SrPurpuron
Gñé
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Porque estoy hasta los bemoles de las terrazas atestadas de gente pesada emborrachandose, que disfruten bien este verano porque en otoño quiero verlos llorar a todos.
Que ya está bien de tanto jolgorio, esto es un puñetero cachondeo. Ya lo dije otras veces que deseo que gane la derecha y que venga con un buen paquete de recortes para bajarle los ánimos al personal, que siempre pasa la misma historia, los socialistas repartiendo el dinero de la impresora, la UE despilfarrando y luego cuando vienen los lloros que viene la malvada ultraturboderecha. Pues que vengan los malos jorobar, que los buenos ya están muy vistos. Que apure la gente para disfrutar, que luego van a disfrutar diferente.
Disfrutaremos los demás de un ambiente más depresivo, echo de menos que los telediarreos abran con el fin del mundo cada, día, quiero ver caras largas, gente con menos dinero para salir, gente metida en sus casas, quiero las calles vacías, quiero poder sacar a mi perro y ver las terrazas recogidas, quiero menos gente en las discotecas y que a las cuatro ya no haya nada.
Ya está bien de tanta juerga y restringe por las narices de uno de tanta "felicidad" y bienestar. Ahora toca llorar y amargura. Quiero volver a ver a la izquierda en su esencia, bramando y chillando gaiamente.
Que ya está bien de tanto jolgorio, esto es un puñetero cachondeo. Ya lo dije otras veces que deseo que gane la derecha y que venga con un buen paquete de recortes para bajarle los ánimos al personal, que siempre pasa la misma historia, los socialistas repartiendo el dinero de la impresora, la UE despilfarrando y luego cuando vienen los lloros que viene la malvada ultraturboderecha. Pues que vengan los malos jorobar, que los buenos ya están muy vistos. Que apure la gente para disfrutar, que luego van a disfrutar diferente.
Disfrutaremos los demás de un ambiente más depresivo, echo de menos que los telediarreos abran con el fin del mundo cada, día, quiero ver caras largas, gente con menos dinero para salir, gente metida en sus casas, quiero las calles vacías, quiero poder sacar a mi perro y ver las terrazas recogidas, quiero menos gente en las discotecas y que a las cuatro ya no haya nada.
Ya está bien de tanta juerga y restringe por las narices de uno de tanta "felicidad" y bienestar. Ahora toca llorar y amargura. Quiero volver a ver a la izquierda en su esencia, bramando y chillando gaiamente.