시켈 !
Lonchafinista.
- Desde
- 18 Feb 2010
- Mensajes
- 94.938
- Reputación
- 141.066
Yo me tengo que dar descansos de vez en cuando. Lo congelo unos meses y luego lo saco.
Ahora por ejemplo está hibernando.
Vaya, pues he encontrado información que indica que cuando se congela pierde propiedades.: (Y no se indica si nuevos gránulos que nazcan nacerán sin ello o qué pasa)
K?fir de leche
¿Se pueden guardar los nódulos en la nevera?
No se debe. Al bajar de los 15º C. no solamente se detiene la fermentación, sino que muchas de las cepas perecen. El frío destruye la mayoría de las cepas, por esto es que no pueden comercializarlo entero.
Se puede seguir haciendo fermentados con el bacilo que elabora los nódulos, pero perderá mucha de las ventajas que tiene un fermento completo. Uno de los importantes, su capacidad de combatir las bacterias patógenas.
¿Se pueden congelar los nódulos para conservarlos?
Bien puede hacerse como Carrefour o la Granja Noé, y fabricar kéfir con sólo unas pocas bacterias estables, que es como ellos resuelven el problema de la vida corta de este fermento.
Pero eso no es kéfir. Aunque existe controversia al respecto, a nivel técnico, desde un aspecto práctico podríamos defender que kéfir, tal como se conoce en origen, es el que utilizan y consumen los campesinos en los países del Cáucaso: con todas las bacterias que, naturalmente, solemos encontrar en sus fermentados.
Cuando congelas el gránulo, el bacilo que fabrica la keferina (el "hongo" como le llama la gente - no es un hongo -) suele sobrevivir aletargado y cuando se recuperan las condiciones adecuadas vuelve a la actividad. Pero eso no pasa con el resto de las cepas.
Por ejemplo, el Lactobacillus brevis, de por sí de corta vida, de ahí su nombre, muere rápidamente. Tampoco el Lactobacillus kefiri, fundamental en este fermento, sobrevive.
Para que tenga una idea de la diferencia que hay entre lo que queda después de una congelación y lo que es un kéfir completo (que es el de los efectos "milagrosos") adjuntamos una muestra.
Curiosamente, en la lista no aparece el Lb. caucasiano, que es uno de los "fijos" en cualquier kéfir clásico.
No se debe. Al bajar de los 15º C. no solamente se detiene la fermentación, sino que muchas de las cepas perecen. El frío destruye la mayoría de las cepas, por esto es que no pueden comercializarlo entero.
Se puede seguir haciendo fermentados con el bacilo que elabora los nódulos, pero perderá mucha de las ventajas que tiene un fermento completo. Uno de los importantes, su capacidad de combatir las bacterias patógenas.
¿Se pueden congelar los nódulos para conservarlos?
Bien puede hacerse como Carrefour o la Granja Noé, y fabricar kéfir con sólo unas pocas bacterias estables, que es como ellos resuelven el problema de la vida corta de este fermento.
Pero eso no es kéfir. Aunque existe controversia al respecto, a nivel técnico, desde un aspecto práctico podríamos defender que kéfir, tal como se conoce en origen, es el que utilizan y consumen los campesinos en los países del Cáucaso: con todas las bacterias que, naturalmente, solemos encontrar en sus fermentados.
Cuando congelas el gránulo, el bacilo que fabrica la keferina (el "hongo" como le llama la gente - no es un hongo -) suele sobrevivir aletargado y cuando se recuperan las condiciones adecuadas vuelve a la actividad. Pero eso no pasa con el resto de las cepas.
Por ejemplo, el Lactobacillus brevis, de por sí de corta vida, de ahí su nombre, muere rápidamente. Tampoco el Lactobacillus kefiri, fundamental en este fermento, sobrevive.
Para que tenga una idea de la diferencia que hay entre lo que queda después de una congelación y lo que es un kéfir completo (que es el de los efectos "milagrosos") adjuntamos una muestra.
Curiosamente, en la lista no aparece el Lb. caucasiano, que es uno de los "fijos" en cualquier kéfir clásico.