No he visto nada de eso, pero sí que he visto muchas veces grupos haciéndolo, y nada de a escondidas, en el bar. Ponían todos el dedo encima del vaso (yo, que era muy incrédulo, participé alguna vez) y éste se movía de letra en letra, otro iba anotando y las frases eran totalmente coherentes. Y unas parrafadas tremendas. Lo que pasa que no acertaba siempre, porque avisaba de que iba a pasar tal cosa y luego no sucedía. Sin embargo a uno le dijo que moriría joven, y efectivamente así fue, aunque no sucedió en accidente de circulación como le había dicho. Esto de la ouija lo hacíamos a principios de los años 80. Y creo recordar que hará unos veinticinco años, uno de ellos, que era el que más interés ponía y le dedicaba horas y horas al asunto, comentó que varios de los amigos del pueblo de los que la ouija había dicho que morirían jóvenes, efectivamente así fue; en otros falló. Soy de un pueblo pequeño, y de mi edad, tres años arriba o abajo, 16 de ellos no llegaron a los 40, algunos mucho más jóvenes.
No sé qué explicación racional pueda tener, da la impresión de algo así como un inconsciente colectivo. Pero lo realmente sorprendente es que se puedan formar frases tan coherentes. Es que lo vi con mis propios ojos muchas veces, que el vaso se movía muy rápido y podía estar así un par de horas contando sin parar.
