Eso digo yo, que no me tocaba ni a mí ni a ninguno de los otros 3 que venían conmigo.
Es complicado de contar porque se juntaron varias cosas en un mismo punto, pero para que se entienda te diré que otro vehículo me dio un susto de querida progenitora por el lado izquierdo a la vez que los acompañantes me gritaban "¡Por ésta, tienes que salir por ésta!".
Era una salida de autovía muy mal indicada, no se veía si no la conocías (el puñetero Madrid de los huevones) y con el susto que llevaba no adecué bien la velocidad y me metí sin saber lo que me iba a encontrar.
Aparte llevaba la música muy alta, un coche pegado a mi ojo ciego que hizo que me diera miedo frenar, el asiento mal colocado porque el que iba sentado detrás no cabía en su hueco (con lo que tampoco atiné al pedal de freno)... Vamos, que no me quedó otra que acelerar, porque me vi de morros con el terraplén delante perdiendo la tracción y la única escapatoria era acelerar y que lo viera la virgen.
Inexperiencia de novato, también lo tengo que reconocer. En aquel momento tenía 22 años y apenas 3 meses de experiencia conduciendo. Pero la cuestión es que salimos enteros de la curva y se lo atribuyo a los neumáticos al 100%, porque las circunstancias eran perfectas para haberse apiolado.
¿Entras en una curva a 100 limitada a 40 además con un R5 y le echas la culpa a los neumáticos? Por favor...