Ang€lica
Militia est vita hominis super terram
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Lejos quedaron los tiempos en que los perros emparentaban con los lobos.
Tras siglos de cruces, biotecnología manipulando y mutando su ADN para hacerlos cada vez más compatibles con los humanos, los cientos de razas, y peor aún, mestizajes mediocres entre los perros, nos encontramos con un nuevo ser:
Este ser es arrebatado desde muy cachorro de los pechos de su progenitora; los humanos que lo raptan le hacen creer durante toda su vida que él también es un humano.
Lleva milenios soportando en su adn una carga emocional que no es propia de un animal depredador cuyo medio es asilvestrado.
A lo largo de su vida va encontrando incongruencias en su condición de "humano": intenta hablar y no le sale, quiere salir SIEMPRE que salen sus dueños pero se tiene que quedar, no puede hacer sus necesidades o comer cuando le da la gana, sinó cuando se lo permiten, no tiene un plato en la mesa como la gente...etc
Si todo eso no fuera suficiente, aparece en la sociedad la idolatría al bestialismo: Poner al animal en el lugar de un "semidiós" o un "dios". El perro, que ya es un animal extremadamente dependiente, que necesita atención y reafirmación constante, se encuentra con individuos que le ponen ropita, le montan en carritos de bebé, se morrean con ellos (o cosas peores) le ponen por encima de los humanos, les hacen.fiestas y perfiles en redes, y los llevan a sesiones de "spa" y gaierias varias.
Debido a esas miles de mutaciones, esa carga emocional exacerbada, esas incongruencias por un lado y esa idolatría desquiciante por otro, ¿Qué ocurre al final?
Que de todos los seres no humanos que existen en la Tierra, el perro es el único que sufre como veintisiete problemas psicológicos distintos. No hay lobo, cánido o animal de cualquier especie que esté tan tocado de la cabeza como el perro, le hemos jo***.
Los gatos, que son más inteligentes, independientes y continúan ejerciendo todos sus instintos (no dejan de ser unas fieras, que por cierto, no me gustan nada) miran al perro con una cara de entre desprecio y vergüenza ajena. Cuando te fijas, te das cuenta de que el gato está pensando que el perro es gili***, y en lo mas profundo de tu ser, sabes que tiene razón.
En fin, creo que es de justicia darse cuenta de todo ello, sanar esta sociedad enferma y llamar a la razón, ser conscientes de que nuestra degradación psicológica esta llegando a límites de la locura.
Los perros ya no son lobos ni amigos del hombre, son seres mutantes y enloquecidos, victimas de una sociedad enferma y degradada.
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Tras siglos de cruces, biotecnología manipulando y mutando su ADN para hacerlos cada vez más compatibles con los humanos, los cientos de razas, y peor aún, mestizajes mediocres entre los perros, nos encontramos con un nuevo ser:
Este ser es arrebatado desde muy cachorro de los pechos de su progenitora; los humanos que lo raptan le hacen creer durante toda su vida que él también es un humano.
Lleva milenios soportando en su adn una carga emocional que no es propia de un animal depredador cuyo medio es asilvestrado.
A lo largo de su vida va encontrando incongruencias en su condición de "humano": intenta hablar y no le sale, quiere salir SIEMPRE que salen sus dueños pero se tiene que quedar, no puede hacer sus necesidades o comer cuando le da la gana, sinó cuando se lo permiten, no tiene un plato en la mesa como la gente...etc
Si todo eso no fuera suficiente, aparece en la sociedad la idolatría al bestialismo: Poner al animal en el lugar de un "semidiós" o un "dios". El perro, que ya es un animal extremadamente dependiente, que necesita atención y reafirmación constante, se encuentra con individuos que le ponen ropita, le montan en carritos de bebé, se morrean con ellos (o cosas peores) le ponen por encima de los humanos, les hacen.fiestas y perfiles en redes, y los llevan a sesiones de "spa" y gaierias varias.
Debido a esas miles de mutaciones, esa carga emocional exacerbada, esas incongruencias por un lado y esa idolatría desquiciante por otro, ¿Qué ocurre al final?
Que de todos los seres no humanos que existen en la Tierra, el perro es el único que sufre como veintisiete problemas psicológicos distintos. No hay lobo, cánido o animal de cualquier especie que esté tan tocado de la cabeza como el perro, le hemos jo***.
Los gatos, que son más inteligentes, independientes y continúan ejerciendo todos sus instintos (no dejan de ser unas fieras, que por cierto, no me gustan nada) miran al perro con una cara de entre desprecio y vergüenza ajena. Cuando te fijas, te das cuenta de que el gato está pensando que el perro es gili***, y en lo mas profundo de tu ser, sabes que tiene razón.
En fin, creo que es de justicia darse cuenta de todo ello, sanar esta sociedad enferma y llamar a la razón, ser conscientes de que nuestra degradación psicológica esta llegando a límites de la locura.
Los perros ya no son lobos ni amigos del hombre, son seres mutantes y enloquecidos, victimas de una sociedad enferma y degradada.
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