Hay una rubia en mi curro que está buena (trabajadora a tiempo parcial), y me da la sensación de que me las lanza suavemente, (pero no estoy muy seguro, por eso no la meto en "posibles") solo sé que me ha llamado tres veces con excusas completamente absurdas.
Bueno el tema es que tiene un niño con tío del que se divorció hace tres años, pero a pesar de la maternidad la tía está muy buena.
Es una muerta de hambre que mal vive como actriz de segunda clase dando bolos en algunas series de tercera categoría que ruedan en Manhattan.
Un día hablando con ella me dijo: Es que yo sé que soy una mujer blanca privilegiada y por eso tengo que sufrir.
Esta gente está como una fruta cabra.
Por cierto: Si me prometes no hacerme cositas raras cuando esté durmiendo te invitaré a mi estudio fashion del Upper East Side. Que sé que echas de menos tus noches locas en los clubs del downtown Manhattan.