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Es uno de los pensadores más influyentes de nuestro tiempo. Los jefes de Estado y los líderes de las mayores empresas del mundo siempre están dispuestos a escucharle. Yuval Noah Harari es un historiador israelí de 43 años, profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalén y autor de éxitos internacionales como Sapiens, Homo Deus, o 21 lecciones para el siglo XXI. Hablamos con él después de una de sus conferencias en Budapest.
Gábor Kiss, Euronews: "Señor Harari, gracias por acompañarnos en The Global Conversation. ¡Empecemos con una apuesta! Se acercan las elecciones al Parlamento Europeo y el futuro de la Unión Europea está en el centro de los debates. ¿Cuánto apostaría a que dentro de 15 años seguirá existiendo una Unión Europea?"
Yuval Noah Harari: "No lo sé. Como historiador lo que sí sé es que no se puede predecir el futuro de esas cosas. A menudo suceden las cosas más inesperadas. Eso es lo único seguro de la historia. Pocos meses antes de las revoluciones de 1989 en Europa del Este, nadie lo esperaba. 5 años antes parecía ciencia ficción. Sucede igual con el futuro de la Unión Europea: no se puede predecir. Espero que los votantes tomen las decisiones correctas y que mantengan la Unión Europea porque es esencial, no sólo para la paz de Europa, sino que la prosperidad de Europa es esencial para la paz y para la prosperidad del mundo entero."
Gábor Kiss: "En sus libros usted enfatiza que a los desafíos globales sólo se les puede hacer frente con cooperación, pero ahora mismo parece que la cooperación es difícil en todo el mundo. El nacionalismo se ha fortalecido en toda Europa. ¿Por qué cree que se ha popularizado y cuál debería ser la respuesta?"
Yuval Noah Harari: "La gente debería darse cuenta de que la humanidad ahora se enfrenta a tres amenazas existenciales que no se pueden resolver a nivel nacional, sino a nivel global. Estas amenazas son: la guerra nuclear, el cambio climático y la desorganización tecnológica, especialmente el auge de la Inteligencia Artificial y la bioingeniería. La Inteligencia Artificial y la biotecnología pueden destruir lo que significa el ser humano. La única forma de tratar este tema es la cooperación global. Si comenzamos una carrera armamentista en la Inteligencia Artificial o en la genética, esto garantiza la destrucción de la humanidad. Da igual quién gane esta carrera, la humanidad será la perdedora."
Gábor Kiss: "¿El pensamiento binario puede ser tan peligroso como el nacionalismo?"
Yuval Noah Harari: "El nacionalismo tiene un lado bueno y uno malo. El nacionalismo ha sido uno de los acontecimientos más positivos de la historia de la humanidad, pero también tiene un lado peligroso. El lado positivo del nacionalismo es que permite que millones de extranjeros se cuiden y cooperen entre ellos. El otro lado, el lado malo del nacionalismo, es el repruebo a los extranjeros. Creo que esta no es la esencia del nacionalismo. Parte de los problemas que vemos hoy en ciertas partes del mundo es que, en lugar de concentrarnos en amar a nuestros compatriotas, hay gente que se concentra en reprobar a los extranjeros. Hay personas que a menudo pueden ser corruptas, que se llevan el dinero del sistema sanitario, que realmente no promueven los intereses de sus conciudadanos. Pero luego se presentan como muy buenos patriotas. ¿Por qué? Porque odian a los extranjeros".
Gábor Kiss: "Mucha gente solo desea reforzar sus creencias y su opinión en lugar de leer noticias creíbles. ¿Cómo podemos volver al camino de la discusión racional cuando algunos líderes evitan dar respuestas significativas señalando a chivos expiatorios como George Soros, Fetullah Gulen o los liberales?"
Yuval Noah Harari: "No es un truco nuevo, siempre ha sido así. Lo que es nuevo es que ahora tenemos estas nuevas e inmensamente poderosas tecnologías para secuestrar y abusar de la atención humana. El problema al que nos enfrentamos ahora es que la tecnología está superando nuestras debilidades. Ahora hay poderosas técnicas que pueden identificar nuestras debilidades, lo que ya sientes, lo que ya odias...y captar nuestra atención presionando estos botones emocionales. Una de las razones por las que necesitamos regular estas peligrosas tecnologías es para evitar que los humanos sean hackeados, explotados…para que no se abuse de la atención humana."
Gábor Kiss: “¿No teme que las dictaduras 'orwellianas' hagan un mal uso de los datos?”
Yuval Noah Harari: "Tengo mucho miedo. Creo que ahora la tecnología permite crear regímenes mucho más totalitarios que cualquier otro que hayamos visto en la historia de la humanidad. Incluso más extremos de lo que George Orwell se imaginaba, porque Orwell imaginó una situación en la que hay un régimen totalitario que te vigila todo el tiempo, pero sólo en el mundo exterior: qué haces, adónde vas, a quién te encuentras, qué dices...Ahora no solo tenemos tecnologías para monitorear a la gente las 24 horas del día, a toda la población, sino que incluso se puede saber lo que está sucediendo dentro de sus cuerpos con sensores biométricos y con la combinación de la Inteligencia Artificial y la biotecnología. Ya existen escuelas en China, por ejemplo, donde los estudiantes llevan brazaletes biométricos. Dicen que los usan con fines educativos. El maestro sabe si te quedas dormido, si te aburres, si tienes dificultades... Pero esa misma tecnología se puede utilizar con fines políticos. Lo que vimos en el siglo XX con Stalin, Hitler o Mao no será nada comparado con este tipo de máquinas que ya han empezado a construirse."
Gábor Kiss: "¿A qué clase de peligros nos enfrentamos si existe una élite que incluso puede permitirse prolongar la vida y oprimir a las masas inútiles?"
Yuval Noah Harari: "Si no utilizamos correctamente las nuevas tecnologías, el resultado es el que usted describe. La biotecnología se utilizará para convertir a una pequeña élite en un estatus sobrehumano, donde la mayoría de la gente se queda muy atrás. Por primera vez en la historia, los ricos serán una especie diferente a los pobres. Es la mayor desigualdad de la historia. Desaparecerán muchos puestos de trabajo, pero surgirán otros nuevos. El problema realmente importante no será la ausencia absoluta de puestos de trabajo, el gran problema será la reconversión profesional de las personas. La gente tiene que cambiar de trabajo una y otra vez para seguir aprendiendo durante toda su vida. En la actualidad, el sistema educativo no nos prepara para eso."
Gábor Kiss: "Por último unas preguntas personales. Como ciudadano israelí, ¿cómo le influye en su pensamiento estar escuchando constantemente el ruido de los bombardeos y las sirenas?"
Yuval Noah Harari: "No lo escucho constantemente, sucede de vez en cuando. La situación en Gaza es realmente terrible para la gente que vive allí, pero en Israel la mayoría de las personas viven la mayor parte del tiempo una vida muy normal. Ciertamente influye en mi forma de pensar. Creo que soy mucho menos ingenuo respecto a muchos de estos acontecimientos. Si viviera en San Francisco, California, fácilmente podría tener una visión de tonalidad de rosa y pensar: 'oh sí, la tecnología es maravillosa, está haciendo muchas cosas maravillosas por la humanidad'. Si vives en Israel, te das cuenta de que la humanidad tiene muchos lados oscuros."
Gábor Kiss: "Cada año realiza un retiro para meditar, ¿cómo puede encontrar después el camino de vuelta a su vida cotidiana?"
Yuval Noah Harari: "Todo va muy deprisa: las tecnologías, la política...Ahora es más importante que nunca tomarse un tiempo libre, desconectar por completo para tener tiempo de conocerse a uno mismo, de reflexionar profundamente sobre estos temas. No tenemos tiempo para nada y tenemos que tomar las decisiones más importantes en la historia de la humanidad los próximos años. Ahora tenemos poderes divinos de creación y destrucción y son los humanos, no los dioses, los que tienen que decidir qué hacer con ellos. Una de mis preocupaciones cuando me reúno con estas personas importantes - recientemente me reuní con el director de Facebook, Mark Zuckerberg y con el canciller austriaco Sebastian Kurz - es que estos líderes no tienen tiempo. No tienen tiempo para sentarse, relajarse y pensar las cosas profundamente porque están todo el tiempo corriendo para resolver diferentes crisis."
es.euronews.com
Gábor Kiss, Euronews: "Señor Harari, gracias por acompañarnos en The Global Conversation. ¡Empecemos con una apuesta! Se acercan las elecciones al Parlamento Europeo y el futuro de la Unión Europea está en el centro de los debates. ¿Cuánto apostaría a que dentro de 15 años seguirá existiendo una Unión Europea?"
Yuval Noah Harari: "No lo sé. Como historiador lo que sí sé es que no se puede predecir el futuro de esas cosas. A menudo suceden las cosas más inesperadas. Eso es lo único seguro de la historia. Pocos meses antes de las revoluciones de 1989 en Europa del Este, nadie lo esperaba. 5 años antes parecía ciencia ficción. Sucede igual con el futuro de la Unión Europea: no se puede predecir. Espero que los votantes tomen las decisiones correctas y que mantengan la Unión Europea porque es esencial, no sólo para la paz de Europa, sino que la prosperidad de Europa es esencial para la paz y para la prosperidad del mundo entero."
Gábor Kiss: "En sus libros usted enfatiza que a los desafíos globales sólo se les puede hacer frente con cooperación, pero ahora mismo parece que la cooperación es difícil en todo el mundo. El nacionalismo se ha fortalecido en toda Europa. ¿Por qué cree que se ha popularizado y cuál debería ser la respuesta?"
Yuval Noah Harari: "La gente debería darse cuenta de que la humanidad ahora se enfrenta a tres amenazas existenciales que no se pueden resolver a nivel nacional, sino a nivel global. Estas amenazas son: la guerra nuclear, el cambio climático y la desorganización tecnológica, especialmente el auge de la Inteligencia Artificial y la bioingeniería. La Inteligencia Artificial y la biotecnología pueden destruir lo que significa el ser humano. La única forma de tratar este tema es la cooperación global. Si comenzamos una carrera armamentista en la Inteligencia Artificial o en la genética, esto garantiza la destrucción de la humanidad. Da igual quién gane esta carrera, la humanidad será la perdedora."
Gábor Kiss: "¿El pensamiento binario puede ser tan peligroso como el nacionalismo?"
Yuval Noah Harari: "El nacionalismo tiene un lado bueno y uno malo. El nacionalismo ha sido uno de los acontecimientos más positivos de la historia de la humanidad, pero también tiene un lado peligroso. El lado positivo del nacionalismo es que permite que millones de extranjeros se cuiden y cooperen entre ellos. El otro lado, el lado malo del nacionalismo, es el repruebo a los extranjeros. Creo que esta no es la esencia del nacionalismo. Parte de los problemas que vemos hoy en ciertas partes del mundo es que, en lugar de concentrarnos en amar a nuestros compatriotas, hay gente que se concentra en reprobar a los extranjeros. Hay personas que a menudo pueden ser corruptas, que se llevan el dinero del sistema sanitario, que realmente no promueven los intereses de sus conciudadanos. Pero luego se presentan como muy buenos patriotas. ¿Por qué? Porque odian a los extranjeros".
Gábor Kiss: "Mucha gente solo desea reforzar sus creencias y su opinión en lugar de leer noticias creíbles. ¿Cómo podemos volver al camino de la discusión racional cuando algunos líderes evitan dar respuestas significativas señalando a chivos expiatorios como George Soros, Fetullah Gulen o los liberales?"
Yuval Noah Harari: "No es un truco nuevo, siempre ha sido así. Lo que es nuevo es que ahora tenemos estas nuevas e inmensamente poderosas tecnologías para secuestrar y abusar de la atención humana. El problema al que nos enfrentamos ahora es que la tecnología está superando nuestras debilidades. Ahora hay poderosas técnicas que pueden identificar nuestras debilidades, lo que ya sientes, lo que ya odias...y captar nuestra atención presionando estos botones emocionales. Una de las razones por las que necesitamos regular estas peligrosas tecnologías es para evitar que los humanos sean hackeados, explotados…para que no se abuse de la atención humana."
Gábor Kiss: “¿No teme que las dictaduras 'orwellianas' hagan un mal uso de los datos?”
Yuval Noah Harari: "Tengo mucho miedo. Creo que ahora la tecnología permite crear regímenes mucho más totalitarios que cualquier otro que hayamos visto en la historia de la humanidad. Incluso más extremos de lo que George Orwell se imaginaba, porque Orwell imaginó una situación en la que hay un régimen totalitario que te vigila todo el tiempo, pero sólo en el mundo exterior: qué haces, adónde vas, a quién te encuentras, qué dices...Ahora no solo tenemos tecnologías para monitorear a la gente las 24 horas del día, a toda la población, sino que incluso se puede saber lo que está sucediendo dentro de sus cuerpos con sensores biométricos y con la combinación de la Inteligencia Artificial y la biotecnología. Ya existen escuelas en China, por ejemplo, donde los estudiantes llevan brazaletes biométricos. Dicen que los usan con fines educativos. El maestro sabe si te quedas dormido, si te aburres, si tienes dificultades... Pero esa misma tecnología se puede utilizar con fines políticos. Lo que vimos en el siglo XX con Stalin, Hitler o Mao no será nada comparado con este tipo de máquinas que ya han empezado a construirse."
Gábor Kiss: "¿A qué clase de peligros nos enfrentamos si existe una élite que incluso puede permitirse prolongar la vida y oprimir a las masas inútiles?"
Yuval Noah Harari: "Si no utilizamos correctamente las nuevas tecnologías, el resultado es el que usted describe. La biotecnología se utilizará para convertir a una pequeña élite en un estatus sobrehumano, donde la mayoría de la gente se queda muy atrás. Por primera vez en la historia, los ricos serán una especie diferente a los pobres. Es la mayor desigualdad de la historia. Desaparecerán muchos puestos de trabajo, pero surgirán otros nuevos. El problema realmente importante no será la ausencia absoluta de puestos de trabajo, el gran problema será la reconversión profesional de las personas. La gente tiene que cambiar de trabajo una y otra vez para seguir aprendiendo durante toda su vida. En la actualidad, el sistema educativo no nos prepara para eso."
Gábor Kiss: "Por último unas preguntas personales. Como ciudadano israelí, ¿cómo le influye en su pensamiento estar escuchando constantemente el ruido de los bombardeos y las sirenas?"
Yuval Noah Harari: "No lo escucho constantemente, sucede de vez en cuando. La situación en Gaza es realmente terrible para la gente que vive allí, pero en Israel la mayoría de las personas viven la mayor parte del tiempo una vida muy normal. Ciertamente influye en mi forma de pensar. Creo que soy mucho menos ingenuo respecto a muchos de estos acontecimientos. Si viviera en San Francisco, California, fácilmente podría tener una visión de tonalidad de rosa y pensar: 'oh sí, la tecnología es maravillosa, está haciendo muchas cosas maravillosas por la humanidad'. Si vives en Israel, te das cuenta de que la humanidad tiene muchos lados oscuros."
Gábor Kiss: "Cada año realiza un retiro para meditar, ¿cómo puede encontrar después el camino de vuelta a su vida cotidiana?"
Yuval Noah Harari: "Todo va muy deprisa: las tecnologías, la política...Ahora es más importante que nunca tomarse un tiempo libre, desconectar por completo para tener tiempo de conocerse a uno mismo, de reflexionar profundamente sobre estos temas. No tenemos tiempo para nada y tenemos que tomar las decisiones más importantes en la historia de la humanidad los próximos años. Ahora tenemos poderes divinos de creación y destrucción y son los humanos, no los dioses, los que tienen que decidir qué hacer con ellos. Una de mis preocupaciones cuando me reúno con estas personas importantes - recientemente me reuní con el director de Facebook, Mark Zuckerberg y con el canciller austriaco Sebastian Kurz - es que estos líderes no tienen tiempo. No tienen tiempo para sentarse, relajarse y pensar las cosas profundamente porque están todo el tiempo corriendo para resolver diferentes crisis."
Harari: "Por primera vez en la historia, los ricos serán una especie diferente a los pobres"
Entrevistamos al historiador israelí Yuval Noah Harari, profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalén y autor de éxitos internacionales. #Globalconversation
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