Tiraera liberal anglófila contra el hispanismo de marcelo gullo. la falacia del falso punto medio (y un tal donzé)

Por prisión mental o por defender intereses no siempre asumidos ni explicados para que no quepa duda sobre lo que defienden algunas opiniones que parecen equidistantes, es que esto de la Hispanidad se encuentra con tantas paredes hasta parecer para todos ellos la carpa de un circo de mala fin. Piensan las cosas desde un sistema de coordenadas con el 0,0 en el centro y sus cuadrantes alrededor. Cuando pareciera que dicen distinto según su propio cuadrante, están obviando que todos comparten el mismo origen, ese 0,0 desde el que se asignan los mismos valores pero con distinto signo en diferente grado y en función del cuadrante mental que habitan...

Y sí, es cierto que muchos arribados a la "movida" no pudieron tener el tiempo, ni las ganas o la necesidad -intelectual al menos-, de depurarse por dentro hasta alcanzar a entender que toda defensa de la Hispanidad bajo sus sesgos doctrinales supone de echo una de cal y otra de arena. La de cal por lo evidente -economía y geopolítica- pero la de arena por lo menos evidente y que creo consiste en traducirla a los códigos comunes como un intento más de polarizar la oferta dominante a la espera de algún rendimiento favorables a sus doctrinas de partida. Llegados a este punto no le será difícil apreciar al observador neutral o que pasa por serlo, que para ese viaje al liberalismo o al marxismo realmente existentes, no hacían falta tantas alforjas.

Tan polarizados estamos que ya no aceptamos las escalas de grises o que las apariencias no lo son sino espurios intentos de engañar con colores sucios o deslucidos, lo que asumimos como la única verdad del blanco al neցro y viceversa sin tras*ición.

Si lo piensa bien quién no esté dispuesto ya a insultarme, todo se parece tanto a los juicios temerarios que se ejecutan contra el actual Papa que parece la Iglesia Católica real, como también la Hispanidad, un juguete roto en manos de quien las quisieran doblegadas a su gusto. Este es comunista, aquel capitalista y todos unos donnadie a expensas de quien se obsesione con ellos sin percatarse de que esa obsesión nunca podrá dar lugar a un juicio justo y sereno. Cuando el maniqueísmo se apodera de nuestro pensamiento, es muy capaz de seducir al punto de que creamos que no solo poseemos toda la verdad de nuestra parte sino que además y en adelante, la Verdad ya no puede hacer otra cosa que recordarse a sí misma...

le veo incluso una ventaja el que los tábanos -así veo, por ejemplo, a los pro rusquis y gustavobuenistas- se dediquen a picotear el león dormido, creyendo que después van a poder dirigirlo a su tema... cuando lo que va a hacer es aplastarlos de un golpe de regazo, en cuanto sigan insistiendo empeñados en marcarle el rumbo
 
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Javier Rubio está absolutamente descartado como referente. Sí, es de esos que utilizan la Hispanidad como envolvente estético de un conjunto de ideas anglosajonas y liberales que son alienígenas para nosotros.
No eran las ideas sino el sistema bajo el que se gestionan. Es posible que el mayor reto que tenemos por delante sea precisamente cambiar el modo en que pensamos tanto la realidad como la fantasía. La estructura del pensamiento lo es todo porque las ideas son su efecto y no al revés, que sean las ideas las que dan cuerpo al sistema de pensamiento, no desde luego las ideas acríticas y continuistas pero sí y de manera determinante, aquellas que desde otras estructuras "discretas" han colonizado nuestro modo de pensar que ya asumimos como natural y el único posible.
 
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