Alemania tiene, o al menos tenía, un capital humano espectacular y sus aportaciones a la ciencia y la cultura de la humanidad, son innumerables.
Los descendientes de alemanes son el grupo cultural mayoritario en USA. Fueron ellos, junto con la inmi gración nórdica (que también fue masiva) e irlandesa, junto con los principios culturales, económicos y sociales heredados de los ingleses, los que hicieron de USA la superpotencia que domina el mundo.
Desgraciadamente para todos, la ****ría se encargó de borrar su influencia en USA del mapa; se llegó a prohibir enseñar alemán en la escuela y hoy día su ascendencia e influencia, sobre todo rural, se ridiculiza a través de series y películas.
Se podría decir que a Alemania la dan el pasaporte espiritualmente a través de dos guerras mundiales. Lo irónico de USA es que su ascensión como superpotencia ha ido acompañada de la desaparición de todos los valores y principios que la hicieron grande. Tras la caída de la URSS, y en el culmen de su poder, USA no es más que una ruina social y jovenlandesal. Un engendro que lleva décadas torturando y retorciendo al mundo.
En general, Europa fue la que dió al mundo todo lo bueno que se disfruta en él, ya fuera a través de la tecnología, de la cultura o de la filosofía. Hoy día ese mundo se cae a pedazos. El llamado marxismo cultural, y sus amos económicos, tienen al mundo occidental en un proceso de autodestrucción racial, social, económico y cultural.
Como romanos ante el fin de su imperio, asistimos al final de una forma de entender la existencia. Lo que vendrá detrás no lo podemos saber. Parece que el poder en el mundo bascula hacia Asia. Dudo mucho que los asiáticos, más crueles e individualistas per se, vayan a crear un mundo mejor al próspero y excepcional que se vivió tras las dos guerras mundiales y hasta el fin de la Guerra Fría.
Dentro de 1.000 años, ninguna de las estructuras políticas actuales habrá sobrevivido. ¿Qué quedará de cada una de las culturas que las conformaron? ¿Cómo será ese mundo? Imposible siquiera imaginarlo.