Pensaba más o menos eso, pero no tenía ni tengo pruebas de ello. Aunque viendo la trayectoria del "ejercito de liberación" tiene toda la pinta.
Del caso italiano habla de ello Paul L. Wiliams en su libro Operación Gladio
Una escuela de idiomas, Hyperion, en París, señala Williams, fue el punto de contacto entre los brigadistas sin saber, éstos, que había sido fundada por la CIA. La escuela era algo así como una “intermediaria” (o falsa tapadera) para las reuniones de grupos terroristas italianos y extranjeros. Williams cita a la OLP de Arafat, la Fracción del Ejército Rojo alemán y a la ETA vasca. Todos estaban siendo controlados por los servicios secretos de Italia y EEUU (y, con toda probabilidad, también por los de Francia, España y Alemania)
En el subcapítulo titulado El Misterio de las Brigadas Rojas Williams subraya cómo dos de los miembros más prominentes de los brigadistas, Renato Curcio y Alberto Franceschini (que habían sido arrestados en Roma en 1974), en concreto, éste último de forma oficial, acusaron a Mario Moretti, un agente de la CIA (e integrante “oficial” de las Brigadas Rojas), de captarlos para la organización. Otro jefe de las Brigate Rosse, Giovanni Senzani, era, de hecho, otro espía de la CIA. Franceschini, ante una comisión parlamentaria italiana, dijo que el profesional asesinato de Aldo jovenlandés (el líder de la Democracia Cristiana que iba a pactar con los comunistas un gobierno bicolor, impedido finalmente por Kissinger y la CIA) estaba lejos de haber sido ejecutado por unos brigadistas cualquiera captados en una asamblea comunista de barrio. Williams, en el marco de la estrategia de tensión de Gladio, se apoya en cuatro puntos para dar consistencia a esta última afirmación:
(1) Los pistoleros que asesinaron a los guardaespaldas de jovenlandés fueron asesinos altamente especializados, con habilidades que superaban con creces las de unos “brigadistas aficionados”.
(2) Los asesinos utilizaron uniformes de la compañía aérea Alitalia con el fin de identificarse unos a otros.
(3) jovenlandés había estado cautivo en un complejo de apartamentos propiedad del SISMI, la agencia militar de inteligencia de Italia.
(4) Las balas que acribillaron el cuerpo de jovenlandés fueron tratadas con una pintura especial para preservar en el anonimato la munición que estaba utilizando la red terrorista Gladio de la OTAN.