Obviamente él tiene que estar de acuerdo pero siendo tan bocas no creo que ahora se vaya a rajar o venir con gaiadas. Por eso he preferido hacerlo público para que la presión social no le haga recular pues sabida es la maldad y falta de huevones de estos argentinos sin raza que viven de reprobar a los superiores, a los fuertes. En cierta medida es una expresión del chandalismo más patético y da repelúsnte que como no puede elevarse intenta destruir aquello que sí lo está. No por nada el pelotudo este es pro-sioniosmo.
Ya que el post es serio, explica el término chandalismo, que la gente que nunca ha leído Nietzsche se van a pensar que es ir vestido con el chándal yonki de los 80.