NO ME LO RECUERDES; me invitaron a ir a ASPEN en un jet privado desde Paris y tuve que decir que NO porque era en diciembre del 2001 y me pedian visado
pedian visado en le jets, era una mujer que se lo ganó a su ex marido y me invitaba ni amigo HETERO rico alubio* rubio natural new yorker, siempre son hetero
Andá! Aspen!! Supongo que no haber podido ir a Colorado te habrá estropeado un poco la vida, lo siento.
En 1994 yo andaba por Providence, era chófer de limusinas y compartía casa con Harry, otro chófer que por cierto, tenía un par de sobrinas gemelas muy graciosas. Harry tras*portaba perros en una furgoneta con buena publicidad.
Cuento lo de los trabajos para que se sepa que se nos daba bien conducir.
Un día tras dejar a una clienta llamada Lauren en el aeropuerto, me di cuen de que se había olvidado una maleta en el Lincoln. Era más como un maletín de documentos, el típico que llevan los locos lleno de revistas para parecer banqueros.
Para cuando me di cuenta ya la había perdido de vista, pero recordé la conversación que tuvimos mientras conducía. Se iba a su casa en Aspen, CO. No sabía mucho más, salvo que parecía una modelo y que se apellidaba Samsonite según la etiqueta de su maleta.
Total que convencí a Harry para ir a devolvérsela en su furgo con forma de perro. Había que cruzar medio país y en esa época no conocíamos Waze.
En una parada se nos juntó un tipo grande, Mike Star se hacía llamar el notas. Total que le echamos tabasco y salsa picante del Mercadona en el bocata para hacerle la típica broma.
Pues resulta que el tipo tenía problemas de miocarpio y con todo ese picante empezó a darle un jamacuco, le salía fuego del sobaco... Los cuatrocientos golpes padeció el personaje en el suelo mientras sudaba todo rojo. Mientras nosotros descojonandonos y sin enterarnos de que estaba pidiendo socorro, y su pastilla de nitro para sobrevivir, pero siguiendo con la broma le dimos petazetas y pepsi. Al final se murió, o eso recuerdo... no sé. La cosa es que me dió igual, pues más tarde me enteré de que era un mafioso, un mena que solo quería robar el maletín.
El viaje fue duro (eso dijo ella) y los fondos se fueron gastando al igual que las fuerzas, al final uno se Kansa ya. Hasta que derrepén, en Kansas, muy cerca de la muga con Colorado, nos quedamos sin gasoil en la fragoperro. Enfadaos, nos fuimos cada uno por nuestro lao, pero por poco tiempo.
Al cruzarme con un crío en mobilette en la carretera, lo paré. No era una G.A.C. Campera sino una Honda DAX 72cc, una amotillo que algunos tildan erróneamente de ridícula, pero no es así. Fue diseñada en 1969 por Hayaon Miyazaki, con el cometido de ser una moto tan ligera, que pudiera subirse a pulso a un pequeño yate, y disponer de ella para desplazarse más rápido y descansado por los puertos marítimos deportivos.
En fín, convencí al chaval, Kikujiro, que era tan japo como la Honda, de que nos diera la minimoto a cambio de la fregoneta. Cuando Harry me vio llegar petardeando 2T en aquella momkeybike, me miró seriamente al globo ocular y me dijo:
cuando creía que ya no podías ser más petulante, vas, y haces esto. Y me dió un abrazo o chocamos los cinco, algo así. Fue un trueque sin fisuras pues la Honda nos permitió llegar a Aspen con las 500 pesetas que nos quedaban, esas motos gastan como un merchero.
Por acabar ya, le dimos el maletín, se me quedó la lengua pegada a un hierro por el hielo, la canción de The Primitives - The 95' Mix fue todo un descubrimiento y temazo para la época, me tiré un pedo con un jersey de cuello alto y le metí fuego con el Bic al salir... y poco más que contar. Ya me perdonaréis, pero no recuerdo cómo acaba.