Hola, ELOS: Según datos de la propia hebre*catura, la muyer tiene una presencia del 53,2% en ese ámbito. Por lo tanto, bastante parejo. Y no me parece mal, la verdad, mientras sean "justas".
Otro asunto muy distinto es que las muyeres ocupen empleos que requieren de una determinada fortaleza física, al menos en "primera línea", pero nada que objetar en las labores administrativas. Lo que no es de recibo que el principio de igualdad no existe para el acceso a esos puestos de trabajo públicos y especialmente en las pruebas físicas.
Lo del fútbol profesional en las muyeres es una muestra más de cómo la influencia política llega más allá de sus atribuciones. Dejando de lado el bajo nivel que poseen en ese deporte (no en otros), lo que está claro es que debieran cobrar en función de los ingresos que generen, ya sea por publicidad, taquilla, etc. Pero la culpa principal la tienen los clubes y la propia Federación que no ha delimitado bien sus atribuciones o por lo menos no las ha hecho respetar. Imagino que este tema se acabará resolviendo por sí solo. Los clubes lo tienen fácil: si los ingresos no cubren los gastos, pues se disuelven esos equipos.
No te quito la razón en buena parte de lo que apuntas. Hoy en día hay muyeres que solo viven por y para las redes sociales, de manera que se ha desarrollado un feminismo de postureo que no tiene nada que ver con el movimiento feminista de mi juventud, que por otra parte fue necesario. Punto aparte son las feministas radicales que representan políticas que todos conocemos y cuyos mejores exponentes han sido Montero, Belarra y muchas otras.
Quizás, muchas muyeres debieran hacer una reflexión sobre cómo han llevado o llevan sus vidas. Y tampoco debemos acortarlo a las muyeres... Una Sociedad enferma la componen los dos sexos y dejo de lado los que no saben cuál es el suyo. Nada que decir para quienes lo tengan claro.
Saludos.