Técnicamente todo puede durar muchos años, pero luego las cosas se averían. El calor castiga mucho los paneles. Y luego está el inversor, un aparato que es pura electrónica y que cualquier fallo supone cambiarlo entero, algo que terminará por suceder sobre todo si está sometido a altas temperaturas (muchas veces los ponen a pleno sol, o debajo del propio panel), o de que inestabilidades de tensión en la red te lo dejen frito. Y luego está el dónde te los instalen, que lo de taladrar el tejado para fijar una estructura suena muy bien hasta que llegan las goteras.
A mi esto de los paneles me parece una forma de complicarse mucho la vida para ahorrarte el chocolate del loro a diez años vista.
Y eso no quita que me parece razonable instalar parques solares, donde tienes a gente manteniendo esa infraestructura y proporcionando electricidad a un coste razonable. Pero lo de hacerlo en plan doméstico me parece tercermundista.
Y ya veremos cómo soporta la red miles de chismes chinos de bajo coste inyectando energía, que todos funcionan muy bien hasta que empiezan a fallar, meter armónicos, etc.