No, no, si David el Gnomo está muy claro que tiene una faceta conservadora muy clara: División sensual del trabajo, mujer tradicional en la casa cuidando de la prole y vestimenta claramente diferenciada.
Pero es que es una consecuencia muy lógica del ecofascismo: al rechazar la industrialización, la división sensual del trabajo es necesaria. Hay muchísima gente muy despistada que confunde el ecologismo con el perroflautismo y no es así: una sociedad ecofascista sería no industrializada y derivaría en monogamia estricta y división sensual del trabajo de forma casi ineludible.
La eutanasia de ancianos a llegar a una determinada edad es también una consecuencia lógica de una sociedad ecofascista. Lo que me sorprende enormemente es la resistencia de la gente a ver esto en la serie o incluso a considerarlo adecuado desde un prisma totalmente relativista. Por eso la serie es excelente como propaganda. Consigue que la gente no vea con malos ojos la eutanasia de ancianos cuando se presenta como algo necesario para una sociedad bien ordenada y armoniosa con la naturaleza.
David el Gnomo ejemplifica a la perfección el ecofascismo y sus consecuencias (tanto las buenas como las malas).
Si esa misma historia se contase desde una película catalogada como "terror", presentando la misma sociedad ecofascista, la gente se lleva las manos a la cabeza y empiezan a escribir en columnas sobre la nueva serie que muestra el horror oculto de una sociedad donde se extermina a los ancianos y se reprime a las mujeres, y lo que es peor, donde la gente lo asume como natural.
Pero es que es una consecuencia muy lógica del ecofascismo: al rechazar la industrialización, la división sensual del trabajo es necesaria. Hay muchísima gente muy despistada que confunde el ecologismo con el perroflautismo y no es así: una sociedad ecofascista sería no industrializada y derivaría en monogamia estricta y división sensual del trabajo de forma casi ineludible.
La eutanasia de ancianos a llegar a una determinada edad es también una consecuencia lógica de una sociedad ecofascista. Lo que me sorprende enormemente es la resistencia de la gente a ver esto en la serie o incluso a considerarlo adecuado desde un prisma totalmente relativista. Por eso la serie es excelente como propaganda. Consigue que la gente no vea con malos ojos la eutanasia de ancianos cuando se presenta como algo necesario para una sociedad bien ordenada y armoniosa con la naturaleza.
David el Gnomo ejemplifica a la perfección el ecofascismo y sus consecuencias (tanto las buenas como las malas).
Si esa misma historia se contase desde una película catalogada como "terror", presentando la misma sociedad ecofascista, la gente se lleva las manos a la cabeza y empiezan a escribir en columnas sobre la nueva serie que muestra el horror oculto de una sociedad donde se extermina a los ancianos y se reprime a las mujeres, y lo que es peor, donde la gente lo asume como natural.
