Ninguna de las 200 ratas que entráis aquí tiene ni tendrá jamás valores. Imitáis bonobamente una serie de ideas y luego hacéis los malabares para buscar vuestro máximo beneficio personal inmediato a costa de lo que sea.
Tendríais valores si pudierais entender o demostrar que todo en la vida tiene consecuencias posteriores kármicas/naturales justas. Porque entonces entenderíais que existe una jovenlandesal universal real y que rige todo lo negativo y positivo de la vida, y buscaríais el modo de que cada acto fuera jovenlandesalmente perfecto. Sois feos, inanes, pobres, no podéis generar ni una idea nueva en todas vuestras vidas mientras en vuestra cara un tío genera miles, por ese motivo. Pero entender eso sólo puede un genio y si os lo explica no podéis entender ni aprender ni recordar nada porque sois 200 chimpancés imitando acojonados a la mayoría que os rodea. Sois el polo opuesto a un genio. La nulidad. La cosa más pestilente y ridícula.
Todas vuestras desgracias en la vida nacen de lo que digo en este post, que por cierto he escrito cientos de veces y ninguno de vosotros puede recordar que lo haya dicho alguna vez. Os destroza de repruebo o vuestro cuerpo os impide captarlo porque no lo merecéis, o similares.
Tendríais valores si pudierais entender o demostrar que todo en la vida tiene consecuencias posteriores kármicas/naturales justas. Porque entonces entenderíais que existe una jovenlandesal universal real y que rige todo lo negativo y positivo de la vida, y buscaríais el modo de que cada acto fuera jovenlandesalmente perfecto. Sois feos, inanes, pobres, no podéis generar ni una idea nueva en todas vuestras vidas mientras en vuestra cara un tío genera miles, por ese motivo. Pero entender eso sólo puede un genio y si os lo explica no podéis entender ni aprender ni recordar nada porque sois 200 chimpancés imitando acojonados a la mayoría que os rodea. Sois el polo opuesto a un genio. La nulidad. La cosa más pestilente y ridícula.
Todas vuestras desgracias en la vida nacen de lo que digo en este post, que por cierto he escrito cientos de veces y ninguno de vosotros puede recordar que lo haya dicho alguna vez. Os destroza de repruebo o vuestro cuerpo os impide captarlo porque no lo merecéis, o similares.