Edad de los dos: treinta y pocos.
Ciudad costera de tamaño medio-pequeño.
Trabajo de ella: funci/empleo público. Sueldo mensual limpio de 2.900.
Trabajo mío: administrativo en paco-empresa. Sueldo mensual limpio de 1.200.
La cosa es que mi trabajo me parece una fruta cosa. Estudié ADE y todo a lo que he aspirado hasta ahora son trabajos tediosos, sentado todo el día delante de la pantalla de un ordenador rodeado de tablas de excel y emails. Hasta hace una semana llevaba dos años en una paco-empresa de mi ciudad rodeado de palilleros y charos que iban a lo suyo, con un horario de 9 a 18 en el que encima tenía que llevarme un puñetero tupper para comer todos los días, porque como la empresa está donde Cristo perdió el mechero no hay bares ni restaurantes cerca.
Así que esta situación me estaba tocando los huevones y decidí hace cosa de un mes dejar de remar. Con el sueldo de ella ya vamos de sobra, ya que el alquiler del piso en el que estamos son 600 mortadelos al mes. Que sí, que a lo mejor ahora en vez de hacer X viajecitos al año hacemos X-2, y en vez de ir a comer Y veces iremos Y-5, pero con los precios medios de esta ciudad, da de sobra para vivir holgadamente.
¿Ahora qué voy a hacer? Pues mil cosas. Quedar con amigos, salir a correr, salir a pasear, ir a la playa, hacer surf, apuntarme a actividades, jugar a videojuegos, yo que sé... ya se me irá ocurriendo. Ahorraos frasecitas de Paulo Coelho de que si el trabajo dignifica o no sé qué huevones.
Si acaso dentro de varios meses veo que me aburro, pues a lo mejor me decido a hacerme funci nivel bajo, algo facilón, pero dedicando una o dos horas al día a estudiar, nada más.
Por cierto, ahora las viejas cotillas del vecindario ya me empiezan a mirar con mala cara por verme salir y entrar de casa por la mañana, como si fuese un pelagatos cualquiera. A la primera que me haga preguntas impertinentes la mando a la cosa.