1873: el gobierno español vende a un consorcio extranjero las minas de Río Tinto

EL CURIOSO IMPERTINENTE

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El 14 de febrero de aquel año, a los pocos días de proclamarse la I República, en de las primeras decisiones tomadas por el gobierno de Estanislao Figueras se firmó la venta de las minas por un importe de noventa y cuatro millones de pesetas a un consorcio del que el Deutsche National Bank de Bremen era socio mayoritario y que estaba presidido por el escocés Hugh Matheson, vástago de una familia que hizo su fortuna traficando con opio en China.

El consorcio constituyó el 29 de marzo de 1873 la Rio Tinto Company Limited, que hacia 1884 pasaría al control de la familia Rothschild. En Río Tinto los ingleses implantaron un sistema propio de una colonia del sur muy sur. Fieles a sus inveteradas costumbres fundaron núcleos residenciales amurallados y evitaron en lo posible mezclarse con la población nativa. La compañía vivió una auténtica edad de oro desde el último cuarto del siglo XIX hasta 1914, siendo durante muchos años sus minas el mayor centro de extracción de cobre del mundo.

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Hugh Matheson

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Estanislao Figueras y jovenlandesagas, primer Presidente de la República Española. A los dos días de acceder al cargo dio el visto bueno a la ruinosa tras*acción. Figueras dimitió en junio de 1873, dejando España sumida en la anarquía y la guerra civil y cogió el primer tren en dirección París, sin despedirse de nadie.


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Una de las grandes aportaciones "culturales" de los colonos ingleses fue la fundación del primer club de balompié de España: el Recreativo de Huelva.

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La gran escritora Concha Espina se interesó por el tema. Visitó Río Tinto en 1917 para conocer de primera mano la situación. Aquello sirvió de inspiración para su libro 'El metal de los muertos'.

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La obra de Concha Espina, olvidada en Huelva

En los años cincuenta el gobierno español, después de muchos años de lucha, consiguió recuperar la minas, creándose la Compañía Española de las Minas de Río Tinto.
 
Última edición:
Estos son los liberales progres que tanto luchaban contra el Carlismo
 
El gobierno no tenia ni la capacidad economica ni productiva para poner las minas a funcionar para que diesen beneficio.

A lo mejor si hubiesen invertido en minas en vez de en ferrocarriles estupidos les hubiese ido mejor. Vamos, como ahora, solo que en vez de Minas seria industria en general y en vez de tren chuchus el AVE.
 
El 14 de febrero de aquel año, a los pocos días de proclamarse la I República, en de las primeras decisiones tomadas por el gobierno de Estanislao Figueras se firmó la venta de las minas por un importe de noventa y cuatro millones de pesetas a un consorcio del que el Deutsche National Bank de Bremen era socio mayoritario y que estaba presidido por el escocés Hugh Matheson, vástago de una familia que hizo su fortuna traficando con opio en China.

El consorcio constituyó el 29 de marzo de 1873 la Rio Tinto Company Limited, que hacia 1884 pasaría al control de la familia Rothschild. En Río Tinto los ingleses implantaron en la zona un sistema propio de una colonia del sur muy sur. Fieles a sus inveteradas costumbres fundaron núcleos residenciales amurallados, evitando en lo posible mezclarse con la población nativa. La compañía vivió una auténtica edad de oro desde el último cuarto del siglo XIX hasta 1914, siendo durante muchos años sus minas el mayor centro de extracción de cobre del mundo.

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Hugh Matheson

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Estanislao Figueras y jovenlandesagas, primer Presidente de la República Española. A los dos días de acceder al cargo dio el visto bueno a la ruinosa tras*acción. Figueras dimitió en junio de 1873, dejando España sumida en la anarquía y la guerra civil y cogió el primer tren en dirección París, sin despedirse de nadie.


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Una de las grandes aportaciones "culturales" de los colonos ingleses fue la fundación del primer club de balompié de España: el Recreativo de Huelva.

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La gran escritora Concha Espina se interesó por el tema. Visitó Río Tinto en 1917 para conocer de primera mano la situación. Aquello sirvió de inspiración para su libro 'El metal de los muertos'.

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La obra de Concha Espina, olvidada en Huelva

En los años cincuenta el gobierno español, después de muchos años de lucha, consiguió recuperar la minas, creándose la Compañía Española de las Minas de Río Tinto.


Bueno , al final Franco recuperó la explotación . ¿ Quien os lo diría, eh, gente de izquierdas ?
 
Una privatización muy perjudicial para España en el S. XIX. La venta a empresas extranjeras de empresas públicas que pueden ser rentables conlleva que los beneficios de las mismas se van al extranjero. El precio de la venta se gasta pronto.
 
El siglo XIX fue catastrófico para España, los liberales estaban a sueldo de Francia y de Inglaterra. La logia les daba las directrices a seguir. Y encima el régimen actual les rinde honores, que trágico que Progrespaña rinda honores a sus verdugos.
Con las minas de Asdrúbal en Ciudad Real ocurrió algo similar.
 
El gobierno no tenia ni la capacidad economica ni productiva para poner las minas a funcionar para que diesen beneficio.

A lo mejor si hubiesen invertido en minas en vez de en ferrocarriles estupidos les hubiese ido mejor. Vamos, como ahora, solo que en vez de Minas seria industria en general y en vez de tren chuchus el AVE.

Claro, claro. Los ferrocarriles no servían para nada. Mejor nos habría ido si se hubiera seguido con el tras*porte pasajeros y mercancías a lomos de burros, mientras en toda Europa se construían líneas férreas a mansalva.

¡Señor, llévame pronto!
 
Estos son los liberales progres que tanto luchaban contra el Carlismo
Nobles burgueses, preparando el saqueo de España.

---------- Post added 08-dic-2016 at 21:16 ----------

El siglo XIX fue catastrófico para España, los liberales estaban a sueldo de Francia y de Inglaterra. La logia les daba las directrices a seguir. Y encima el régimen actual les rinde honores, que trágico que Progrespaña rinda honores a sus verdugos.
Con las minas de Asdrúbal en Ciudad Real ocurrió algo similar.

La destrucción del Imperio a manos de las logias.
 
Un artículo sobre el barrio inglés de Bella Vista. En él los colonos ingleses vivían como rajás, mientras la población de Río Tinto estaba en la miseria.

El Barrio Inglés de Bella Vista, (Riotinto, HUELVA) » Mis viajes por ahí

Los yacimientos de Riotinto eran propiedad del Estado hasta que en 1873 vinieron los británicos a comprarlas por 92 millones de pesetas. Fundaron la Rio Tinto Company Limited que desarrolló un gran avance industrial y económico en la zona. Tanto es así que la población llegó a alcanzar los 20.000 habitantes y había que crear zonas habitables para los mineros que venían de toda la península y cómo no, para los británicos que no veían la necesidad de integrarse en el terreno sino que preferían trasladar su Inglaterra victoriana a la cuenca de Riotinto.
Así en pocos años surgió una comunidad británica que se encontraba aislada con un muro de piedra con entradas que a su vez tenía guardias. Éstos no dejaban entrar a nadie que pudiera perturbar su reducto de lujo y exclusividad. Mantenían sus tradiciones de espaldas al pueblo nativo del que se distanciaría poco a poco comenzando por la infancia de los hijos que tenían los colonos, pues en Bella Vista los niños gozaban de una educación que no existía aún en España. En sus casas contaban con personal como ama de llaves, camareros, cocineros y un mobiliario de estilo victoriano. Hoy en día el barrio se conserva tal cual fue, con una arquitectura que llama la atención pues, ¿qué sentido tenía construir tejados apuntados si nunca nieva en Huelva?


---------- Post added 08-dic-2016 at 22:48 ----------

El siglo XIX fue catastrófico para España, los liberales estaban a sueldo de Francia y de Inglaterra. La logia les daba las directrices a seguir. Y encima el régimen actual les rinde honores, que trágico que Progrespaña rinda honores a sus verdugos.
Con las minas de Asdrúbal en Ciudad Real ocurrió algo similar.

El asunto de las minas de Almadén también tiene su miga, aunque en ese caso no se malvendieron sino que se arrendaron (a los Rothschild, naturalmente), con lo que una parte de los beneficios revertieron al Estado.

Las Minas de Almaden


La misma situación originada tras el arriendo en los criaderos de Almadén a los Fugger por Carlos I volvió a repetirse desde mediados del siglo XIX cuando la deuda exterior contraida por la hacienda nacional condujo a solicitar créditos y a firmar contratos con la banca Rothschild, familia de origen judío asentada en Alemania. Ésta arrendó las minas, de forma más o menos encubierta, de 1835 a 1857 e inició la venta directa del metal en el mercado londinense y en los de Sevilla y Cádiz.



En 1870 la familia Rothschild consiguió una exclusiva de venta por treinta años y se convirtió en propietaria de las minas de Nuevo Almadén, recién descubiertas, y de las Idria (Italia), pasando a controlar el monopolio mundial del mercurio. Los años 1870 a 1900 fueron los de mayor producción con unos beneficios de 240 millones de pesetas, de los cuales el Estado recibió 110 millones (45,90%) y los Rothschild 129,7 millones (54,10%), distribución que explica las numerosas criticas que suscitó esta operación.

El grupo alemán continuó con la explotación aunque en condiciones menos onerosas, hasta 1921 año en que fueron definitivamente recuperadas por Hacienda, de quien depende el Consejo de Administración de las Minas de Almadén y Arrayanes, que controla actualmente su comercio interior y exterior.
 
Y de ahí salió "El año de los tiros" en 1888... aquí lo narran:

El Año de los Tiros, una noticia de alcance nacional

Mucho se ha escrito sobre esta huelga –desde escritores como Concha Espina, David Avery y Juan Cobos Wilkins hasta investigadores de la talla de María Dolores Ferrero, Juan Manuel Pérez López, Manuel Domínguez Cornejo y Antonio Domínguez Pérez de León, pasando por periodistas como Rafael Moreno y Juan Carlos León Brázquez o cineastas como Antonio Cuadri, entre otros muchos. Sin embargo, la importancia de este aniversario bien merece un recordatorio de esta huelga que situó el nombre de Riotinto en la prensa nacional e internacional, trascendiendo con creces las páginas de los periódicos de Huelva.
[Img #26707]
El origen de esta protesta estuvo en las teleras de calcinación al aire libre –conocidas popularmente como ‘los humos’-, una forma de fundición del mineral que provocaba emanaciones sulfurosas a la atmósfera. Aunque en las primeras décadas las consecuencias de las teleras no se habían dejado notar, con el incremento de la cantidad de cobre calcinado a partir de 1880, la situación se hizo insostenible. Porque, a finales del XIX, los humos podían durar entre seis y doce meses.

Cerca de veinte municipios del entorno de la mina se veían directamente afectados por estas emanaciones que eran muy perjudiciales para la salud, para el medio ambiente y que provocaba la ruina de las tierras del entorno al contaminar el agua, sin olvidar la pérdida de jornales en el campo [1]. Por este motivo, son muchas las voces que aseguran que la manifestación del 4 de febrero de 1888 puede considerarse como la primera protesta de carácter ecologista registrada, no sólo en Huelva, sino también en gran parte del país.

[Img #26708]
Teleras a finales del XIX en la Cuenca Minera.
De hecho, la protesta no sólo estuvo abanderaba por sindicalistas obreros como Maximiliano Tornet [2], sino también por representantes de la llamada Liga Antihumista, liderada por José María Ordoñez Rincón (Higuera de la Sierra, 1856 – 1906), cuyas tierras se estaban viendo seriamente afectadas por las calcinaciones. Es más, su cruzada contra la Riotinto Company Limited, S. A. era algo personal, ya que entre las parcelas más perjudicadas se encontraban las de su suegro, José Lorenzo Serrano, a su vez alcalde de Zalamea [3].

La huelga del Año de los Tiros comenzó el 1 de febrero y culminó el día 4 con una marcha que partió desde el mismo Zalamea con la participación de unas 12.000 personas, entre obreros, agricultores, mujeres y niños procedentes de toda la comarca. La manifestación llegó hasta la Plaza de la Constitución de Riotinto, ante el Ayuntamiento, donde se entregaron una serie de reivindicaciones, que iban desde la prohibición de las calcinaciones hasta mejoras en las condiciones laborales de los mineros. El terrible desenlace se produjo cuando se escucharon unos disparos del Ejército Regular de Pavía contra las personas allí congregadas:

[Img #26710]
El Ejército y la Guardia Civil vigilaban a los manifestantes. De pronto, sin que se dieran los toques de atención, hubo tres descargas, seguida de otra de bayoneta calada. La cifra oficial de muertos fue de 13, aunque la prensa habló de 48 y de más de 100 heridos [4].

El acontecimiento tuvo una enorme repercusión en la prensa. Y no sólo de ámbito local, sino también nacional e internacional. A favor de la Riotinto Company se postuló principalmente el diario La Provincia, que se caracterizó por ser proclive a los intereses de la empresa, además de portavoz de las clases productivas de Huelva [5]. El periódico onubense llegó a afirmar incluso que las contaminantes calcinaciones mineras eran de utilidad pública, pues gracias a los humos había descendido la mortalidad.

[Img #26711]
Para contrarrestar la influencia de la todopoderosa Compañía minera y la corriente de opinión de La Provincia surgieron otras cabeceras en contra de la entidad, muchas de los cuales contaban con tirada nacional y regional. Fue el caso de El Cronista (1885) de Sevilla, “defensor permanente del Partido Reformista” [6]. La oposición de esta publicación a la empresa se incrementó en 1887, cuando crea las secciones 'Los Humos de Huelva' y 'Cartas Tintas', firmadas por su corresponsal en Huelva y director del periódico, Baldomero de Lorenzo y Leal. Del mismo modo, desde Madrid también se mostró en contra de los postulados de la Riotinto Company el periódico El Socialista, que el 10 de febrero de 1888 publicó una columna titulada ‘¡Asesinos!’, en la que tachaba la actuación del ejército en Riotinto de “horrible crimen” y “bárbara carnicería”.

En cualquier caso, la noticia no dejó a ningún medio de comunicación de la época indiferente, llegando a copar espacios en la prensa internacional. Un acontecimiento que por su trascendencia aún continúa en la memoria de la Cuenca Minera de Huelva, donde aún se habla del ‘Año de los Tiros’.


Menudos me gusta la fruta los ingleses y los políticos ladrones que venden su país por cuatro cortesanas.
 
Desgraciadamente poco de puede decir en contra de los ingleses, salvo morirse de envidia. Ellos tenían el capital y la tecnología para sacar rendimiento de unas minas que dejadas en nuestras manos ni serían rentables ni servirían para repartir sus beneficios entre la población. En manos españolas sólo hubieran servido, en el mejor de los casos, para enriquecer a cuatro caciques, que también levantarían sus propios muros para aislarse de los pobres.

Los anglos, serán lo que queráis, pero a la hora de hacer dinero son los jefes del cotarro. Los explotaron a lo grande, crearon puestos de trabajo y como es lógico, se construyeron su propio paraíso con unas condiciones de vida inalcanzables para los pobres españoles. No tienen la culpa de querer vivir mejor que el resto si los dueños de los recursos no saben hacerlo. No van a invertir millonadas para que el beneficio se lo lleven unos indígenas que no han sabido o no han podido sacar provecho de un tesoro como Río Tinto.

Hay que quitarse el sombrero y reconocerlo. Porque es así. Pagaron una millonada, invirtieron otra y se dotaron del mejor nivel de vida que podían permitirse. Una cosa es tener los recursos y otra muy distinta poder explotarlos. Y si yo se hacerlo y he invertido una millonada en comprar los derechos y la tecnología para hacerlo de forma rentable, no se lo voy a regalar a los paisanos. Para perder dinero me quedo en mi casa y que lo saquen con las manos y lo lleven en burro hasta la frontera.

Ojalá España fuera un país distinto, más civilizado, más justo, con mejores patronos, mejores políticos y jorobar, hay que decirlo también, mejores ciudadanos. Pero no lo somos. Los hay un poco más serios y responsables, no mucho más, que ni los alemanes ni los nórdicos son seres de luz, pero si lo suficientemente distintos como para sacar ventaja. Una ventaja decisiva que da lugar a cosas como las que abre este hilo.
 
Desgraciadamente poco de puede decir en contra de los ingleses, salvo morirse de envidia. Ellos tenían el capital y la tecnología para sacar rendimiento de unas minas que dejadas en nuestras manos ni serían rentables ni servirían para repartir sus beneficios entre la población. En manos españolas sólo hubieran servido, en el mejor de los casos, para enriquecer a cuatro caciques, que también levantarían sus propios muros para aislarse de los pobres.

Los anglos, serán lo que queráis, pero a la hora de hacer dinero son los jefes del cotarro. Los explotaron a lo grande, crearon puestos de trabajo y como es lógico, se construyeron su propio paraíso con unas condiciones de vida inalcanzables para los pobres españoles. No tienen la culpa de querer vivir mejor que el resto si los dueños de los recursos no saben hacerlo. No van a invertir millonadas para que el beneficio se lo lleven unos indígenas que no han sabido o no han podido sacar provecho de un tesoro como Río Tinto.

Hay que quitarse el sombrero y reconocerlo. Porque es así. Pagaron una millonada, invirtieron otra y se dotaron del mejor nivel de vida que podían permitirse. Una cosa es tener los recursos y otra muy distinta poder explotarlos. Y si yo se hacerlo y he invertido una millonada en comprar los derechos y la tecnología para hacerlo de forma rentable, no se lo voy a regalar a los paisanos. Para perder dinero me quedo en mi casa y que lo saquen con las manos y lo lleven en burro hasta la frontera.

Ojalá España fuera un país distinto, más civilizado, más justo, con mejores patronos, mejores políticos y jorobar, hay que decirlo también, mejores ciudadanos. Pero no lo somos. Los hay un poco más serios y responsables, no mucho más, que ni los alemanes ni los nórdicos son seres de luz, pero si lo suficientemente distintos como para sacar ventaja. Una ventaja decisiva que da lugar a cosas como las que abre este hilo.
Lo de esquilmar otras tierras y someter a sus habitantes es daño colateral, ¿no?
 
Pobre España.

De ser potencia mundial durante casi tres centurias, a ser colonia minera de los perros británicos.

Malditos borbones, malditas élites vendidas y cortoplacistas.
 
Este es un ejemplo de como "colonizan" estos señores, los remordimientos de conciencia los debemos de tener nosotros por llevarnos el oro y la plata de America, ellos ninguno por hacer lo mismo multiplicado por cien a lo ancho del globo.

¿Entonces donde queda la soberanía de las naciones?; ¿Esta se puede comprar?; ¿Los recursos de una nación, la riqueza de las naciones, no debería de ser algo soberano?. Esos puestos de trabajo y esos millones de pesetas són migajas, són una estafa. Lo de la superioridad jovenlandesal y tecnológica para limpiarse el ojo ciego, aquí tambien teníamos burguesia y aristocracia que vivía igual o mejor que la inglesa, extrapolar a toda la sociedad británica por como vivian esos que vinieron es, además de cateto, una chorrada enorme.

Son unos cínicos, materialistas de cosa. No solo vienen a robar, además nos restriegan por la cara su supuesta superioridad racial. Si en Huelva había miseria en el siglo XIX tambien la había en zonas de Inglaterra y hasta en su misma capital, con barrios de cosa llenos de ralea perversos y suburbios que parecian cloacas. Recordemos que la Inglaterra victoriana dominaba el planeta por entonces y era una máquina de depredación de recursos, a la "compra" de naciones se ofrecía la alternativa de los cañones o las revoluciones salidas de la nada, esta era la politica de Londres. Primeros ministros asesinados, atentados a reyes, revoluciones raras, desestabilización, y siempre con Albion como directora, en todo el esplendor del Imperio Británico...

Por cierto, este año que entra tenemos el 300 aniversario de la formación de la grán logia de Londres.
 
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