¿Seguís yendo al trabajo en bici pese a las frías temperaturas de la mañana?
Hoy amanecimos a -5 grados y he batido mi propio récord de mínimas en bici. Los primeros cinco minutos han sido "hardcore", pero después, con las pedaladas, he entrado en calor enseguida y, salvo el moquillo que se va descolgando por el frío, no he tenido mayor problema en hacerme los 7 km de ida al curro rodeada de escarcha. Tengo un gorro térmico realmente bueno, buenos guantes de piel y, fundamental, una buena pantaleta que me calo hasta casi los ojos. También me pongo las gafas de sol para protegerlos del aire gélido. Me pongo varias capas de ropa y las corono con un jersey de lana y un abrigo de plumón. Casi siempre llego rezumando.
La gente, cuando me ve llegar, se echa las manos a la cabeza y me mira con cara de susto, pero ellos están casi todos acatarrados y yo no. Bueno, de momento, que no me creo libre ni a salvo de nada en este mundo.
Es una delicia disfrutar del paisaje escarchado con la bici. Y, de paso, curto y endurezco el cuerpo, que siempre viene bien.