aquinoe
Madmaxista
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Tengo el título de ingeniero en Informática (planes de estudio de los 90, 420 créditos entre el ciclo corto y el largo), aparte del DEA y ya casi el doctorado.
Pertenezco a una promoción ciertamente reducida: no más de 10 terminamos la superior a partir de unos 100 que comenzamos en la rama de sistemas y cuando se entraba con más de un 7 del antiguo BUP (capital de Gales: Cardiff; Si: 3s2, 3p2; las 5 declinaciones al completo; o sea BUP); pues bien, si contemplo con perspectiva a esa pequeñita promoción da pena vernos a día de hoy. Más si cabe, vista la valía y dedicación -déjenme salirme del grupo- de muchos de mis compañeros.
Recuerdo cómo mi padre y mis profesores ya entonces me recomendaban que estudiara económicas, química o incluso náutica, cualquier cosa antes que informática. Yo entonces no los entendía...
Pero, cuando ahora me vienen a la mente los que no me veían el humillo en el instituto y alguno hoy en día ocupa altos cargos en entidades bancarias tras su paso por matemáticas, física, o incluso uno de ADE; o veo la situación laboral de mis propios hermanos menores (arquitecto y médico, beca arquia y número 1 de su promoción, respectivamente, ante quienes mis padres hace tiempo me ponían como ejemplo, juassss) y veo la situación de los de mi quinta empiezo a comprenderlos.
Entre los realmente valiosos destacaba uno -el único genio de entre los que estudiamos juntos: entregaba las prácticas en X11 sobre HP-UX cuando los demás creíamos que el entorno de TurboPascal era la pera-, ése está a un paso de hacerse empresario de la hostelería tras sostener una consultora un par de años frente a viento y marea, es decir frente una administración y tejido empresarial papanatas y unos "socios": economista, abogada y teleco, incompetentes.
El otro que más sobresalía, tiene además una ingeniería en electrónica y creo que comenzó un doctorado, tampoco sigue en el brete. Se desenganchó tras trabajar en una de las grandes, vio la luz y hoy por hoy es controlador aéreo.
Detrás de ellos en capacidad hay dos que sí que continuan en la brecha: en la ESA y en el MareNostrum (científico de plantilla, es estropeado entrar cuando vienes de una universidad pequeñita).
El resto, pues hay de todo. Pero solo uno gana lo que se dice una pasta, por llevar todo el SAP de una empresa de las de >200 empleados (y aún así también está por quitarse: le han ofrecido pagarle un MBA y pasarlo a director financiero). El que peor está económicamente no pasa de los 1000€ a pesar de ser un crack (desarrolla sistemas de biometría en procesadores embebidos, como hace lo que le gusta, le es suficiente).
Los más, trabajan en la típica empresa de software (regida por economistas y en las que ser jefes de proyectos millonarios no les garantiza más allá de los 3000€/mes).
Lo que tenemos todos en común es que lo llevamos en la sangre. No hay manera de que trabajemos menos de 10 horas al día, y hasta que no nos va rematadamente mal no pensamos en dejarlo. Creo que la sociedad no nos valora en justa medida: insisto, sobre todo cuando veo a lo que han llegado los que optaron por otras carreras u oficios. Casi que sólo he visto peor valorados a los físicos (los que creen que los item LR1 son un ****** deberían ojear el Cohen-Tanoudji), y a los suicidas que se meten a Historia del Arte y afínes.
Sinceramente, la balanza entre lo que aportamos a la sociedad y en lo que ella nos valora, está realmente descompensada. Me imagino que en muchos otros campos la situación será similar, pero eso no quita para que, ahora a toro pasado piense que lo que la sociedad ha hecho con nosotros es suicida. También creo que es una disciplina preciosa (cuando lo duden vean la lista de nominados de nuestros "Nobel", en ACM.org/awards. No. La informática no es hermana pequeña de nadie).
P.D.: jra: ¡quítate que aún estás a tiempo!: A Salamanca van los de plan nuevo de mi universidad a echarse unas risas y quitarse las de PL con el cuento de Séneca.
P.P.D.: mi hermano, el arquitecto, trabaja para Tinsa. Los arquitectos dentro de poco competirán junto con nosotros y los telecos en desprestigio social. Yo apostaría por que sus ámbitos profesionales se van a desregularizar, antes que regularizarse el nuestro. No sé si lo estimo más ahora que cumple honradamente con sus bien remuneradas tasaciones o cuando hizo ganar un encargo de unos 12mme para un estudio donde le pagaban lo que a la mujer de la limpieza en calidad de becario "a-ver-si-cae-este-concursito-que-si-eso-ya-lo-termino-firmando-yo".
Pertenezco a una promoción ciertamente reducida: no más de 10 terminamos la superior a partir de unos 100 que comenzamos en la rama de sistemas y cuando se entraba con más de un 7 del antiguo BUP (capital de Gales: Cardiff; Si: 3s2, 3p2; las 5 declinaciones al completo; o sea BUP); pues bien, si contemplo con perspectiva a esa pequeñita promoción da pena vernos a día de hoy. Más si cabe, vista la valía y dedicación -déjenme salirme del grupo- de muchos de mis compañeros.
Recuerdo cómo mi padre y mis profesores ya entonces me recomendaban que estudiara económicas, química o incluso náutica, cualquier cosa antes que informática. Yo entonces no los entendía...
Pero, cuando ahora me vienen a la mente los que no me veían el humillo en el instituto y alguno hoy en día ocupa altos cargos en entidades bancarias tras su paso por matemáticas, física, o incluso uno de ADE; o veo la situación laboral de mis propios hermanos menores (arquitecto y médico, beca arquia y número 1 de su promoción, respectivamente, ante quienes mis padres hace tiempo me ponían como ejemplo, juassss) y veo la situación de los de mi quinta empiezo a comprenderlos.
Entre los realmente valiosos destacaba uno -el único genio de entre los que estudiamos juntos: entregaba las prácticas en X11 sobre HP-UX cuando los demás creíamos que el entorno de TurboPascal era la pera-, ése está a un paso de hacerse empresario de la hostelería tras sostener una consultora un par de años frente a viento y marea, es decir frente una administración y tejido empresarial papanatas y unos "socios": economista, abogada y teleco, incompetentes.
El otro que más sobresalía, tiene además una ingeniería en electrónica y creo que comenzó un doctorado, tampoco sigue en el brete. Se desenganchó tras trabajar en una de las grandes, vio la luz y hoy por hoy es controlador aéreo.
Detrás de ellos en capacidad hay dos que sí que continuan en la brecha: en la ESA y en el MareNostrum (científico de plantilla, es estropeado entrar cuando vienes de una universidad pequeñita).
El resto, pues hay de todo. Pero solo uno gana lo que se dice una pasta, por llevar todo el SAP de una empresa de las de >200 empleados (y aún así también está por quitarse: le han ofrecido pagarle un MBA y pasarlo a director financiero). El que peor está económicamente no pasa de los 1000€ a pesar de ser un crack (desarrolla sistemas de biometría en procesadores embebidos, como hace lo que le gusta, le es suficiente).
Los más, trabajan en la típica empresa de software (regida por economistas y en las que ser jefes de proyectos millonarios no les garantiza más allá de los 3000€/mes).
Lo que tenemos todos en común es que lo llevamos en la sangre. No hay manera de que trabajemos menos de 10 horas al día, y hasta que no nos va rematadamente mal no pensamos en dejarlo. Creo que la sociedad no nos valora en justa medida: insisto, sobre todo cuando veo a lo que han llegado los que optaron por otras carreras u oficios. Casi que sólo he visto peor valorados a los físicos (los que creen que los item LR1 son un ****** deberían ojear el Cohen-Tanoudji), y a los suicidas que se meten a Historia del Arte y afínes.
Sinceramente, la balanza entre lo que aportamos a la sociedad y en lo que ella nos valora, está realmente descompensada. Me imagino que en muchos otros campos la situación será similar, pero eso no quita para que, ahora a toro pasado piense que lo que la sociedad ha hecho con nosotros es suicida. También creo que es una disciplina preciosa (cuando lo duden vean la lista de nominados de nuestros "Nobel", en ACM.org/awards. No. La informática no es hermana pequeña de nadie).
P.D.: jra: ¡quítate que aún estás a tiempo!: A Salamanca van los de plan nuevo de mi universidad a echarse unas risas y quitarse las de PL con el cuento de Séneca.
P.P.D.: mi hermano, el arquitecto, trabaja para Tinsa. Los arquitectos dentro de poco competirán junto con nosotros y los telecos en desprestigio social. Yo apostaría por que sus ámbitos profesionales se van a desregularizar, antes que regularizarse el nuestro. No sé si lo estimo más ahora que cumple honradamente con sus bien remuneradas tasaciones o cuando hizo ganar un encargo de unos 12mme para un estudio donde le pagaban lo que a la mujer de la limpieza en calidad de becario "a-ver-si-cae-este-concursito-que-si-eso-ya-lo-termino-firmando-yo".