lo digo porque ladraba como si fuese fumador de varios paquetes de celta sin filtro. Tras la primera impresión amenazadora, el chucho se le veía tranquilo y acostumbrado a la gente. Vamos, que yo lo miré a él, él me miró a mí, se dio la vuelta y se tumbó en un rincón junto a la puerta.
El taller tenía pinta de ser uno de esos que abrió sus puertas por los años 70s. Tras un rato allí solo, aparece de una especie de cuartucho de repuestos, un mecánico cincuentón vapeando de un cigarrillo electrónico. Me dio las buenas tardes y me preguntó que si venía por la oferta de neumáticos que tenía puesto fuera y le dije que no, que venía por un problema con el carburador, le expliqué lo de la luz, levantó el capó, trasteo con una linterna y me dijo que tenía que mirarlo con la máquina.
Tras un rato allí esperando me dice que el sensor del caudalímetro del carburador que estaba estropeado, que la pieza costaría entre mano de obra y caudalímetro unos 75€, que podía buscar uno de segunda mano, pero que no me lo recomendaba, porque la pieza de segunda mano aunque era más barata, era de segunda mano y no merecía la pena.
Tras pensármelo 0,3 segundos le dije que sí, que cambiase el caudalímetro o el sensor o lo que fuese, que para cuando???, el tipo fue a una especie de oficinilla que no tendría más de dos metros cuadrados llena de papeles, albaranes y cajas de repuestos, abrió una libreta de anillas y tras un rato, me dijo a cierta distancia que para última hora que me pasase o llamase, que seguramente lo tendría.
A última hora me presento y allí estaba apretando los últimos tornillos y que ya estaba listo.
Pago lo acordado, meto la llave y la luz de la llave mecánica se encendió, pero al rato se apagó junto con el resto de testigos, cosa que tras el primer susto, me tranquilizó, porque es lo normal cuando se mete la llave en el contacto.
Viendo que por 75€ me habían solucionado el problema, me pongo en contacto con el taller oficial y le digo que el problema me lo habían solucionado por 75€, ¿que cómo podía ser eso? que el problema era el sensor del caudalímetro del carburador y no el carburador entero. Tras unos segundos de silencio, me dijo que quizás el mecánico se había equivocado y que si no estaba contento, pues que hice bien en buscar una segunda opinión y tal y pascual, que si lo volvía a llevar, que lo revisaban gratis para la ITV y tal y cual y les dije que sí, que lo iba a llevar, pero que me esperasen sentados, acto seguido colgué.
jovenlandesaleja, a veces las apariencias engañan y siempre es mejor pedir una segunda opinión.
