islam: la "profunda" sabiduría [ɐᴉuoɹᴉ] de los hadices

La "profunda" sabiduría de los hadices[1], veamos algunos ejemplos:

• «El Profeta ha dicho: Mientras alguien esté esperando para el rezo, se considerará como que realmente reza, a menos que deje el oratorio o que suelte un pedo» (hadiz de Abu Hurairá, Bujari 54, 452);
• «El Apóstol de Alá ha dicho: Todo bostezo viene de Satán» (hadiz de Abu Hurairá, Bujari, 4, 509);
• «Según Maimuna, un ratón cayó en la manteca y murió. Se le preguntó al Profeta al respecto y él respondió: Sacad al ratón y la manteca que lo envuelve y comeos el resto» (hadiz de Al Qayarauani, Risala malikita 16, 296);
• «Abu Hurairá relata que el Profeta dijo: Toda parte del vestido que sobrepase de los tobillos irá al infierno» (Bujari 77,4);
• «Abdulá ibn Omar dijo: Fui sobre el tejado de mi hermana Hafsa y vi al mensajero de Alá aliviarse frente a Siria, orientado de espalda a la quibla[2]» (hadiz de Abdulá ibn Omar, Muslim 2, 510);
• «Se le dijo a Salman: Vuestro Profeta os lo ha enseñado todo, incluso en lo que se refiere a los excrementos. Él respondió: Sí. Nos prohibió ponernos frente a la quibla en el momento de defecar o de orinar y de limpiarnos con la mano derecha, con menos de tres piedras, con estiércol o con un hueso» (hadiz de Salman al Farsi, Dawud 1, 7);
• «El Apóstol de Alá ha dicho: Hay una deshonra sensual bajo cada pelo; lavaos los pelos y limpiaos la piel» (hadiz de Abu Hurairá, Dawud 1, 248);
• «El ángel Gabriel le dice a Mahoma: Es el perro en tu casa lo que me ha impedido entrar porque nosotros los ángeles no entramos en una casa en donde haya un perro o una imagen» (hadiz de Aisha, Muslim 24, 5246);
• «El Profeta dice: Y cuando oigáis el rebuzno de un asno, buscad refugio en Alá y no en Satán porque su rebuzno indica que han visto a Satán» (hadiz de Abu Hurairá, Bujari 54, 522);
• «El Mensajero de Alá ha dicho: Cuando llegue el día de la resurrección, Alá proveerá a cada de la religión del amor de un judío o de un cristiano y dirá: “en tu sustituto en el fuego del infierno”» (hadiz de Abu Musa, Muslim 37, 6665);
• «Según Aisha, el Profeta no guardaba nada en su casa que contuviese cruces sin eliminarlo» (Bujari 44.48);
• «El Profeta les ordenó beber orina de sus camellos, hasta que recobrasen la salud» (Bujari 7,590; Muslim 1671); etc.

Esta "ciencia" tan "profunda", propiedad indiscutible de la comunidad fiel a la religión del amora y que le permite «ordenar el Bien y prohibir el Mal» (Corán 3,110; 2,143), no cesa de hacer que surjan «sabios», como el Ayatolá Jomeini, que subsanó la carencia de prescripciones del Corán al enseñar particularmente que:

• «Si uno comete un acto de sodomía con el buey, el cordero o el camello, su orina y sus excrementos se vuelven impíos y su leche ya no es consumible»[3];
• «El hombre que eyacule seguidamente de un coito con una mujer que no sea la suya y que eyacule de nuevo haciendo el coito con su mujer legítima, no tiene el derecho de hacer sus rezos si está sudando; pero si para empezar hace el coito con su mujer legítima y seguidamente con una mujer ilegítima, puede hacer sus rezos incluso si está sudando» (ibíd.);
• y para terminar, he aquí seis reglas sobre cómo beber agua dignamente: «1) aspirarla, y no beberla a borbotones; 2) beber de pie; 3) invocar el nombre de Alá tanto antes de empezar a beber como después; 4) beber en tres tiempos; 5) beber voluntariamente; 6) acordarse del martirio de Hazrat Aba Abdolá y de su familia y maldecir a sus asesinos, después de haber bebido[4]».

[1] hadiz: Los hadices constituyen una recopilación de las palabras y comportamientos del profeta del islam, cuyo contenido ha venido siendo, según dicen, garantizado mediante una sucesión ininterrumpida de sus publicadores desde el comienzo: «fulano dijo que mengano dijo que zutano dijo que…» Las principales recopilaciones son las de Al-Bujari († 870) y las de Muslim ibn al-Hayay, reputadas auténticas, mientras que las cuatro siguientes lo serían menos: Abu Dawud, At-Tirmidhi, Al-Nasai, Ibn Maya. A pesar de que, a lo largo de los siglos, la cantidad de hadices y sus detalles no ha parado de aumentar, son creídos ciegamente, especialmente los de Al-Bujari y los de Muslim ibn al Hayay. Algunos son sin embargo tan absurdos o grotescos que los mismos fiel a la religión del amores llegan a dudar de su autenticidad. Los «hadices santos» son en cambio creídos como siendo palabras mismas de Alá, pese a no estar contenidas en el Corán. ■ hadices qudsi: Los hadices qudsi son, según los fiel a la religión del amores, dichos de Alá citados por Mahoma pero que no figuran en el Corán, ni están incluidos en las oraciones hechas para uso de los fieles fiel a la religión del amores. Los mahometanos consideran que son tan reveladores de la palabra de Alá como el mismo Corán, y que por consiguiente son también parte del mensaje de Alá a la humanidad. Existen más de cien
[2] quibla: punto hacia el cual el de la religión del amor debe volverse para hacer su oración.
[3] Ayatollah Khomeiny: Principes politiques, philosophiques, sociaux et religieux, textos elegidos y traducidos del persa al francés por Jean-Marie XAVIÈRE, Éditions Libres-Hallier, 1979, p. 164, n° 61, 23.
[4] Ibíd. Lo que, evidentemente, es muy útil para mantener el repruebo en los corazones.

Lo de beber pipí de camello, tela marinera también.

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