A priori estas marcas se conceden - como era de esperar - mucho autobombo y dan la apariencia de preocuparse realmente por el producto; algunas tabletas son de producción limitada y numerada
Vaya, no sabía eso y no se me había ocurrido. Independientemente de la calidad del chocolate, numerarlo me parece una buena manera de inculcar la idea de elitismo en el comprador. Claro, eso no lo puede hacer Lindt, porque no sería nada elitista descubrir que te estás comiendo la tableta 1.804.727.
Buena suerte con el paraguas, todavía no he encontrado algo semejante; si bien es cierto que por aquí suele haber unas ventoleras exageradas .
Pues precisamente mi interés en ello surgió tras ver un vídeo-anuncio de un paraguas todoterreno que lo mismo servía para resistir ventoleras, que para subirse encima poniéndolo apoyado entre dos sillas que como palo para atizar a agresores. Me olvidé de ello hasta ahora con esta conversación. Creo recordar que costaba sobre 300 €. Supongo que guardé la dirección del vídeo porque suelo hacerlo con todas las cosas que me interesan, así que será cuestión de buscarlo. También creo que Aynrandiano o alguien mencionó otra marca menos cara que hacía una función similar. Cada vez me interesa más gastar dinero en cosas pseudo-eternas, como mis gafas o ese paraguas.
Una persona puede ser una ecuación más o menos compleja, con más o menos variables. Visto lo que he visto... no puedo evitar rechazar dogmas... por no decír que vivimos una época en que la nutrición se está convirtiendo en un sustituto de la religión, con sus figuras pintorescas, sus seguidores, sus radicales, teorías que se contradicen entre sí una y otra vez, revelaciones absurdas de es-tu-dios y 100-tifikos ... mala época con esta saturación para creer que sólo existe una manera... y arriesgado decír estas cosas en un foro sin ser atacado por los seguidores de turno .
Es que como está tan de moda hoy en día hacer ejercicio, correr, los gimnasios y demás, me surge el deseo de ir contracorriente. Aunque siempre he sido ágil y se me ha dado bien correr, mi vagancia natural me impedía hacerlo salvo que fuera necesario. Por eso me parece bien que alguien abra hilos criticando hacer ejercicio, como se ha hecho en los últimos meses en el foro generando mucho debate con buenos argumentos. A mí me gusta nadar, tenis de mesa, andar y montar en bici. Cada cual luego es libre de reflexionar y de probar qué es lo que más le gusta y qué es lo que le sienta bien. No es lo mismo ser delgado que atlético. Alguien atlético a lo mejor tiene aversión al tenis de mesa o a montar en bici y le va más otras cosas, mientras que a mí la moda de los gimnasios me repele.
A mí de los corredores lo único que me molesta es que yo suelo cruzar el parque de El Retiro con bastante frecuencia, y también pasar por el de Madrid Río, en ambos casos andando, y me cruzo con incontables corredores que al pasar a mi lado van jadeando y preferiría no captar sus jadeos tan cerca de mí aunque sea un instante, porque son muchos y son muchos instantes en total. No hablemos ya de quien escupe al suelo, que a esos les crujía a multas. Me obligan a ir mirando el suelo a ver dónde piso. Y es que en Madrid hay, como decía Genesis en una canción, "too many people making too many problems".
Recuerdo al salir de la universidad ir caminando con uno que presumía de ser muy deportista, de jugar mucho al baloncesto, y no querer correr un poco para coger el autobús, cuando ese día no había jugado al baloncesto. O no querer subir las escaleras del metro andando, "porque cansa", cuando para mí era una costumbre normal y corriente. Pues vaya deportista de m. eres, macho, pensaba, y me tenía que contener. Es lo que pasa cuando algo se pone de moda, que todo quisqui quiere o se siente obligado a apuntarse a la moda, y ya lo dice el refrán, que se pilla antes a un mentiroso que a un cojo, y esas mentiras son por la presión social de que hay que ser deportista.
No puedo negar que las analogías humano-animal me producen un hartazgo de alto nivel, siempre aislando la característica que interesa del animal para encajonarlo en nuestro ejemplo, obviando todas las - muchas - diferencias ... y por supuesto tapando debajo de la alfombra todas esas imágenes sacando brillo genitales, consumiendo heces o sacando brillo orina, orinando en cualquier sitio o los grandes instintos por meter la cabeza o cuerpo entero en una caja o en la sarama .
Los animales son muy cochinotes a veces, pero no creo que sus guarrerías expliquen su buena forma física, que poseen aplicando esa sabia ley natural del mínimo esfuerzo. También es verdad que el resto del tiempo tienen que moverse por narices, quieran o no, para cazar o no ser cazados, mientras que un humano tendente a la vagancia como yo puede caer en el vicio de no hacerlo. Al menos me obligo a recorrer buenas distancias andando en vez de usar algún medio de tras*porte. Pero que conste que lo hago porque al hacerlo cruzo parques sin coches ni ruidos, y con más motivación cuando llega la prima Vera.
Aynrandiano - usando lenguaje foril - es un blanconegrista premium que mientras pasea por la playa de la vida niega la existencia de mar repleto de múltiples tonalidades grises y prefiere mirar hacia otro lado.
Yo no dudo de que la probabilidad de sufrir algún accidente o atentado por Aynrandiano sea menor que la mía. La cuestión es, ahora que no nos lee, ¿merece la pena el esfuerzo y tiempo dedicado en ir superprotegido por todos lados para rebajar la probabilidad de un nivel minúsculo a un nivel ínfimo? Pues no. Si viviéramos en zona de guerra está claro que sí, y aunque por desgracia la inseguridad ciudadana va en aumento por motivos obvios, todavía no nos merece la pena llevar un chaleco antibalas por la calle y cosas por el estilo. Pero si es feliz así, habrá que dejarle, y además, siempre hay cosas que potencialmente se podrían aprender de hasta el más orate, y con más motivo de gente como Aynrandiano que es lo contrario.
Pufffff..... pufffff.... pufffff..... lo siento de verdad si suena borde... no es mi intención... pero este es el momento en el que lees esa frase yonki-ochentera ( sí, muy repetida por los yonkis de la época por aquí , a lo que seguía una risotada-tos-quescupoloshígados ) repetidas millones y millones de veces ... provocando fallecimientos en mi cerebro .
Lo de "correr es de cobardes" era broma. Me acordé de esa frase y la solté.
Una cosa es pulír un único aspecto de un todo, y otra muy distinta reforzar ese aspecto de múltiples formas ( carrera corta, fondo, desplazamiento lateral, potencia de salto vertical, etc... ) , hacer lo propio con otros aspectos... y luego aplicarlo todo en conjunto. La famosa paradoja: no importa no ser el número 1 en una disciplina atlética si eres de los 50-100 mejores en múltiples disciplinas y te aprovechas de esto a través de otra disciplina en la que puedas combinar todo... de repente te conviertes en una figura .
Eso me ha recordado al gran Serguei Bubka, multiplusmarquista mundial de salto con pértiga. Le preguntaban cuál era su secreto y decía que era tener una técnica de salto refinada y una pértiga muy dura. Cuanto más dura es la pértiga, más difícil es de doblar, pero cuando se dobla, almacena más energía cinética en forma de energía elástica (él no lo explicaba así como un físico; así lo explico yo), y luego la pértiga liberaba esa energía elástica impulsándole a él hacia arriba, que, unido a su técnica refinada, le permitia batir récords y ganar mundiales de atletismo. Para poder doblar la pértiga, tenía que correr muy deprisa (alcanzar mucha energía cinética), y era capaz de correr los 100 m. por debajo de los ¿10 seg.? (ya no recuerdo la cifra que daba). Pero vamos, que era el puñetero amo. De los mejores deportistas de la Historia.
Yo en cambio, siempre he tenido claro que lo mío no era hacer deporte con intensidad. Se me daba muy bien correr y el ciclismo, subir cuestas empinadísimas de chaval con las que otros tenían que bajarse de la bici, pero ¿para qué? Hay otras cosas que a mí, me producen más recompensa. Cada cual si hace lo que hace es porque obtiene una recompensa adecuada. Lo que me hace desconfiar es que si el régimen promociona el deporte no es por algo bueno.