Taipánidas de Mileto
La mujer es el culpable
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Esta pregunta me lleva indefectiblemente a la idea de infinito y por ende a Dios. Sin embargo la existencia en sí misma denota finitud, lo que me lleva a deducir que Dios no existe, por lo tanto tampoco existe un formador de formadores. Esto quiere decir que por nuestra naturaleza finita es imposible que exista nadie realmente formado, ya que nuestra conciencia alcanza solo dos niveles: el formador y el formador de formadores, pero no somos capaces de concebir un formador de formadores de formadores, una idea que nos resulta tan lejana que nos es ajena. Por otro lado, Dios se encuentra al final de una secuencia infinita de niveles de conciencia al que nos resultaría imposible llegar, porque ese final no existe, si existiese sería finito y ya no sería Dios. Si lo pensáis un poco veréis dos cosas: que la existencia de Dios es una paradoja y que solo un ser de conciencia infinita podría considerarse completamente formado.
