MarcoFurioCamilo
Madmaxista
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Post que habla de la objetiva superioridad armamentística de China con respecto a Europa.
Durante la época de los Reinos Combatientes, alrededor del 300AC, surgió la ballesta. Es un arma a medio camino entre un arco y un rifle; inferior al segundo pero superior al primero. La ballesta dispara dardos, no flechas ni balas. Al igual que el rifle, tiene una cureña que se apoya en el hombro. Con el arco tenías estirar, mantener la tensión con tu propia fuerza, apuntar y soltar. Esto requiere mucho talento, con lo que estaba en manos de unos pocos profesionales. Era un arma que retenía mucha energía en un punto, y con un esfuerzo mínimo, por medio de una palanca, la energía retenida se soltaba. La novedad de la ballesta es que permitió reclutar a una multitud de campesinos y entrenarlos rápidamente para disparar. La ballesta provino de la "trampa de arco", un arma con un cable que se accionaba al pasar un animal. La ballesta no fue más que hacer portable esta trampa. Durante la dinastía Han, había unas 500.000 ballestas en China. Quizás ya estaba mejorada, con una mirilla para apuntar mejor, y un cañón para proporcionarle más fuerza.
Más tarde, sobre el 300DC, llegó la ballesta de repetición. Bastante diferente. Primero, tenía una recámara cargada con multitud de dardos. Segundo, tenía una palanca prodigiosa. Cuando se accionaba, el cable se tensaba y a la vez otro dardo pasaba a la recámara. De forma inversa, el cable se destensaba y disparaba. Repetías la operación, con el arma apoyada en el vientre (no en el hombro, ya) y tenías una ráfaga de un dardo por segundo. Era la precursora de la actual ametralladora.
Antes del estribo, la caballería se limitaba a un conjunto de hombres que exploraban un terreno. Pero los chinos inventaron el estribo, algo tan simple como un par de U invertidas que proporcionaban mucha más estabilidad al jinete para golpear, incluso para ponerse de pie y disparar con la ballesta. En el siglo 300AC, ya había grandes hornos metalúrgicos donde se fundía el hierro, y se depositaba en moldes de cerámica con forma de lo que se quería fabricar. Por tanto, es fácil imaginar que el estribo se difundió muy rápidamente. Mientras en Europa aún se fabricaban las armas en toscas herrerías malolientes, los chinos ya tenían fabricas con cientos de artesanos y producción en cadena.
Alrededor del 800, los alquimistas chinos descubrieron la proto-pólvora con la mezcla de tres elementos que no solían faltar en sus estantes: carbón, azufre y nitrato de potasio. Hombres que buscaban la vida eterna, de forma casual, dieron con la fórmula de un invento que revolucionaria la humanidad. Por entonces, tan sólo se advertía: Por favor, no queméis azufre y nitrato de potasio. Es muy peligroso, lo más posible es que se incendie la casa. Ya en el 1.050, se puede hablar de pólvora: con 25% de carbón, 25% de azufre y 50% de nitrato. No explotaba, pero sí ardía de forma letal. Aunque no causase mucho daño físico, al menos al principio, aterrorizaba a todos aquellos que desconocían este invento. La ignorancia también fue muy atrevida cuando un alto funcionario trató de elevarse en el cielo, montado en una silla que iba a ser impulsada por 50 cohetes. Obviamente, murió.
En todo caso, es una ironía que unos hombres que buscaban la vida eterna dieran con un elemento tan letal, ¿no? El primer arma relacionada con la pólvora data del año 900, el ***********. El serpentín, como lo llamaban, era un cañón de bambú al cual vertían pólvora, lo encendían con una mecha y arrojaban el fuego resultante al enemigo. El bambú tiene tres grandes características: es ligero, pero a la vez es duro, y viene hueco de serie.
No obstante, los experimentos con la pólvora llevaron su tiempo, y se tardó en construír las armas de fuego propiamente dichas. Aún así, las granadas de mano o las bombas para demoler murallas ya eran una realidad en el siglo XI. Las granadas de mano consistían en calabazas huecas rellenas de pólvora, con puntas de flecha como metralla. A su vez, si las granadas no llegaban a su objetivo por medio de la fuerza de los músculos, se podía enviar por medio de una flecha, como era habitual. Y también, como se ha dicho, poner pólvora para derrumbar instalaciones era una tarea sencilla y poco arriesgada, que no requería de mucha inteligencia. Pero lo más sorprendente es que para aquel entonces existían las minas, que esperaban a que un enemigo pasase. Al pisarla, se accionaba una sierra dentada que friccionaba un lecho de *******nal. De las chispas resultantes, se encendían las mechas, y las bombas explotaban. Vamos, un mecanismo parecido al mechero moderno, y que inspiró a la creación del trabuco europeo.
A partir del siglo XIII, aparecen los cañones. Consistían en una barra metálica, con una protuberancia en el medio para que la explosión de la pólvora tuviese espacio, y sólo pesaban 3kg. Se utilizó sobretodo en artillería pesada, con cañones de bronce, ligeros pero resistentes gracias a los anillos de refuerzo. El cañón de repetición no tardó mucho en ser inventado: un doble cañón, que permitía disparar un cañón mientras se recargaba el otro. El cañón Gran Capitán, que data del siglo XVII, de dos metros de largo y una tonelada de peso. Podía disparar proyectiles a 500 metros, y fue vital para defender la Gran Muralla de las hordas mongolas. Los chinos supieron ver los factores que determinan la potencia y alcance de un arma de fuego. Primero, la longitud del cañón permite mayor aceleración a la munición antes de salir. Segundo, un proyectil alargado ofrece menos resistencia al aire que uno redondo, y por tanto llega más lejos. Eso explica su destreza a la hora de construír cañones.
¿El origen? Imaginemos un chino que puso demasiada pólvora a su serpentín, y que éste sale disparado. Entonces, ¿nacería el primer cohete? En todo caso, se adquirió una gran maestría con los cohetes, a los que añadían flechas. En el siglo XV, se conoce que los chinos utilizaban lanzacohetes múltiples. Algo que se constató en una batalla durante la dinastía Ming, con más de 30.000 lanzacohetes dispuestos en una multitud de barcos.
------ Conclusión: Si China hubiese invadido Europa en cualquier momento antes del siglo XVI, ¿nos hubieran aplastado como sucias hormigas? Sólo a partir de la Edad Moderna los llegamos a igualar, pero antes no éramos nada en comparación a ellos. Respecto a invadir Europa... no quiero enrollarme, para lo cual necesitaría otro post, pero sólo decir que Europa tenía la misma tecnología naval en el siglo XV que China en el II AC.
Durante la época de los Reinos Combatientes, alrededor del 300AC, surgió la ballesta. Es un arma a medio camino entre un arco y un rifle; inferior al segundo pero superior al primero. La ballesta dispara dardos, no flechas ni balas. Al igual que el rifle, tiene una cureña que se apoya en el hombro. Con el arco tenías estirar, mantener la tensión con tu propia fuerza, apuntar y soltar. Esto requiere mucho talento, con lo que estaba en manos de unos pocos profesionales. Era un arma que retenía mucha energía en un punto, y con un esfuerzo mínimo, por medio de una palanca, la energía retenida se soltaba. La novedad de la ballesta es que permitió reclutar a una multitud de campesinos y entrenarlos rápidamente para disparar. La ballesta provino de la "trampa de arco", un arma con un cable que se accionaba al pasar un animal. La ballesta no fue más que hacer portable esta trampa. Durante la dinastía Han, había unas 500.000 ballestas en China. Quizás ya estaba mejorada, con una mirilla para apuntar mejor, y un cañón para proporcionarle más fuerza.
Más tarde, sobre el 300DC, llegó la ballesta de repetición. Bastante diferente. Primero, tenía una recámara cargada con multitud de dardos. Segundo, tenía una palanca prodigiosa. Cuando se accionaba, el cable se tensaba y a la vez otro dardo pasaba a la recámara. De forma inversa, el cable se destensaba y disparaba. Repetías la operación, con el arma apoyada en el vientre (no en el hombro, ya) y tenías una ráfaga de un dardo por segundo. Era la precursora de la actual ametralladora.
Antes del estribo, la caballería se limitaba a un conjunto de hombres que exploraban un terreno. Pero los chinos inventaron el estribo, algo tan simple como un par de U invertidas que proporcionaban mucha más estabilidad al jinete para golpear, incluso para ponerse de pie y disparar con la ballesta. En el siglo 300AC, ya había grandes hornos metalúrgicos donde se fundía el hierro, y se depositaba en moldes de cerámica con forma de lo que se quería fabricar. Por tanto, es fácil imaginar que el estribo se difundió muy rápidamente. Mientras en Europa aún se fabricaban las armas en toscas herrerías malolientes, los chinos ya tenían fabricas con cientos de artesanos y producción en cadena.
Alrededor del 800, los alquimistas chinos descubrieron la proto-pólvora con la mezcla de tres elementos que no solían faltar en sus estantes: carbón, azufre y nitrato de potasio. Hombres que buscaban la vida eterna, de forma casual, dieron con la fórmula de un invento que revolucionaria la humanidad. Por entonces, tan sólo se advertía: Por favor, no queméis azufre y nitrato de potasio. Es muy peligroso, lo más posible es que se incendie la casa. Ya en el 1.050, se puede hablar de pólvora: con 25% de carbón, 25% de azufre y 50% de nitrato. No explotaba, pero sí ardía de forma letal. Aunque no causase mucho daño físico, al menos al principio, aterrorizaba a todos aquellos que desconocían este invento. La ignorancia también fue muy atrevida cuando un alto funcionario trató de elevarse en el cielo, montado en una silla que iba a ser impulsada por 50 cohetes. Obviamente, murió.
En todo caso, es una ironía que unos hombres que buscaban la vida eterna dieran con un elemento tan letal, ¿no? El primer arma relacionada con la pólvora data del año 900, el ***********. El serpentín, como lo llamaban, era un cañón de bambú al cual vertían pólvora, lo encendían con una mecha y arrojaban el fuego resultante al enemigo. El bambú tiene tres grandes características: es ligero, pero a la vez es duro, y viene hueco de serie.
No obstante, los experimentos con la pólvora llevaron su tiempo, y se tardó en construír las armas de fuego propiamente dichas. Aún así, las granadas de mano o las bombas para demoler murallas ya eran una realidad en el siglo XI. Las granadas de mano consistían en calabazas huecas rellenas de pólvora, con puntas de flecha como metralla. A su vez, si las granadas no llegaban a su objetivo por medio de la fuerza de los músculos, se podía enviar por medio de una flecha, como era habitual. Y también, como se ha dicho, poner pólvora para derrumbar instalaciones era una tarea sencilla y poco arriesgada, que no requería de mucha inteligencia. Pero lo más sorprendente es que para aquel entonces existían las minas, que esperaban a que un enemigo pasase. Al pisarla, se accionaba una sierra dentada que friccionaba un lecho de *******nal. De las chispas resultantes, se encendían las mechas, y las bombas explotaban. Vamos, un mecanismo parecido al mechero moderno, y que inspiró a la creación del trabuco europeo.
A partir del siglo XIII, aparecen los cañones. Consistían en una barra metálica, con una protuberancia en el medio para que la explosión de la pólvora tuviese espacio, y sólo pesaban 3kg. Se utilizó sobretodo en artillería pesada, con cañones de bronce, ligeros pero resistentes gracias a los anillos de refuerzo. El cañón de repetición no tardó mucho en ser inventado: un doble cañón, que permitía disparar un cañón mientras se recargaba el otro. El cañón Gran Capitán, que data del siglo XVII, de dos metros de largo y una tonelada de peso. Podía disparar proyectiles a 500 metros, y fue vital para defender la Gran Muralla de las hordas mongolas. Los chinos supieron ver los factores que determinan la potencia y alcance de un arma de fuego. Primero, la longitud del cañón permite mayor aceleración a la munición antes de salir. Segundo, un proyectil alargado ofrece menos resistencia al aire que uno redondo, y por tanto llega más lejos. Eso explica su destreza a la hora de construír cañones.
¿El origen? Imaginemos un chino que puso demasiada pólvora a su serpentín, y que éste sale disparado. Entonces, ¿nacería el primer cohete? En todo caso, se adquirió una gran maestría con los cohetes, a los que añadían flechas. En el siglo XV, se conoce que los chinos utilizaban lanzacohetes múltiples. Algo que se constató en una batalla durante la dinastía Ming, con más de 30.000 lanzacohetes dispuestos en una multitud de barcos.
------ Conclusión: Si China hubiese invadido Europa en cualquier momento antes del siglo XVI, ¿nos hubieran aplastado como sucias hormigas? Sólo a partir de la Edad Moderna los llegamos a igualar, pero antes no éramos nada en comparación a ellos. Respecto a invadir Europa... no quiero enrollarme, para lo cual necesitaría otro post, pero sólo decir que Europa tenía la misma tecnología naval en el siglo XV que China en el II AC.