Pues voy a escribir un poco sobre el proceso en el que estoy.
Cuando en Enero pasado tras enamorarme de un shorteno me propusiera mejorar mi cuerpo no sabia yo lo hecho polvo que estaba.
Desde entonces a esta parte he perdido peso y he ganado peso, me he lesionado en diferentes articulaciones, he estado en dos gym diferentes, he tenido periodos de inactividad, he vuelto y puede decirse que en la escalera he avanzado pero ni de fruta coña lo que yo pensaba que avanzaría.
A nivel salud los beneficios son brutales, de eso no hay dudas; como limpio, duermo bien y hago ejercicio. Estoy más activo, con mejor humor y con menos ansiedad. También he mejorado mis tallas y mi atractivo, la ropa no miente, mis chances han mejorado.
Pero hasta llegar a donde yo me propongo llegar aún me queda muchísimo camino y las lesiones no ayudan una cosa, desmotivan. Esa es la principal dificultad que me he encontrado desde los primeros entrenamientos, que cuando tú eres un chaval tu capacidad de digerir ejercicio es brutal y ahora con 40 años tienes los tendones de cristal y todo cuanto hagas debe adecuarse a una adaptación progresiva. De lo contrario vas al hoyo.
No vale con estar un día arriba y darle durísimo a los hierros. Te lesionas. Te jorobas en tus días prime. No en tus días chof.
También la principal ventaja o facilidad que yo tengo es haber hecho deporte en la juventud porque tu cuerpo y tu mente tienen ese recuerdo respecto de las sensaciones de fatiga y esfuerzo; eso ayuda muchísimo.
Lo que aprendí del entrenador personal que contraté para las primeras sesiones es que uno no debe pasarse con una lesión, sino que debe seguir entrenando y añadiendo ejercicios de rehabilitación.
Ahora estoy estropeado del hombro izquierdo y me temo que es del manguito rotador y no una prelesión, llevo ya algunas semanas con eso y me está frenando brutal el entrenamiento del tren superior. Pero es lo que hay. Lo más sangrante es que la lesión no vino de entrenar sino de un trabajo de albañilería que hice al final del verano.
Estimo que ponerme como quiero, o más bien acercarme mucho, me va a llevar al menos unos 2 o 3 años.
Es lo malo de hacerse BIEGO.
Cuando en Enero pasado tras enamorarme de un shorteno me propusiera mejorar mi cuerpo no sabia yo lo hecho polvo que estaba.
Desde entonces a esta parte he perdido peso y he ganado peso, me he lesionado en diferentes articulaciones, he estado en dos gym diferentes, he tenido periodos de inactividad, he vuelto y puede decirse que en la escalera he avanzado pero ni de fruta coña lo que yo pensaba que avanzaría.
A nivel salud los beneficios son brutales, de eso no hay dudas; como limpio, duermo bien y hago ejercicio. Estoy más activo, con mejor humor y con menos ansiedad. También he mejorado mis tallas y mi atractivo, la ropa no miente, mis chances han mejorado.
Pero hasta llegar a donde yo me propongo llegar aún me queda muchísimo camino y las lesiones no ayudan una cosa, desmotivan. Esa es la principal dificultad que me he encontrado desde los primeros entrenamientos, que cuando tú eres un chaval tu capacidad de digerir ejercicio es brutal y ahora con 40 años tienes los tendones de cristal y todo cuanto hagas debe adecuarse a una adaptación progresiva. De lo contrario vas al hoyo.
No vale con estar un día arriba y darle durísimo a los hierros. Te lesionas. Te jorobas en tus días prime. No en tus días chof.
También la principal ventaja o facilidad que yo tengo es haber hecho deporte en la juventud porque tu cuerpo y tu mente tienen ese recuerdo respecto de las sensaciones de fatiga y esfuerzo; eso ayuda muchísimo.
Lo que aprendí del entrenador personal que contraté para las primeras sesiones es que uno no debe pasarse con una lesión, sino que debe seguir entrenando y añadiendo ejercicios de rehabilitación.
Ahora estoy estropeado del hombro izquierdo y me temo que es del manguito rotador y no una prelesión, llevo ya algunas semanas con eso y me está frenando brutal el entrenamiento del tren superior. Pero es lo que hay. Lo más sangrante es que la lesión no vino de entrenar sino de un trabajo de albañilería que hice al final del verano.
Estimo que ponerme como quiero, o más bien acercarme mucho, me va a llevar al menos unos 2 o 3 años.
Es lo malo de hacerse BIEGO.
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