Me acabo de acordar de una tontería y no sé donde ponerla.
Me molesta un montón que nos mientan por nuestro bien. Los políticos, los economistas, los sindicatos, los médicos... me parece de un paternalismo mal entendido que me enfurece bastante.
La cosa es obvia cuando se trata de enfermedades, no son raros los consejos del tipo "no mires qué tienes que será peor" o cuando estaba dando a luz por ejemplo, al parecer era malo que preguntara qué significaban las gráficas de tensión y latido por que inexplicablemente era malo para el parto. wtf????
Esto viene a cuento de que los suegros no tienen otra afición más que explicar al acondroplásico el mundo con mentiras para dirigirle, la última de ayer fue que señaló el prao donde estábamos jugando con unos perritos y me dijo "ocre perro". Yo toda tranquila le explico que es hierba, pero que no hay ocre y me responde "debajo hierba".
Le pregunto, cariño, quien te dice que ahí hay ocre de perro? la abuellita? y me responde que sí. Al parecer no se le ocurrió otra manera mejor de evitar que se meta en el barro, en lugar de decirle que la tierra mojada hace barro y que el barro resbala, mancha y moja y no se puede jugar con él sin ropa adecuada.
No me quedó otra, me dolió pero tuve que decirle
- Cariño, la abuelita te cuenta mentiras.
Me temo que en el resto de ámbitos nosotros somos los niños de dos años a los que nos cuentan mentiras por nuestro bien o más bien para hacer más cómoda su vida, y esta anécdota me lo ha recordado y me inflama, te juro que me inflama, porque hay maneras más y menos simplificadas de contar la realidad de acuerdo a las características de quien escucha de manera que no hay lugar para tolerar la mentira a nadie en ningún ámbito.
Me molesta un montón que nos mientan por nuestro bien. Los políticos, los economistas, los sindicatos, los médicos... me parece de un paternalismo mal entendido que me enfurece bastante.
La cosa es obvia cuando se trata de enfermedades, no son raros los consejos del tipo "no mires qué tienes que será peor" o cuando estaba dando a luz por ejemplo, al parecer era malo que preguntara qué significaban las gráficas de tensión y latido por que inexplicablemente era malo para el parto. wtf????
Esto viene a cuento de que los suegros no tienen otra afición más que explicar al acondroplásico el mundo con mentiras para dirigirle, la última de ayer fue que señaló el prao donde estábamos jugando con unos perritos y me dijo "ocre perro". Yo toda tranquila le explico que es hierba, pero que no hay ocre y me responde "debajo hierba".
Le pregunto, cariño, quien te dice que ahí hay ocre de perro? la abuellita? y me responde que sí. Al parecer no se le ocurrió otra manera mejor de evitar que se meta en el barro, en lugar de decirle que la tierra mojada hace barro y que el barro resbala, mancha y moja y no se puede jugar con él sin ropa adecuada.
No me quedó otra, me dolió pero tuve que decirle
- Cariño, la abuelita te cuenta mentiras.
Me temo que en el resto de ámbitos nosotros somos los niños de dos años a los que nos cuentan mentiras por nuestro bien o más bien para hacer más cómoda su vida, y esta anécdota me lo ha recordado y me inflama, te juro que me inflama, porque hay maneras más y menos simplificadas de contar la realidad de acuerdo a las características de quien escucha de manera que no hay lugar para tolerar la mentira a nadie en ningún ámbito.