Preppy sheep
Madmaxista
- Desde
- 27 Mar 2013
- Mensajes
- 4.264
- Reputación
- 12.898
Por eso... no sé cómo enfocárselo. Creo que necesito comparar perspectivas de mentes masculinas. Tengo que hablar con mi hermano y a ver si entre los tres hijos le bajamos a la Tierra.
El problema es que creo que tu padre es de uno de estos dos tipos:
- Los que están "enamorados del amor" es decir, le gusta la sensación de estar con alguien, de tener maripositas rondándoles el estómago, los de despertarse por la mañana pensando en poner un mensaje para que la amada se despierte sonriendo (con música de violines de un cuarteto de cuerda) y de los que necsitan este chute de endorfinas para sentirse vivos...
-Los que son "caballeros andantes": se conmueven con las desgracias ajenas y necesitan una mujer con grandes calamidades (físicas, sociales o económicas) a las que quieren poner remedio como sea (ofreciendo su ayuda, su consejo, su patrimonio, su comodidad y hasta su salud si hace falta). Necesitan sentirse necesarios y admirados, que la mujer valore todo lo que hacen por ella y los tenga en un pedestal (al que a lo mejor no logra subir por otros medios) para sentirse admirado y querido.
Aunque el primer caso es malo, el segundo es mucho peor: en el primero se pueden llevar cortes impresionantes cuando el objeto de su amor no les corresponde, o se aburre rápido de que la "adoren", o bien él puede "engatusar" a otra persona creyendo que sus sentimientos son de verdad, para darse cuenta a los pocos meses que con la rutina las mariposillas se le mueren y tal (aunque suele dejar cadáveres por el camino, los de este tipo se recuperan más o menos rápido, aunque pueden hacer muchas tonterías en la fase "maniaca"). Los del segundo tiene la desventaja de que son mujeres con problemas muy rellenitos, los "usan" (y el verbo usar lo es en todos los sentidos) como salvavidas: emocionales, económicos y sociales y en muchos casos si no hay un sentimiento detrás -y aún habiéndolo- los exprimen hasta que no dan más de sí, dejándolos para el arrastre (estas mujeres además suelen ser supervivientes natas... cuando ven que no hay más donde rascar, desaparecen rápido pero rápido). Si dan con una oportunista el desastre está cantado.
La mala noticia es que como tu padre sea de uno de estos dos tipos, tú vas a tener que seguir el de "bombero": apagar los fuegos cuandos e presenten,. hacer cortafuegos y estar siempre alerta... porque esta vez, de alguna forma puedes apagar el incendio antes de que se produzca (o no), pero dentro de tres meses (o de dos años si no consigues apagarlo a tiempo), es decir, cuando se recupere vas a tener otra vez el mismo problema: sea enamoradizo, o sea un salvador, es lo que él necesita para sentirse vivo, y no vas a convencerlo facilmente de que se está equivocando. La labor de bombero desgasta. Mucho, pero mucho, porque parecen no aprender de los errores y te vas a sentir toda la vida como si estuvieras en un día de la marmota.
Lo único que se me ocurre es que os juntéis los hermanos, le recordéis sus pifias pasadas (y cómo terminaron) y, en el peor caso y si no recapacita, le pidais que para aceptarla en la familia a ella y seguir en contacto con él, estén un tiempo (seis, ocho meses) en que no convivirán, sino que estarán como " novios" y luego un periodo de dos o tres meses más hasta que ella se traiga a los niños... a ver si en ese tiempo ella se aburre, encuentra un proveedor más dispuesto y se larga con viento fresco. Si no quiere, pues le decís que puede hacer lo que quiera, pero que ella desde luego no la consideráis parte de la familia y que no la queréis en vuestras vidas... y a ver qué pasa.
Mucha suerte, y mucha calma, que te va a hacer falta... :X