Conde Lily
Himbersor
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Nací en el año 1927, y desde el año 1956 he dejado de envejecer por completo. El envejecimiento, la fin natural y las enfermedades ya no me afectan.
Cualquier daño celular puede ser regenerado. Sólo se me podría destruir si todo mi cuerpo sufriera daños graves rápida y uniformemente, con pérdida masiva de tejidos.
Aparento unos 30 años, más o menos la edad que tenía cuando me hice inmortal.
La fórmula de la inmortalidad que desarrollé es un bebedizo compuesto por varios materiales, básicamente 1/12 parte de mi propia sangre, extraída, centrifugada y sometida a tratamiento masivo de hormonas, mezclada con sangre del mismo tipo que la mía procedente de sujetos sanos no mayores de 14 años, y otros ingredientes químicos, no especificaré más dicha fórmula.
Debo hacer una nueva toma de ese bebedizo una vez cada 27 años para mantener el rejuvenecimiento celular.
Diálisis completa cada 4 años
Inyecciones de testosterona y hormona de crecimiento semanales para equilibrar mi sistema endocrino
Únicamente me alimento de avena, pechuga de pollo sin salsa, 1 copa de vino diaria y agua extraída por mí de un pozo. Sólo hago 1 comida al día.
Riguroso programa de ejercicio físico y disciplina mental. Duermo 6 horas de cada 24, 1 de cada 8 días, 12 horas de sueño.
No tomo ningún medicamento, salvo las hormonas. No he estado enfermo desde 1957.
Cualquier daño celular puede ser regenerado. Sólo se me podría destruir si todo mi cuerpo sufriera daños graves rápida y uniformemente, con pérdida masiva de tejidos.
Aparento unos 30 años, más o menos la edad que tenía cuando me hice inmortal.
La fórmula de la inmortalidad que desarrollé es un bebedizo compuesto por varios materiales, básicamente 1/12 parte de mi propia sangre, extraída, centrifugada y sometida a tratamiento masivo de hormonas, mezclada con sangre del mismo tipo que la mía procedente de sujetos sanos no mayores de 14 años, y otros ingredientes químicos, no especificaré más dicha fórmula.
Debo hacer una nueva toma de ese bebedizo una vez cada 27 años para mantener el rejuvenecimiento celular.
Diálisis completa cada 4 años
Inyecciones de testosterona y hormona de crecimiento semanales para equilibrar mi sistema endocrino
Únicamente me alimento de avena, pechuga de pollo sin salsa, 1 copa de vino diaria y agua extraída por mí de un pozo. Sólo hago 1 comida al día.
Riguroso programa de ejercicio físico y disciplina mental. Duermo 6 horas de cada 24, 1 de cada 8 días, 12 horas de sueño.
No tomo ningún medicamento, salvo las hormonas. No he estado enfermo desde 1957.