Gorroto
Madmaxista
Pierre Boulle, el autor de la novela en la que se basa la película, tiene otra novela muy diferente que también fue un gran éxito cuando fue llevada al cine. Nada menos que:
El Planeta de los personajes. 1968.
No he leído la novela del río Kwai, por cierto, pero la novela de los personajes describe un planeta muy diferente. De hecho, al contrario que en la peli, los astronautas terrestres no están en la Tierra y de la trama, en geenral, sólo se respetan los nombres... de los personajes.
Y, curiosamente, las dos historias tienen algo en común. Tratan casos de "mundos al revés", de inversiones completas de sistemas de valores. Monos dominando a hombres. Las fuerzas coloniales del Imperio Británico subyugadas por los asiáticos. En el contexto de los años 1940 la separación entre monos y hombres no le parecía a mucha gente muy superior a la existente entre blancos y amarillos.
Y es ésta inversión de valores lo que permite hacer un análisis-parodia del colonialismo europeo, especialmente del británico. Esos imperios no pudieron erigirse sin la colaboración de amplias capas de los pueblos dominados. Pero eso no convertía necesariamente a los colaboracionistas en traidores. Muchos, incluso, se consideraban patriotas.
Simplemente, mucha gente colaboraba con los invasores porque ésa era la única manera de asegurar un orden y una cierta calidad de vida para sus pueblos y porque, en general, querían que las cosas se hicieran bien. Que es la misma paradoja jovenlandesal a la que se enfrenta el coronel Nicholson, interpretado por Alec Guinnes, paradoja que se apodera de él y le hace franquear todos los límites.
Excelente post.