Hay alguien que los roba, pero no tiene que ser necesariamente el orate que ha montado la casa del pacoterror.
A finales del siglo pasado vi comprar una calavera, o más bien encargarla, por 12 gramos de hachís. Y después cocerla en lejía para quitarle los restos que hubieran por ahí y blanquearla.
Así que me imagino que un poco más de presupuesto cualquiera pude comprar lo que quiera si tiene al contacto indicado.