dos cosas, que uno no sabe nunca hasta que punto es realidad o te lo has imaginado
- Cuando tenia menos de 10 años, vivia en un barrio periférico, en la linde entre el urbano y el campo. Una vez caminaba con la pandilla por el cauce de un rio seco haciendo el cabra, cuando escuché un zumbido constante que subía y bajaba de intensidad. Decidimos ir a la fuente del sonido, era relativamente llano y el zumbido venía de un objeto verde que brillaba acorde con el zumbido. Cuando nos acercamos el zumbido aumentó de intensidad, hasta que el miedo pudo con nosotros y salimos corriendo a casa. El recuerdo es borroso, no he podido verificar esta historia con los que iban conmigo, porque les perdí la pista ya hace bastante y no volvimos nunca a hablar de ello.
- Mi hija, pequeña, tres años. Ahora vivimos en el campo, rodeado de frutales. Mi hija empieza a investigar los alrededores de la finca por su cuenta, mas o menos la tenemos controlada, pero nos gusta que explore. Una de las veces vuelve blanca, ha ido al pozo, uno en desuso que tenemos y una voz como de persona mayor le ha dicho algo así como, niña no te acerques al pozo que te puedes caer. En la finca, aparte de nosotros no había nadie más, mi hija no recuerda el incidente, nosotros se lo contamos y ella pregunta con curiosidad. Por supuesto, el pozo fue sellado poco despues.