condimento
aliñando rutas everywhere
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Tema desastres naturales.
Sí, ocurren todos los años. Terremotos y tifones. Añadamos el monzón por estas fechas que coincide ma o meno con el verano español. Y que si pasaran en un país del primer mundo todos estos sucesos pues serían menos noticiables. Pero en tercer mundo los asentamientos descontrolados tapando la salida natural del agua, el alcantarillado siempre embozado, los corrimientos de tierra y sobre todo el chabolismo dirigen al desastre sí o sí.
La temporada de tifones se puede circunscribir al segundo semestre del año. La zona de mayor riesgo es el Este del país, encarada al Pacífico y a partir del paralelo 12 ó 15. Nunca ha habido un turisteo importante en esa franja, salvo para los churferos, Siargao en el Sur desde los 80 y la bahía de Baler en el Norte con el comienzo de este siglo. Antes se salvaba Mindanao pero vino Haynan y dejó el Norte de la isla patas arriba, de todas formas son la excepción. En el Sur del país llueve mucho pero son las perturbaciones locales debido a la proximidad del Ecuador. Como ejemplo el Valle de Compostela donde todos los años entre Diciembre y Enero nadan como los patos.
Y en cuanto al monzón al venir del SO se lleva por delante la franja NO de las islas, con la turística isla de Boracay a la cabeza. Allí sufren unos vientos brutales que obligan a cambiar el puerto de entrada a la isla, tampoco es que sea tan horroroso, simplemente llueve mucho más y en la zona de barlovento colocan unos paneles o redes que amainan el fenómeno. Eso sí, fíjate en el espectáculo de las palmeras doblándose hasta la mitad.
Cómo evitar los tifones. Pues eso, si estás en el segundo semestre del año mira la tabla de huracanes en un website como wunderground. Ni que decir que en la costa Este no se puede quedar uno a verlas mirar. Los peligros más frecuentes son el vuelo de mobiliario urbano y sobre todo el tsunami, que si excede de los dos metros ya puedes adivinar las consecuencias. Los más fuertes que he padecido han sido Pablo con el 4 en Dumaguete que ya venía rebajado, la palma se la llevó CDO en Mindanao. Y el más potente en los registros mundiales con un ojo a menos de 900 mm Hg -creo recordar- que fue Yolanda. Bueno, yo estaba en Luzón y no me enteré.
Ante un tifón mejor quedarse en ciudad donde sólo notarás la abundancia de precipitaciones. Ciudad que no se encuentre en el Este se entiende, si no sal por patas, valga Tacloban como ejemplo. Ah, no me olvido del viento, incluso en huracanes de categoría 3 acongoja el sonido, los silbidos agudos, por poner ejemplos como una olla a presión con el chirimbolo a toda pastilla o como si una locomotora de vapor perdiese el oremus.
Los terremotos son otra historia. Mejor no estar en ciudad porque te puede caer un muro casualmente encima. Me han sucedido varios sismos. Lo que hace la gente es salir a la calle por lo que digo, no sea que tu edificio colapse. Siempre vienen después pequeñas réplicas que te mueven la silla ligeramente. Y si te pilla en movimiento incluso andando igual ni te enteras. Como saben los asiduos al hilo Manila en particular dentro de las islas, como lo es Estambul en el Bósforo son objetivos constantes donde se especula con el Gran Terremoto. La capital filipina está asentada entre una falla notable y otra más pequeña. El abuso en explotación de acuíferos empeora la previsión, provoca además continuas inundaciones en la ciudad por el descenso de altura (algo que también padece California), añadamos ahí el tapón en los desagües. Francamente no sé como sería un terremoto brutal pero nada suave está claro. Como he contado en otras ocasiones donde más susto dan los sismos de 3 ó 4 es en los pisos altos por generar una sensación de columpio.
Bueno paro el ladrillo, más tarde sigo disgregando las recomendaciones de viaje......
Sí, ocurren todos los años. Terremotos y tifones. Añadamos el monzón por estas fechas que coincide ma o meno con el verano español. Y que si pasaran en un país del primer mundo todos estos sucesos pues serían menos noticiables. Pero en tercer mundo los asentamientos descontrolados tapando la salida natural del agua, el alcantarillado siempre embozado, los corrimientos de tierra y sobre todo el chabolismo dirigen al desastre sí o sí.
La temporada de tifones se puede circunscribir al segundo semestre del año. La zona de mayor riesgo es el Este del país, encarada al Pacífico y a partir del paralelo 12 ó 15. Nunca ha habido un turisteo importante en esa franja, salvo para los churferos, Siargao en el Sur desde los 80 y la bahía de Baler en el Norte con el comienzo de este siglo. Antes se salvaba Mindanao pero vino Haynan y dejó el Norte de la isla patas arriba, de todas formas son la excepción. En el Sur del país llueve mucho pero son las perturbaciones locales debido a la proximidad del Ecuador. Como ejemplo el Valle de Compostela donde todos los años entre Diciembre y Enero nadan como los patos.
Y en cuanto al monzón al venir del SO se lleva por delante la franja NO de las islas, con la turística isla de Boracay a la cabeza. Allí sufren unos vientos brutales que obligan a cambiar el puerto de entrada a la isla, tampoco es que sea tan horroroso, simplemente llueve mucho más y en la zona de barlovento colocan unos paneles o redes que amainan el fenómeno. Eso sí, fíjate en el espectáculo de las palmeras doblándose hasta la mitad.
Cómo evitar los tifones. Pues eso, si estás en el segundo semestre del año mira la tabla de huracanes en un website como wunderground. Ni que decir que en la costa Este no se puede quedar uno a verlas mirar. Los peligros más frecuentes son el vuelo de mobiliario urbano y sobre todo el tsunami, que si excede de los dos metros ya puedes adivinar las consecuencias. Los más fuertes que he padecido han sido Pablo con el 4 en Dumaguete que ya venía rebajado, la palma se la llevó CDO en Mindanao. Y el más potente en los registros mundiales con un ojo a menos de 900 mm Hg -creo recordar- que fue Yolanda. Bueno, yo estaba en Luzón y no me enteré.
Ante un tifón mejor quedarse en ciudad donde sólo notarás la abundancia de precipitaciones. Ciudad que no se encuentre en el Este se entiende, si no sal por patas, valga Tacloban como ejemplo. Ah, no me olvido del viento, incluso en huracanes de categoría 3 acongoja el sonido, los silbidos agudos, por poner ejemplos como una olla a presión con el chirimbolo a toda pastilla o como si una locomotora de vapor perdiese el oremus.
Los terremotos son otra historia. Mejor no estar en ciudad porque te puede caer un muro casualmente encima. Me han sucedido varios sismos. Lo que hace la gente es salir a la calle por lo que digo, no sea que tu edificio colapse. Siempre vienen después pequeñas réplicas que te mueven la silla ligeramente. Y si te pilla en movimiento incluso andando igual ni te enteras. Como saben los asiduos al hilo Manila en particular dentro de las islas, como lo es Estambul en el Bósforo son objetivos constantes donde se especula con el Gran Terremoto. La capital filipina está asentada entre una falla notable y otra más pequeña. El abuso en explotación de acuíferos empeora la previsión, provoca además continuas inundaciones en la ciudad por el descenso de altura (algo que también padece California), añadamos ahí el tapón en los desagües. Francamente no sé como sería un terremoto brutal pero nada suave está claro. Como he contado en otras ocasiones donde más susto dan los sismos de 3 ó 4 es en los pisos altos por generar una sensación de columpio.
Bueno paro el ladrillo, más tarde sigo disgregando las recomendaciones de viaje......