Un país donde los presidentes del gobierno son de derechas o de centro derecha desde que alcanza la wikipedia.
Bueno, Éamon de Valera podía ser conservador, pero le molaba mucho eso de mantener industrias estatales paco, proteccionismo, control de capitales, corralitos (uno en 1966 y otro en 1972) y otras veleidades socialistas.
Lo que impresiona es el giro que dieron en 1987 el Fianna Fail junto con la oposición, debe ser que estaban tan arruinados que, o seguían con el modelo "argentino" yéndose al guano absoluto y convirtiéndose en un país frío, húmedo y perdido de la mano de dios, o sacrificaban el 50% de su poder y control de la economía para poder mantenerse en el poder en el largo plazo. Obviamente tuvieron en cuenta el coste político de liberalizar una economía estatizada, y es que hay 2 años de recesión como mínimo, hasta que los factores productivos empleados por el estado se reubican a medida que empieza a entrar inversión nacional y extranjera en el mercado. En Chile pasó algo similar en los 80, y prácticamente en todos los países socialistas que deciden renunciar a parte de su poder sobre los individuos, véase ciertas economías del este como Chequia, Polonia, Eslovaquia o Hungría, llevan creciendo 25 años sin parar, precedidos de años malos entre 1989 y 1992. En un sistema socialista lo que sucede es al revés, se crece burbujeadamente los 2 primeros años porque el estado empieza a gastar y a producir cosas que la gente no quiere (a crear una burbuja, en definitiva, ya sea imprimiendo dinero y regalándolo, ya sea ordenando a los individuos a que persigan el fin marcado por el comité de planificación) y luego la economía se estanca sine die, con burbujas intermedias. Al principio crece mucho el PIB, porque es un indicador que tiene solo en cuenta el gasto, pero luego cae estrepitosamente o se estanca.