Elon Musk desarrolla un tras*porte terrestre el doble de rápido que un avión
Tesla está revolucionando el tras*porte terrestre con sus coches eléctricos, gracias a la labor emprendedora de su cofundador y consejero delegado Elon Musk. Pero éste quiere ir más allá de la movilidad con cero emisiones de los coches eléctricos y ya planea revolucionar el tras*porte de larga distancia con un prometedor ingenio: un sistema capaz de recorrer los más de 600 km que separan las ciudades de Los Ángeles y San Francisco en apenas media hora.
El proyecto bautizado como Hyperloop, que será desvelado públicamente por Musk el próximo 12 de agosto, consiste en una especie de tubo por el que viajarían "trenes balas" a una velocidad de unos 1.300 km/h, lo que supone casi doblar la de los aviones comerciales estándares. Sería, según el CEO de Tesla, como un "Concorde" terrestre capaz de viajar "desde el centro de la ciudad de Los Ángeles al de San Francisco en menos de 30 minutos", cuando el avión lo hace en alrededor de una hora, ha adelantado Musk.
"Este sistema que tengo que nunca se estrellaría, inmune al tiempo meteorológico... Creo que podríamos hacer que se autoabasteciese de energía; si se instalasen en él paneles solares, se generaría más energía que la que se consumiría en el sistema. Es posible almacenar la energía de tal modo que funcionase las 24 horas del día sin necesidad de baterías. Sí, esto es posible, absolutamente", ha llegado a explicar el propio Elon Musk.
Un "quinto medio de tras*porte" igual de accesible
Este "quinto medio de tras*porte", como lo ha bautizado Musk como alternativa al tras*porte de pasajeros por coche, tren, barco o avión, no supondría pues ningún peligro para los viajeros. De hecho, las fuerzas G que éstos deberían soportar no serían mayores que las que se experimentan a bordo de un automóvil convencional. Y lo más importante, no sería, según se ha dicho, mucho más caro que el tras*porte convencional.
En cualquier caso, el revolucionario concepto, como el del coche eléctrico, no es nuevo. Este tipo de sistema que utiliza el aire comprimido para mover objetos a través de un tubo que conecta puntos fijos ya es usado en algunas industrias, y fueron más frecuentes en el siglo XIX. Pero, a pesar de que en sus primeros años se especuló con que la tecnología podría utilizarse para el tras*porte de personas, nadie nunca pudo llevarlo a la práctica.
Ahora, aunque es pronto para saber con certeza cuánto de real hay en las altísimas expectativas que han generado las palabras de Musk sobre su Hyperloop en los últimos meses, el emprendedor de origen sudafricano promete revolucionar la tecnología. Y pese a que de momento no hay muchos detalles al respecto -la presentación del próximo día 12 de agosto de una primera versión "alfa", que en ningún caso dispondrá de una prueba del sistema- debería arrojar más luz, la reputación de Musk generada en los últimos tiempos le otorgan la credibilidad suficiente como para que sus promesas sean tomadas en serio por la opinión pública.
Elon Musk desarrolla un tras*porte terrestre el doble de rápido que un avión - Ecomotor.es
Tesla está revolucionando el tras*porte terrestre con sus coches eléctricos, gracias a la labor emprendedora de su cofundador y consejero delegado Elon Musk. Pero éste quiere ir más allá de la movilidad con cero emisiones de los coches eléctricos y ya planea revolucionar el tras*porte de larga distancia con un prometedor ingenio: un sistema capaz de recorrer los más de 600 km que separan las ciudades de Los Ángeles y San Francisco en apenas media hora.
El proyecto bautizado como Hyperloop, que será desvelado públicamente por Musk el próximo 12 de agosto, consiste en una especie de tubo por el que viajarían "trenes balas" a una velocidad de unos 1.300 km/h, lo que supone casi doblar la de los aviones comerciales estándares. Sería, según el CEO de Tesla, como un "Concorde" terrestre capaz de viajar "desde el centro de la ciudad de Los Ángeles al de San Francisco en menos de 30 minutos", cuando el avión lo hace en alrededor de una hora, ha adelantado Musk.
"Este sistema que tengo que nunca se estrellaría, inmune al tiempo meteorológico... Creo que podríamos hacer que se autoabasteciese de energía; si se instalasen en él paneles solares, se generaría más energía que la que se consumiría en el sistema. Es posible almacenar la energía de tal modo que funcionase las 24 horas del día sin necesidad de baterías. Sí, esto es posible, absolutamente", ha llegado a explicar el propio Elon Musk.
Un "quinto medio de tras*porte" igual de accesible
Este "quinto medio de tras*porte", como lo ha bautizado Musk como alternativa al tras*porte de pasajeros por coche, tren, barco o avión, no supondría pues ningún peligro para los viajeros. De hecho, las fuerzas G que éstos deberían soportar no serían mayores que las que se experimentan a bordo de un automóvil convencional. Y lo más importante, no sería, según se ha dicho, mucho más caro que el tras*porte convencional.
En cualquier caso, el revolucionario concepto, como el del coche eléctrico, no es nuevo. Este tipo de sistema que utiliza el aire comprimido para mover objetos a través de un tubo que conecta puntos fijos ya es usado en algunas industrias, y fueron más frecuentes en el siglo XIX. Pero, a pesar de que en sus primeros años se especuló con que la tecnología podría utilizarse para el tras*porte de personas, nadie nunca pudo llevarlo a la práctica.
Ahora, aunque es pronto para saber con certeza cuánto de real hay en las altísimas expectativas que han generado las palabras de Musk sobre su Hyperloop en los últimos meses, el emprendedor de origen sudafricano promete revolucionar la tecnología. Y pese a que de momento no hay muchos detalles al respecto -la presentación del próximo día 12 de agosto de una primera versión "alfa", que en ningún caso dispondrá de una prueba del sistema- debería arrojar más luz, la reputación de Musk generada en los últimos tiempos le otorgan la credibilidad suficiente como para que sus promesas sean tomadas en serio por la opinión pública.
Elon Musk desarrolla un tras*porte terrestre el doble de rápido que un avión - Ecomotor.es