Los ateos: esos seres de luz (o no)

BillyJoe

Madmaxista
Desde
31 Ene 2014
Mensajes
3.002
Reputación
3.234
Lugar
Montana
Todos los días sufrimos un bombardeo constante por parte de los ideólogos ateos (mal llamados "laicos"), diciendo lo mala que es la religión y los estragos que provoca en la ciencia y en el arte, poniendo como ejemplo las acciones bárbaras del Estado Islámico (acciones que en realidad se usan para encubrir el trafico de obras de arte, pero eso ya es otro asunto).

Aunque este razonamiento (ateos=100% seres de luz, creyentes=100% bárbaros ignorantes) se cae por su propio peso a poco que recordemos nuestra historia.

No voy a hablar de iglesias quemadas, retablos arrasados, tumbas profanadas... hoy la noticia es la restauración de una obra de Miguel Angel destruida (e incluso quemada) durante la guerra civil española:

El 'San Juanito', la única obra en España de Miguel Ángel, se exhibe en Madrid - 20minutos.es

  • Es la única escultura del artista que se conserva en España.
  • Procede de la capilla del Salvador de Úbeda, en Jaén.
  • La obra, destruida durante la Guerra Civil, podrá verse en el Museo del Prado.
El San Juanito de Miguel Ángel, la única escultura del autor que se conserva en España, se exhibe restaurado por primera vez en el Museo del Prado del 31 de marzo al 28 de junio en el marco del programa La obra invitada, patrocinado por la Fundación Amigos del Museo del Prado.

Propiedad de la Fundación Casa Ducal de Medinaceli-Sevilla y procedente de la capilla del Salvador de Úbeda (Jaén), la obra se expondrá en la sala 47 del edificio Villanueva del Museo del Prado. La pieza fue prácticamente destruida a comienzos de la Guerra Civil y ha estado reducida a fragmentos hasta su restauración en el Opificio delle Pietre Dure de Florencia (Italia).

Por ello, como ha explicado el director del Museo, Miguel Zugaza, se trata de "una excelente oportunidad" de disfrutar de esta obra en mármol, que supone todo "un acontecimiento artístico", además de significar "una denuncia a las barbaries iconoclastas que siguen ocurriendo en el mundo", por lo que ha expresado sus felicitaciones a los expertos de Florencia "por su esfuerzo en la salvaguarda y disfrute del patrimonio".

En la misma línea, el presidente de la Fundación Medinaceli, Ignacio de Medina, Duque de Segorbe, ha lamentado que se trata de "una escultura absurdamente maltratada" mientras que la secretaria general de la Fundación Amigos del Museo del Prado, Nuria de Miguel, ha insistido en la importancia de defender el patrimonio.

El San Juanito de Miguel Ángel es una obra de juventud del artista, anterior a la Piedad del Vaticano y a los frescos de la Capilla Sixtina, que fue donada por el duque de Florencia, Cosmé I de' Medici, a Francisco de los Cobos, secretario del emperador Carlos V, quien la envió a España, a su villa de Sabiote, y posteriormente pasó a enriquecer, tras su fin, la capilla sepulcral del Salvador de Úbeda que mandó construir en esta su ciudad natal.

La escultura estuvo expuesta hasta 1936 en un nicho cerca del retablo mayor de madera dorada realizado por Alonso de Berruguete, también gravemente dañado a comienzos de la Guerra Civil, cuando sufrió graves desperfectos que destruyeron gran parte de la misma y quedó reducida a fragmentos y la cabeza fue quemada. Los expertos han detallado que sólo se pudieron recoger un total de 14 fragmentos, el equivalente al 40% de su volumen original.

Reconstrucción
La Fundación Casa Ducal de Medinaceli-Sevilla, propietaria de la pieza, encargó su restauración al Opificio delle Pietre Dure (Centro de Restauración) de Florencia, un proceso que comenzó en 1994. Para su intervención, se utilizaron métodos novedosos, como el uso del láser para limpiar la superficie de color y abrasada de la cabeza, o la reconstrucción virtual en 3-D de la escultura completa basándose en fotografías tomadas poco antes de su destrucción, como ha detallado la directora del Departamento de Materiales Pétreos de Florencia, Critina Improta.

Una vez montada la estatua con los fragmentos originales de mármol, se integraron las partes perdidas, realizadas con fibra de vidrio y luego estucadas, entonadas con témpera y selladas con cera y barniz; también se utilizaron imanes para juntar los diversos trozos. La escultura recuperada fue presentada al público florentino en 2013.

Tras su exhibición en Florencia y Venecia, regresa a España en el marco de La obra invitada del Prado, antes de su traslado a su lugar de origen, en Úbeda. El Museo del Prado también ha organizado un programa específico de actividades en torno a la muestra para facilitar al público su recorrido por la sala.

Así, durante los meses de abril, mayo y junio se organizarán breves explicaciones delante de la obra para situarla en su contexto histórico-artístico y comentar su presencia en el Museo en relación con su colección.

Escultura helenística
Al volver de Bolonia a Florencia, en 1495, el primer encargo de Miguel Ángel fue una estatua en mármol de un San Giovannino hecha para Lorenzo di Pierfrancesco de Médicis (primo de Lorenzo el Magnífico). Sin embargo, en lugar de seguir el modelo del San Juan Bautista de Donatello como hacían los demás escultores florentinos, Miguel Ángel representó a un santo más joven, como un niño de unos 6 o 7 años.

La escultura, de 130 centímetros, sigue el ejemplo de la escultura helenística griega y apoya la pierna izquierda sobre una roca, que dobla ligeramente, con los brazos doblados, la cabeza ligeramente inclinada y el cuerpo desnudo cubierto por un vellocino.

***

Es interesante remarcar que la destrucción de estas obras se achaca a la "barbarie iconoclasta", que es precisamente el mismo motivo que aduce el Estado Islámico para destruir el arte pre-fiel a la religión del amor. Si, ateos y fiel a la religión del amores son iconoclastas. Curioso, ¿verdad? Ese es el nexo común, el repruebo a cualquier representación de lo divino.

Debatamos amistosamente el por qué los ateos, si no creen en lo divino, odian tanto su representación como para destruir incluso obras de Miguel Angel.
 
La "furia" atea de la guerra civil quizás tenga más que ver con los siglos de opresión de la Iglesia sobre la sociedad y de su posición siempre al lado de los ricos, todo lo contrario de la "furia" fiel a la religión del amora que simplemente va en contra de los que NO comulgan con sus creencias y su fe y todo lo no relacionado con ella.
Incluso entre los religiosos hay hombres buenos, pero acaban como acabó uno con melenas y barba hace unos 2015 años.
 
[...]Es interesante remarcar que la destrucción de estas obras se achaca a la "barbarie iconoclasta", que es precisamente el mismo motivo que aduce el Estado Islámico para destruir el arte pre-fiel a la religión del amor. Si, ateos y fiel a la religión del amores son iconoclastas. Curioso, ¿verdad? Ese es el nexo común, el repruebo a cualquier representación de lo divino.

Debatamos amistosamente el por qué los ateos, si no creen en lo divino, odian tanto su representación como para destruir incluso obras de Miguel Angel.
A lo de por qué se destruyeron iglesias y obras artísticas religiosas a manos de los gente de izquierdas durante la guerra civil ya te lo han dicho. Además que tampoco sabrían si son de Miguel Ángel o de su querida progenitora. Eran estatuas de santos, propiedades de los puñeteros curas. Y quién sabe si el de esa parroquia en concreto era *******asta y le tenían especial tirria.

Pero dime tú a ver qué tiene que ver todo esto con que la religión ayude a avanzar la ciencia.

Menudo ser de luz estás tu hecho.
 
Está muy claro, los que estamos convencidos de que la religión es un invento del hombre, tenemos que afirmarnos para defender nuestras ideas.

Por qué las ideas y las opiniones de los que creen en una religión tienen más valor que las de los demás? Por qué la sociedad tiene que actuar según lo que exijan los creyentes?

Yo estoy en contra de dañar a la gente, de destruir cualquier creación humana, pero los creyentes utilizan las falacias de siempre, atribuyendo intenciones destructivas y malignas a quién no les sigan la corriente. Eso desde hace miles de años, el hombre es así y se creerá cualquier cosa que lo haga evadirse de la dureza de la vida.

La vida es bastante difícil como para tener la obligación de comportarnos según lo que nos impongan, sin derecho a opinar ni disfrutar cuando no se le hace daño a nadie. El ateo acepta la dureza de la vida y no vive soñando que hay otros mundos para evadirse de la realidad.

Tengo muy claro que muchos de los que se dicen creyentes solo se aprovechan de lo que les aporta el clan, de la misma forma que los afiliados políticos.

Afortunadamente, la Historia está cambiando, no me gustaría haber vivido hace siglos en Europa, ni ahora mismo ser un ciudadano de un país de la religión del amor en los que no se puede opinar ni creer de forma diferente a la impuesta.
 
Última edición:
Yo estoy en contra de dañar a la gente, de destruir cualquier creación humana, pero los creyentes utilizan las falacias de siempre, atribuyendo intenciones destructivas y malignas a quién no les sigan la corriente. Eso desde hace miles de años, el hombre es así y se creerá cualquier cosa que lo haga evadirse de la dureza de la vida.
Ese no es el hilo argumental que he planteado. Lo que he dicho es que las intenciones destructivas y malignas son independientes de la religión de la persona. Es decir, que ser ateo no te vuelve menos me gusta la fruta por arte de gracia. Ni más.

En este caso, además, indicaba que, a mi entender, la destrucción de obras de arte se debe más a ser un iconoclasta que a ser ateo/fiel a la religión del amor.
 
La "furia" atea de la guerra civil quizás tenga más que ver con los siglos de opresión de la Iglesia sobre la sociedad y de su posición siempre al lado de los ricos, todo lo contrario de la "furia" fiel a la religión del amora que simplemente va en contra de los que NO comulgan con sus creencias y su fe y todo lo no relacionado con ella.
Incluso entre los religiosos hay hombres buenos, pero acaban como acabó uno con melenas y barba hace unos 2015 años.

Ni idea de lo que pasó ni de quien es cada uno.

Los ataques de los partidos revolucionarios, consentidos cuando no estimulados por los republicanos "moderados", no se centraron en quemar iglesias ni obras de arte. Ese fue un objetivo secundario.
Lo que más destruyeron fueron hospitales, colegios y escuelas profesionales.
Eso es lo que no podían consentir los "sindicatos obreros": sitios donde los cristianos, sus monjas y sacerdotes aliviasen los sufrimientos de los más débiles o les enseñasen una profesión a sus hijos.

Si tan buenos eran los gente de izquierdas, tan numerosos y tenían tanto apoyo popular... ¿por qué perdieron la guerra?
Más aún, ¿cómo es posible que los nacionales recibieran más voluntarios para el combate que los "partidos de masas"? Se ve que "las masas" tenían otras ideas sobre lo que les convenía.
 
Mi familia materna es de Úbeda. La capilla del Salvador no es cualquier iglesia, es una joya del Renacimiento español y tenía obras de los grandes genios del arte, hasta la guerra civil, luego se recuperó lo que se pudo. Contaban en mi familia que durante la guerra sacaron cubos de oro fundido de uno de los retablos.
 
Última edición:
Los cristianos han tenido lo que se han merecido, aquí la prueba:

Cuando Yahvé vuestro Señor os conduzca a la tierra que debéis heredar, caerán ante vosotros numerosos pueblos… Cuando os los haya entregado en vuestras manos, debéis aplastarlos y destruirlos violentamente; no debéis hacer tratados, ni mostrar piedad con ellos… He aquí como debéis comportaros con estos pueblos: destruiréis sus altares y romperéis sus imágenes y talaréis sus bosques sagrados y quemaréis sus ídolos. Pues sois el pueblo santo para Yahvé vuestro Dios. (Biblia, Antiguo Testamento, Deuteronomio, 7: 1-7).
 
Yo me he quedado enmedio, porque no soy ateo ni creo en los dogmas religiosos. De todos modos, muy pocos ateos se dedican a destruir imagenes religiosas que son objetos de arte.
Creo que la existencia de Dios es una hipotesis muy probable, pero no sé cómo es, y creo que su naturaleza, si es uno o son muchos, si es omnipotente o no, son cosas que no podemos saber de verdad, ni se pueden demostrar con ningún método científico.
 
Ni idea de lo que pasó ni de quien es cada uno.

Los ataques de los partidos revolucionarios, consentidos cuando no estimulados por los republicanos "moderados", no se centraron en quemar iglesias ni obras de arte. Ese fue un objetivo secundario.
Lo que más destruyeron fueron hospitales, colegios y escuelas profesionales.
Eso es lo que no podían consentir los "sindicatos obreros": sitios donde los cristianos, sus monjas y sacerdotes aliviasen los sufrimientos de los más débiles o les enseñasen una profesión a sus hijos.

Si tan buenos eran los gente de izquierdas, tan numerosos y tenían tanto apoyo popular... ¿por qué perdieron la guerra?
Más aún, ¿cómo es posible que los nacionales recibieran más voluntarios para el combate que los "partidos de masas"? Se ve que "las masas" tenían otras ideas sobre lo que les convenía.

Quizás los católicos no se movían tanto por humanismo, sino por realizar conversiones entre los débiles. Al fin y al cabo, era la estrategia que ya seguían desde tiempos de Diocleciano, casi dos milenios atrás. Mientras que en la mentalidad indoeuropea el objetivo era admirar al fuerte, en la cristiana era admirar al débil (incluyendo a la guano de la sociedad: hoy en día, el negrito que tiene que "huír de su país" y venir aquí a comprarse un I-Phone).

De todas formas, ¿qué son los gente de izquierdas? Cristianos seculares. En las muchedumbres rojas que citas de la Guerra Civil veo el mismo histerismo y autodegradación que en las muchedumbres cristianas del siglo V.

Anda y que les den...
 
Bastante arriesgada y poco convincente idea esta de asimilar a todos los ateos/no creyentes/laicos con un momento determinado y muy particular de la historia de España en la que se desató una fiebre anticlerical descontrolada y radical por parte de un sector del anarquismo. Algo que duró lo que duró el verano del 36.

Sin embargo, la opresión de toda religión y credo organizado sobre la libertad dura ya siglos, milenios. Parece que eso no resulta tan problemático. Nada justifica ninguna de las dos posturas. Aquí los que salimos perdiendo siempre somos los librepensadores y escépticos.
 
Durante la guerra civil española lo más grave no fue las iglesias que quemaron los milicianos republicanos, sino las decenas de miles de asesinatos que realizó cada bando. El bando nacional ejecutó y fusiló a más gente, pero eso fue porque tuvo la posibilidad de vengarse de sus enemigos después de ganar la guerra.
 
Ese no es el hilo argumental que he planteado. Lo que he dicho es que las intenciones destructivas y malignas son independientes de la religión de la persona. Es decir, que ser ateo no te vuelve menos me gusta la fruta por arte de gracia. Ni más.

En este caso, además, indicaba que, a mi entender, la destrucción de obras de arte se debe más a ser un iconoclasta que a ser ateo/fiel a la religión del amor.

El hilo argumental puede ir por cualquier derrotero. Puedes darle la vuelta al argumento y decir que la creencia y el escepticismo no influyen en absoluto, ni en bondad, ni en maldad, siendo independientes, luego todo el hilo sobraría.

Yo creo que tiene razón de ser (el hilo) pero planteado al contrario. ¿Hay algo más ridículo que suníes y chiíes masacrándose en nombre del visionario *******asta que nunca cumplió sus propios preceptos? Los cristianos fueron en su tiempo igual de bárbaros, pero ya no hay esa religiosidad tan violenta, se han vuelto "laicos".

Los ateístas somos superiores jovenlandesalmente, pues nuestra jovenlandesal no se basa en la tribalidad, ni en mamarrachadas escritas en los cielos o las falacias de autoridad ejercidas contra otros por intereses nada espirituales. Nuestras violencias, de haberlas, las tenemos que basar en hechos racionalizables, y eso, a efectos prácticos, las hace menos plausibles de verse materializadas.
 
Volver