¿Insinuas que el declinar la asistencia a la cena de Navidad de la empresa no tuvo repercusiones graves en mi caso por ser mujer? No metí ninguna puya ni metí el pie en el trabajo de nadie; no soy de ésas (ojalá lo hubiera sido; en el mundo laboral sólo los y las HDLGP triunfan). Me limité a decir que no iba a la cena. Ni más ni menos. Se puede y se debe hacer.
Yo prefiero trabajar con hombres pero no por lo que dices, si no porque no hay dramas, susceptibilidades, tonterías ni colectas para regalos de cumpleaños/natalicios/jubilaciones de compañeros de trabajo.
No lo niego. El mundo laboral en general es una selva llena de HDLGP. Un entorno hostil y antinatural que ni dignifica ni eleva el espíritu. Si un entorno laboral es nocivo, un entorno laboral exclusiva o mayoritariamente femenino es el infierno.
Te libraste porque eres tío. Las mujeres son implacables con otras mujeres y actúan como una sola cuando quieren destruir a otra mujer, especialmente cuando esa mujer no sigue la corriente mayoritaria, como es mi caso. Las mujeres pueden tolerar que un hombre sea disidente, vaya contracorriente o quiera ir a su aire y no participar de sus rituales y toxicidades, pero cuando se trata de otra mujer son implacables.
