¿Por qué los gente de izquierdas siempre ensalzan a las Brigadas Internacionales y no al combatiente republicano?

Muy buena foto! Se ve la sobriedad y la serenidad de la mirada castellana ante el atropello de volver a ver a la morisma en España... Para una cosa que hizo bien la república no vamos a criticársela.

Hace poco que comenté algo muy parecido sobre la eugenesia, viniendo a decir lo que cuentas, que el eugenismo era una moda compartida por todos (incluidos conservadores) que reproduzco.

Es un cartel fascinante. El mensaje se limita a señalar que los jovenlandeses están aquí. No hace falta reforzar la consigna con alusiones a ninguna atrocidad cometida por los marroquíes, porque se da por sentado que todo el mundo entiende que no deberían estar aquí. No es necesario argumentarlo, es algo evidente. Con decir que están aquí es suficiente para lograr el propósito propagandístico del cartel.

El fundamento de ese cartel sigue vigente hoy en día, pero ni siquiera VOX tiene valor para hacer una propaganda así.

Cuando termina la IIGM se decide que es mala, curiosamente el órgano de propaganda antirracista y antieugenista de las NNUU fue Julián Huxley, eugenista y descendiente de una de las familias mas famosas de biólogos y defensores acérrimos del darwinismo. Las élites siguen siendo eugenistas y racistas, pero fomentan lo contrario entre los proles.

Lo de la Eugenesia a principios del Siglo XX es un asunto realmente pavoroso. La rapidez con la que se estaban normalizando esas teorías, asumidas como buenas, progresistas, la lógica científica. Cuando Aldous Huxley escribe "Un Mundo Feliz" en 1931, da por asumido que el eugenismo que defendía su hermano se habrá impuesto en el futuro.

Si no hubiera sido por el Tercer Reich, posiblemente el Eugenismo se habría continuado asumiendo de manera gradual hasta convertirse en la norma, mediante el efecto de la rana hervida.
 
Última edición:
...
No-do, el noticiario que el régimen de Franco obligaba a emitir en todos los cines antes de la proyección de las películas, explicaba así el comienzo de esta historia: "Todos los fiel a la religión del amores de nuestro Protectorado en jovenlandia, impregnados del amor y la cultura que en ellos ha sembrado España, acuden en socorro inmediato al escuchar los clarines de la llamada de Occidente. (...) Ni levas ni propaganda. Voluntarios nada más. Por mandato del corazón".

La realidad fue muy distinta. Los militares facciosos reclutaron a los marroquíes a través de la red de caídes amigos que el Ejército de África había tejido durante los años anteriores. El reclamo era económico: una paga que rondaba las 180 pesetas al mes, con dos meses de anticipo, y cuatro kilos de azúcar, una lata de aceite y tantos panes como hijos tuviera la familia del alistado. Empujadas por el hambre, miles de familias enviaron a sus hijos al matadero.

En el documental son entrevistados varios de aquellos soldados. Uno de ellos se llama Mimou Mohammedi. Convertido en un venerable anciano, resume gráficamente lo que hicieron con ellos: "Nos metieron como a gatos en un saco, nos soltaron en España y nos dijeron: ¡a disparar o a morir!". Alentados por los oficiales, se aplicaron a la tarea con la misma brutalidad que habían aprendido pocos años antes luchando contra los españoles en las guerras de África: destripamientos, decapitaciones y mutilaciones de orejas, narices y testículos. Los generales aventaban su fama de salvajes. Desde la radio de Sevilla, Queipo de Llano prometía a los "milicianos castrados" que sus mujeres pronto conocerían la virilidad a manos de aquellas tropas.

...

Pero hay una pregunta que el documental de Driss Deiback no formula: ¿existe en jovenlandia un sentimiento inverso al repruebo al jovenlandés? El escritor Carlos Lencero vivió durante varios años en el Rif. Su anfitrión era un hombre mayor que había luchado en la guerra de España. Un día, Lencero le hizo notar la aparente contradicción que suponía haberse batido contra Franco en jovenlandia para luego ir a pelear junto a él en España. El anciano levantó las cejas con sorpresa: "¿Por qué le extraña?", dijo. "Nosotros siempre hicimos lo mismo: apiolar españoles".

Los jovenlandeses de la 'cruzada' de Franco | Babelia | EL PAÍS (elpais.com)
 
Última edición:
Al menos en las guerras civiles zaristas las batallas eran "blancos" vs "gente de izquierdas".

Pero lo de la segunda guerra mundial deja descolocao a cualquiera si la mira a profundidad.

gente de izquierdas vs gente de izquierdas.

Y en la guerra civil española era más de lo mismo.

No hay na mas rojo el nacionalcatolicismo

Siempre un dictador y de paso seguridad social.

Partido único.

Limpieza social y étnica, sino entras en mí línea, exterminado y depurado.

gente de izquierdas.

Siempre un dictador y de paso inseguridad social.

partido único.

Limpieza social y étnica, sino entras en mí línea, purgado y vaporizado.

gente de izquierdas nazis.

Siempre un dictador y de paso seguridad social.

Limpieza social y étnica, sino entras en mí línea, purgado y vaporizado

Partido único.

Sino lo podeis procesar, solo mirad vuestro entorno.

tragacirios van de la mano con los nancys y los gente de izquierdas de pilinguin.

¿Que los une?

Como son acondroplásicos, pobres y mindundis, odian to lo que es la sociedad actual.

Necesitan pureza racial, y que el frutanato les dé una razón pa seguir viviendo sus vidas oscuras y vacías.

Tengan mucho miedo de una vida ocupada, pero que este al mismo tiempo vacía.

El foro es ejemplo de ello. y afuera también.
 
El Ejercito Popular, jovenlandés de Regulares o de la Mehalla, que hacia prisionero, jovenlandés que fusilaba, muy pocos se salvaron, en las memorias de un capitan republicano en el frente de Viver (Castellon), cuenta como su compañia hizo prisionero a un regular jovenlandes y al interrogarlo, le pregunto por que se habia alistado voluntario para venir a la guerra de España, el jovenlandés contesto que lo hizo por sus ideales, el oficial se quedo impresionado y termino enviandolo a retaguardia...

Tiempo despues se encontro al mismo personaje, pero enrolado en una unidad republicana como soldado y le pregunto por sus ideales;

"apiolar españoles"

otro invent
 
...
No-do, el noticiario que el régimen de Franco obligaba a emitir en todos los cines antes de la proyección de las películas, explicaba así el comienzo de esta historia: "Todos los fiel a la religión del amores de nuestro Protectorado en jovenlandia, impregnados del amor y la cultura que en ellos ha sembrado España, acuden en socorro inmediato al escuchar los clarines de la llamada de Occidente. (...) Ni levas ni propaganda. Voluntarios nada más. Por mandato del corazón".

La realidad fue muy distinta. Los militares facciosos reclutaron a los marroquíes a través de la red de caídes amigos que el Ejército de África había tejido durante los años anteriores. El reclamo era económico: una paga que rondaba las 180 pesetas al mes, con dos meses de anticipo, y cuatro kilos de azúcar, una lata de aceite y tantos panes como hijos tuviera la familia del alistado. Empujadas por el hambre, miles de familias enviaron a sus hijos al matadero.

En el documental son entrevistados varios de aquellos soldados. Uno de ellos se llama Mimou Mohammedi. Convertido en un venerable anciano, resume gráficamente lo que hicieron con ellos: "Nos metieron como a gatos en un saco, nos soltaron en España y nos dijeron: ¡a disparar o a morir!". Alentados por los oficiales, se aplicaron a la tarea con la misma brutalidad que habían aprendido pocos años antes luchando contra los españoles en las guerras de África: destripamientos, decapitaciones y mutilaciones de orejas, narices y testículos. Los generales aventaban su fama de salvajes. Desde la radio de Sevilla, Queipo de Llano prometía a los "milicianos castrados" que sus mujeres pronto conocerían la virilidad a manos de aquellas tropas.

...

Pero hay una pregunta que el documental de Driss Deiback no formula: ¿existe en jovenlandia un sentimiento inverso al repruebo al jovenlandés? El escritor Carlos Lencero vivió durante varios años en el Rif. Su anfitrión era un hombre mayor que había luchado en la guerra de España. Un día, Lencero le hizo notar la aparente contradicción que suponía haberse batido contra Franco en jovenlandia para luego ir a pelear junto a él en España. El anciano levantó las cejas con sorpresa: "¿Por qué le extraña?", dijo. "Nosotros siempre hicimos lo mismo: apiolar españoles".

Los jovenlandeses de la 'cruzada' de Franco | Babelia | EL PAÍS (elpais.com)
Incluso se alistaban jovenlandeses del protectorado frances, sin saber ni una palabra de español, cruzaban la frontera y querian venir a la peninsula a apiolar, eso tambien es un invento ???
 
estás tú para pedir fotos , que no has aportado un solo dato al hilo, solo invents de la propaganda franquista LOL
No recuerdo ningun relato, de algun soldado jovenlandes, contando que estuvo preso de los gente de izquierdas, los unicos jovenlandeses del bando republicano eran algunos iraquies y palestinos, comunistas de las BBII, que montaron unos programas de radio en arabe, para que los regulares desertaran y como nadie se pasaba, ni prometiendoles un rebaño entero de cabras, al final se suprimio esa emision en arabe
 
No recuerdo ningun relato, de algun soldado jovenlandes, contando que estuvo preso de los gente de izquierdas, los unicos jovenlandeses del bando republicano eran algunos iraquies y palestinos, comunistas de las BBII, que montaron unos programas de radio en arabe, para que los regulares desertaran y como nadie se pasaba, ni prometiendoles un rebaño entero de cabras, al final se suprimio esa emision en arabe

a pesar de la barbarie de la guerra, había diferencias entre el mando de un bando y otro.

No estaba de moda hacer prisioneros durante los primeros meses de la contienda. En su parte de guerra de 9 de marzo de 1937, Franco mandó acabar a todo extranjero en contrado con el arma en la mano. Esta orden no era nunca revocada. Tampoco cesaron por completo los fusilamientos arbitrarios en zona sublevada hasta el final de la guerra, contándose oficiales y comisarios políticos entre las víctimas más valiosas. Si los extranje ros caían en manos de jovenlandeses o de fanáticos falangistas o requetés, morían incluso siendo simples soldados, mientras que los italianos al servicio de Franco se conformaban con escoltarlos hasta los mandos españoles. No hay duda de que tales matanzas ocurrieron en zona republicana igualmente, a pesar de los esfuerzos del gobierno para frenarlas —un decreto de fecha de 11 de abril de 1937, firmado por Azaña y Largo Caballero, ordenaba entregar a las autoridades competentes a todo combatiente apresado—. Sin embargo, tales amonestaciones eran desoídas frecuentemente en el propio frente republicano.
 
Última edición:
ah, y desertores al bando republicano hubo unos cuantos , pero como en su enorme mayoría eran jovenlandeses mercenarios se quedaban allí donde hallaban mayores incentivos materiales.

el bando golpista alentaba los pillajes, saqueos y violaciones morunos a modo de compensación (y para derrotar la jovenlandesal republicana)
 
ah, y desertores al bando republicano hubo unos cuantos , pero como en su enorme mayoría eran jovenlandeses mercenarios se quedaban allí donde hallaban mayores incentivos materiales.

el bando golpista alentaba los pillajes y saqueos morunos a modo de compensacion.
Pues casos de jovenlandeses fusilados por robar o violar a mujeres u otros soldados, en el bando nacional hay unos cuantos, eso de que se alentaba desde las autoridades, el pillaje de los fiel a la religión del amores no se sostiene
 
eso de que se alentaba desde las autoridades, el pillaje de los fiel a la religión del amores no se sostiene


De la misma manera que en jovenlandia el robo y el botín eran tolerados cuando no fomentados para compensar la escasa paga y mantener contentas a las tropas, los oficiales franquistas españoles no sólo permitían sino que hasta alentaban prácticas análogas en España. La toma de ciudades y pueblos se ajustaba al mismo patrón que las razias en el Rif: entrada a sangre y fuego, seguida de saqueo, destrucción, violaciones y matanzas de la población civil.

Perfectamente conscientes del terror que los «jovenlandeses» causaban entre los milicianos y soldados españoles, Franco utilizó las tropas marroquíes no sólo como carne de cañón, sino también como arma psicológica contra el pueblo español. Se trataba de desmoralizar a los soldados republicanos: cuantos más fueran los crímenes y salvajadas cometidos por los marroquíes, menos arrojo tendrían los soldados de la República para afrontarlos. Como diríaJulián Zugazagoitia:

Psicológicamente ha sido un gran acierto de los mandos rebeldes el colocar a los jovenlandeses en vanguardia. El miliciano les tiene horror y los ve, sin verlos, en todas partes. No se sabe bien qué suerte de fiereza les atribuye. Se creería en un miedo ancestral y atávico contra el que nada pueden ni los razonamientos ni las coacciones.

Se ha dicho con frecuencia que las atrocidades de los soldados marroquíes en España durante la Guerra Civil obedecían a su ansia de venganza contra los españoles, y que exterminando al «rojo», exterminaban al «español», al opresor en general. La cuestión era apiolar «españoles» para descargar su resentimiento, sus rencores y su repruebo contra el ocupante, dar rienda suelta a su deseo de desquitarse de todas las humillaciones, vejaciones y malos tratos que habían soportado de sus mandos. Puede que sea cierto, pero no lo es menos que los soldados marroquíes no habrían podido cometer atrocidades sin la complicidad tolerante de sus jefes. El comportamiento de las tropas marroquíes convenía a la perfección a los propósitos de los jefes militares franquistas, la mayoría de los cuales, formados en la guerra colonial en jovenlandia, concebían la lucha contra el «rojo» en la Península como una prolongación de la guerra colonial contra el «rebelde rifeño».
 
Puede que sea cierto, pero no lo es menos que los soldados marroquíes no habrían podido cometer atrocidades sin la complicidad tolerante de sus jefes. El comportamiento de las tropas marroquíes convenía a la perfección a los propósitos de los jefes militares franquistas, la mayoría de los cuales, formados en la guerra colonial en jovenlandia, concebían la lucha contra el «rojo» en la Península como una prolongación de la guerra colonial contra el «rebelde rifeño».
Ya te digo yo, que es justo lo contrario, los mandos nacionales llegaban a retirar a los tabores de las zonas urbanas o pueblos republicanos, para evitar cualquier abuso a los civiles
 
Ya te digo yo, que es justo lo contrario, los mandos nacionales llegaban a retirar a los tabores de las zonas urbanas o pueblos republicanos, para evitar cualquier abuso a los civiles

eso lo habrás leído en las memorias de tu amado caudillo y sus generales, que son las únicas "batallitas de abuelos" que han quedado grabadas en tu memoria.

ale , hasta más ver. paso de discutir evidencias.
 
eso lo habrás leído en las memorias de tu amado caudillo y sus generales, que son las únicas batallitas de abuelos que han quedado grabadas en tu memoria.

ale , hasta más ver. paso de discutir evidencias.
En el bando nacional los consejos de guerra, eran habituales para los militares que cometiesen delitos graves y se les condenaba a fin por fusilamiento, esas sentencias no estan escondidas, son de dominio publico y se pueden consultar, en el bando republicano puede que se encuentre algun caso aislado, pero a los prisioneros fiel a la religión del amores, habitualmente se les solia ejecutar en el mismo frente de manera sumaria, sin juicio, eso es historia y hay cientos de testimonios de la epoca
 
Volver